La biología del amor, el proceso de autopoiesis, la teoría de Santiago, la biopedagogía, el proceso de conocimiento fractal, producto de los procesos biológicos y complejos de la naturaleza humana, han permitido entender las nuevas emergencias del proceso educativo y sus nuevos elementos constituyentes de la pedagogía del aprendizaje, desde la naturaleza propia de la vida y la interacción continua de los sistemas vivos, como elemento fundamental en la construcción del conocimiento en la relación con el otro y lo otro, reconociendo al otro como un legitimo otro en la convivencia con uno, lo cual es llamado por Maturana (1998) como biología del amor.
¿Cómo resuena la biología del amor en relación con la mediación pedagógica y la pedagogía del aprendizaje?
1. ¿Cómo resuena la biología del amor en relación con la
mediación pedagógica y la pedagogía del aprendizaje?
“Acercaos al abismo, les dijo. Tenemos miedo, respondieron. Acercaos al abismo, les dijo.
Se acercaron. El los empujó... y salieron volando”
G. Apollinaire Apollinaire
(La brújula interior)
La biología del amor, el proceso de autopoiesis, la teoría de Santiago, la
biopedagogía, el proceso de conocimiento fractal, producto de los procesos
biológicos y complejos de la naturaleza humana, han permitido entender las
nuevas emergencias del proceso educativo y sus nuevos elementos
constituyentes de la pedagogía del aprendizaje, desde la naturaleza propia de la
vida y la interacción continua de los sistemas vivos, como elemento fundamental
en la construcción del conocimiento en la relación con el otro y lo otro,
reconociendo al otro como un legitimo otro en la convivencia con uno, lo cual es
llamado por Maturana (1998) como biología del amor.
Para comprender mejor lo que queremos decir sobre la mediación
pedagógica, como su nombre lo dice el es proceso que permite el tratamiento de
las diferentes interacciones y relaciones que se dan entre la vida o el objeto o
sistema de aprendizaje, en palabras de Gutiérrez, “por mediación pedagógica
consideramos el tratamiento de contenidos y de las formas de expresión de los
2. diferentes temas a fin de hacer posible el acto educativo, dentro del horizonte de
una educación concebida como participación, creatividad, expresividad y
relacionalidad” (61).
El mundo globalizado favorece obtener un acceso inmediato a toda la
información, uno de los objetivos que busca la escuela tradicional, llenar de
información a sus estudiantes, pero los modelos tradicionales de enseñanza no
han sabido vincular los procesos de aprendizaje con las emociones y el afecto de
las personas, por ello a pesar de tener profesionales muy bien formados, no saben
conectar todos sus conocimientos con las relaciones dialógicas de la vida, sin
entender al otro como un legítimo otro en la convivencia con uno.
Los modelos tradicionales de enseñanza tienen una deuda con la formación
de todas las personas y estudiantes que vivieron su rigor, su disciplina, bajo la
creencia que el conocimiento se daba a través de la trasmisión, de una persona
quien lo posee hacia otra persona que lo necesita, o estaba en búsqueda del
Biología del amor
Mediación pedagógica
Pedagogía del Aprendizaje
Teoría de Santiago
Morfogénesis
Autopoiesis
3. mismo. Producto de este tipo de aprendizaje tenemos una sociedad llena de
profesionales que saben muy bien el discurso de la rentabilidad y el mercado
global, capaces de responder a los intereses personales por encima del bien
general y social, ignorando al otro como un ser legitimo en la convivencia con el
otro.
La formación de maestros en desarrollo necesariamente debe de tomar otras
concepciones respecto de los procesos formativos que las instituciones de
educación superior tienen de los maestros en potencia, articulando otras formas
de entender el mundo y la sociedad a partir de los procesos bio-educativos, pues
los modelos conductistas y tradicionales de enseñanza se convirtieron en
procesos anacrónicos, los cuales no responden a los retos actuales, donde se
debe pasar de modelos tradicionales a modelos emergentes, pasando de la
enseñanza al aprendizaje.
En este orden de ideas se hace necesario y urgente vincular los procesos
volitivos dentro del aprendizaje de los estudiantes, sin miedo a formar desde el
afecto y desde la biología del amor, ayudando a formar hombres y mujeres felices,
comprometidos con su proceso de aprendizaje real, un aprendizaje que se
convierte en significativo a partir de los aprendizajes previos sabiendo vincular a
los afectos y emociones en su proceso educativo.
Los procesos educativos son contradictorios en la infancia y en la juventud a
saber Maturana (1992)
4. Imagen tomada: http://1.bp.blogspot.com/saGiBcpmlYk/U0SjGOr87mI/AAAAAAAAAxo/tNvfG4vOFGE/s1600/Imagen+Vanessa.jpg
En la infancia los guiamos en la colaboración, el respeto mutuo, la
aceptación del otro, el respeto por sí mismo, el compartir y la
legitimidad de la sensualidad. En el pasaje a la vida adulta los guiamos
en la apropiación, la lucha, la negación del otro, la competencia, la
dominación y la negación de la sensualidad valorando sobre todo la
razón. Es decir, guiamos a nuestros hijos durante la infancia en la
biología del amor, y en la juventud los guiamos a la biología de la
agresión. Así como el amor es el dominio de las acciones que
5. constituyen a otro como un legítimo otro en convivencia con uno, la
agresión es el dominio de las acciones que niegan a otro en la
convivencia con uno (65)
La biología del amor se constituye en el escenario de reconocimiento y
respeto por el otro, reconociendo la humanidad en y por el otro, la biología del
amor, nos permite humanizar todo el proceso educativo, transformarlo a partir de
la vida misma, es claro que existimos a partir del aprendizaje natural de todos
nuestra naturaleza viva, Maturana lo denomina autopoiesis, como el elemento
singular que crea y permite la vida, a través de un proceso natural de la
autoorganización de los organismos vivos, los cuales con su entorno forman un
sistema.
Por naturaleza venimos configurados con la capacidad intrínseca de aprender,
todos nuestros sistemas interactúan de manera coordinada y dialógica,
favoreciendo todos los procesos de aprendizaje a partir de la comunicación, ella
se convierte en el elemento fundamental que favorece una constante información
de retorno en el proceso de la vida misma. Inicialmente diremos que el estar vivos
implica un estado continuo de aprendizaje, la esencia de estar vivo es sinónimo de
estar en interacción con los sistemas donde se está inmerso.
Para la comprensión de lo que es la comunicación humana y dentro de ella la
comunicación en el seno de la educación, Maturana (1998) afirma que la
comunicación no es transmisión de información, sino más bien, una coordinación
de comportamiento entre organismos vivos a través del acoplamiento estructural
6. mutuo. Así Maturana, (2008) “el lenguaje emerge cuando hay comunicación sobre
la comunicación. En otras palabras, el proceso de “lenguajeo‟, tiene lugar cuando
existe una coordinación de las coordinaciones de comportamiento.” (297)
La pedagogía del aprendizaje favorece los procesos de generación y
apropiación de conocimiento, está comprobado que los procesos de mediación
pedagógica deben favorecer la interacción constante con el objeto de
conocimiento, ya que el ser humano existe a través de una relación dialógica, el
cual permite los conceptos abstractos, representaciones mentales, y
autoconsciencia, dotando al ser humano una consciencia reflexiva. Maturana
(2008) “Al saber que sabemos, nos damos a luz a nosotros mismos” (p. 299)
El aprendizaje no se basa en ningún proceso de transferencia del entorno al
interior del organismo. En esta concepción de aprendizaje nuestros sentidos no
son ventanas por las que entra un mundo ajeno a nosotros sino que son
interlocutores con el mundo. Los puntos básicos para una visión de los sentidos
como interlocutores activos del medio circundante.
Maturana y Varela (1998), dieron respuesta a la pregunta sobre la naturaleza
de la vida a través de la autopoiesis, la cual se configura en la base para
comprender los procesos de aprendizaje y cognitivos, los cuales se clarifican a
partir de la “teoría de Santiago”. Donde:
7. Imagen tomada de: http://photos1.blogger.com/blogger2/3433/4054/1600/manos%20mundo.jpg
El concepto de cognición es mucho más amplio que el de pensamiento.
Incluye percepción, emoción y acción: todo el proceso vital. En el reino
humano, la cognición incluye también el lenguaje, el pensamiento
conceptual y todos los demás atributos de la consciencia humana
organismo humano, el sistema nervioso, el sistema inmunológico y el
sistema endocrino forman en realidad una única red cognitiva
(Maturana, 2002, p.85).
Es claro que la naturaleza de la vida a partir de los sistemas es crear una red
constante de intercambio de información en permanente aprendizaje, Capra
8. (1998) afirma “El concepto de cognición en la teoría de Santiago va mucho más
allá de la mente racional, al incluir en su totalidad al proceso de la vida” (274). Se
describe como las interacciones de un organismo con su entorno.
La cognición no es pues la representación de un mundo con existencia
independiente, sino más bien un constante alumbramiento del un mundo a través
del proceso de vida. Las interacciones cognitivas y el proceso de vida mismo es
un proceso de cognición (Maturana y Varela, 1998 p. 277).
En este orden de ideas se puede afirmar que vivir es conocer. Estos nuevos
conceptos desde la bio-ciencias, la biopedagogía, nos dicen que debemos
empezar a pensar sistémicamente, desplazando nuestras formas de ver y vivir la
vida, es necesario recuperar humanizar el proceso educativo, Capra, (1998) “Para
recuperar nuestra plena humanidad, debemos reconquistar nuestra experiencia de
conectividad con la trama entera de la vida”. (p. 305)
Todo se modifica cuando se aprende porque aprender no se resume en
aprender cosas, si esto se entiende como ir acumulando saberes. El aprendizaje
es una red o trama de interacciones neuronales muy complejas y dinámicas, que
van creando “estados generales cualitativamente nuevos” en el cerebro humano.
A esto Assmann lo denomina “morfogénesis del conocimiento” (39). El aprendizaje
no modifica sólo una cosa, sino, todo el sistema.
9. Además, propone el concepto de “morfogénesis (aparición de la forma) social”
como noción alternativa ante la antigua dualidad estructura social/cambio social.
“A su vez, el concepto “morfogénesis del conocimiento‟ pretende lo mismo en
relación con la antigua dualidad enseñar/aprender, superando, de ese modo, las
horribles nociones de transmisión del conocimiento y de asimilación de
conocimientos.” (Assmann, 2002 p. 43)
Es importante empezar a seducir los nuevos conceptos de aprendizaje, educar
desde las emociones y desde el ser, pues es necesario educar desde la biología
del amor, la cual se convierte en un pilar fundamental en los nuevos procesos de
aprendizaje, Assmann (2002) ”Cuando se dan procesos en los que el alumno es
consciente de lo que significa para él aprender y quiere seguir ineludiblemente en
ellos” (p. 31). Es cuando se entiende lo que nos dice que educar tiene mucho que
ver con la capacidad de seducir.
Educador es quien consigue deshacer las resistencias al placer del
conocimiento. ¿Seducir para qué? para un saber/sabor, por lo tanto, para el
conocimiento como elemento fundamental de gozo, la pedagogía es encantarse y
seducirse recíprocamente con experiencias de aprendizaje. Assman (2002) “En
los docentes se debe hacer visible el gozo de estar colaborando con algo tan
estupendo como hacer posible e incrementar la unión profunda entre procesos
vitales y de conocimiento.” (p. 33) Un buen educador favorece los procesos de
aprendizaje a partir de la mediación pedagógica.
10. Imagen tomada de: https://static1.squarespace.com/static/5151315ee4b0b73e82369d33/t/53804c0ae4b06d57f251b75e/1431312928171/wadi-rum-bivouac
Las palabras de Bauman, (2001) nos parecen muy acertadas para finalizar:
Preparar para la vida “esa perenne e invariable tarea de toda
educación- debe significar ante todo el cultivo de la capacidad de vivir
cotidianamente en paz con la incertidumbre y la ambigüedad, con una
diversidad de puntos de vista y con la inexistencia de autoridades
infalibles y fiables; debe significar la instalación de la tolerancia con la
diferencia y la voluntad de respetar el derecho a ser diferente; debe
significar el fortalecimiento de las facultades criticas y autocríticas y el
valor necesario para asumir la responsabilidad por las elecciones que
se hacen y sus consecuencias; debe significar la formación de la
capacidad para “cambiar los marcos” y para resistir la tentación de huir
de la libertad, con la ansiedad de la indecisión que acarrea junto con
las alegrías de lo nuevo y lo inexplorado (p. 159)
11. En conclusión, la mediación pedagógica permite facilitar los procesos
naturales del aprendizaje por medio de la interacción constante a través de las
relaciones dialógicas, producto de una red interconectada con la vida, es
necesario vincular la biología del amor como fundamento social, donde las
relaciones sociales se ordenan desde la emoción y no desde la razón, legitimando
las formas de relaciones sociales por medio del lenguaje, y como lo afirma
Maturana (1998) reconocer al otro como un legítimo otro en la convivencia con
uno, por medio de relaciones constructoras, de paz, de reconocimiento,
favoreciendo procesos de aprendizaje por medio de gozo y afecto dentro del
proceso de aprendizaje.
Los nuevos procesos desde la pedagogía del aprendizaje, permiten vincular la
vida como proceso vital a través de la autopoiesis, las formas de adoptar el
conocimiento a través de la teoría de Santiago y su proceso de morfogénesis,
como elemento que configurar un reconocimiento del otro y la naturaleza
planetaria como elementos de transformación en la vida social mediado por la
biopedagogía y la biología del amor.
12. Referencias Bibliográficas:
Assman, H. (2002): Placer y Ternura en la Educación. Hacia una Sociedad
Aprendiente. Ed. Narcea, Madrid
Bauman, Z. (2001): La Modernidad Líquida. Ed. FCE. Buenos Aires
Capra, F. (1998): La Trama de la Vida. Edit. Anagrama. Madrid.
Gutiérrez, F. y Prieto. (1999): La Mediación Pedagógica, apuntes para una
educación a distancia alternativa. Ed. CICUS la Crujía. Argentina
Maturana y Dávila. Biología del Tao y El Camino del Amar.
Maturana, H. (2002): Transformación en la Convivencia. Ed. Dolmen. Santiago de
Chile.
Maturana, H. (1992): El Sentido de lo Humano. Ed. Gránica. Buenos Aires,
Argentina.
Maturana, H y Varela F. (1998) De máquinas y seres vivos. Ed. Universitaria
Morin, E. (2003): El Método. La Humanidad de la Humanidad. La Identidad
Humana, Madrid: Ed. Cátedra.
Morin, E.(1994): Introducción Al Pensamiento Complejo. Ed. Gedisa. Barcelona
Varela , F (1998): Conocer. La Ciencias Cognitivas: Tendencias y Perspectivas.
Cartografía de las Ideas Actuales. Ed. Gedisa. Barcelona.