1. Nuestra realidad en los centros de trabajo
Independientemente del nivel educativo, la educación como un hecho y
una necesidad social, los seres humanos en todos momentos de la vida estamos
sujetos a ella, de primera instancia en la familia, en el medio donde nos
desenvolvemos, en las actividades sociales y específicamente en espacios
propiamente destinados a proporcionar el servicio, reconociendo los centros
educativos como el núcleo de la actividad y el aula como un espacio de
operaciones didácticas es fundamental trabajar en equipo, disposición a incorporar
innovaciones, estar atento a los cambios internos y externos en el que el factor
humano y el ambiente de trabajo son parte medular.
Por ello es imperante que el clima de trabajo en el que nos desenvolvemos sea
favorable, mucho contribuirá a que los resultados de una institución sean mayores
y mejores. De las presentaciones del diagnóstico que aplicaron los compañeros
maestros a las distintas organizaciones escolares, me parece que solo fue una
idea general de lo que realmente se percibe del clima institucional en las escuelas,
nos deja entrever como es que los factores internos y externos tienen mucho que
ver para que una institución sea productiva o no. La productividad es la relación
entre la producción obtenida por un sistema productivo y los recursos utilizados
para obtener dicha producción, como argumenta Leal, Vicente (2010).
Los factores que afectan la productividad son los factores internos y externos.
Como argumenta Urbina, Carlos (2005). Los factores internos son los que se
encuentran dentro de la institución como terrenos y edificios, materiales, energía,
maquinas y equipo, recursos humanos, etc. y los externos son los que no
dependen directamente de la organización.
Cualquier organización se puede evaluar, mejorar, es la clave para la mejora del
rendimiento y de los resultados; otro factor que afecta el clima organizacional es la
percepción que tienen las personas de las condiciones de su entorno, ésta puede
ser subjetiva e individual; por lo tanto, puede ser variable y hasta contagiosa. La
2. percepción se ve afectada por factores físicos, psicológicos, sociales, económicos,
etc.
Finalmente me fue mucho muy interesante escuchar las presentaciones porque
me
di
cuenta
de
cómo
los
trabajadores
percibimos
a
la
institución
independientemente de la realidad y como es que sin darnos cuenta vamos
formando una cultura organizacional, sus efectos en el comportamiento de sus
miembros es fuertísima como en la rotación o retención voluntaria, de manera que
entre mayor sea la correspondencia entre los valores del trabajador y la cultura
organizacional, mayor será el compromiso del trabajador hacia la organización.
También debo reconocer que somos nosotros los que fomentamos o no una
cultura funcional, que se ve influenciada por el liderazgo y la toma de decisiones.
La cultura organizacional no es permanente, ni rígida, sino que va cambiando
constantemente: contribuyamos a la construcción de una cultura en pro de
nuestras organizaciones.
Mtra. Rosalba Bernal Felipe.