Este documento habla sobre la unificación de Corea del Norte y Corea del Sur. En 3 oraciones resume que el autor cree que el amor traerá la unificación de Corea, que él se reunió con el presidente Kim Il-sung de Corea del Norte en 1991 para discutir la unificación pacífica, y que cree que sólo a través del amor entre los pueblos del norte y el sur se podrá lograr la unificación.
FICHA DE LA VIRGEN DE FÁTIMA.pdf educación religiosa primaria de menores
La Peninsula de Corea Dividida
1. La península de Corea dividida. El Amor traerá la Unificación.
“Se puede dividir la Tierra pero no a su gente”
• Verdadero Padre Sun Myung
Moon su AUTOBIOGRAFÍA.
• “Como un Ciudadano Global
Amante de la Paz”
• Capítulo VI – Sección VI.
• Editado en Madrid, España.
• Pure Love Education Academy.
• Verano del 2014.
2.
3. • El Verdadero Padre Sun Myung Moon y
• su amada esposa la Verdadera Madre
• Hak Ja Han.
• Ellos son los Verdaderos Padres del Cielo,
• la Tierra y de Toda la Humanidad.
• Enviados por Dios en el Siglo XX.
• Fundadores de la:
• Federación de Familias para la Unificación
y Paz Mundial.
5. • La península de Corea es de los últimos países divididos
que quedan en el mundo. Tenemos la responsabilidad de
unificarla. No podemos legar a nuestros descendientes una
patria dividida.
• Es inadmisible que un pueblo esté dividido y que gente
amante de la paz no pueda ver a sus padres ni hermanos.
• La línea divisoria que separa Corea del Norte de Corea del
Sur fue trazada por los seres humanos.
• Se puede dividir así al territorio, pero no a la gente.
• El hecho de que después de estar separados más de 50
años no nos olvidemos unos de otros y sigamos
extrañándonos, demuestra que somos un solo pueblo.
6. • El pueblo coreano era conocido tradicionalmente como la
“gente que viste de blanco” por el color de nuestra
vestimenta tradicional.
7. • El blanco es símbolo de la paz, y nuestra gente es gente
de paz. Durante la ocupación japonesa, coreanos, chinos y
japoneses vivían en Manchuria y Siberia, a veces
ayudándose y otras veces matándose entre ellos.
• Durante ese tiempo, los coreanos nunca llevaron espadas
ni cuchillos, como los japoneses y los chinos. En vez de
eso, llevábamos piedras de pedernal.
8. • Encender un fuego en las heladas extensiones de
Manchuria y Siberia era una forma de protegerse la vida.
Somos gente así, respetamos al Cielo, defendemos
principios morales y amamos la paz.
• Nuestro pueblo derramó mucha sangre durante la
ocupación japonesa y la guerra civil coreana.
9. • Sin embargo, no sirvió para unificar nuestro país ni
establecer una soberanía de paz. Nuestro país fue partido
en dos, y una mitad se convirtió en una sociedad oscura
comunista.
• Para establecer la soberanía de nuestro pueblo
necesitamos la unificación. Debemos poner fin a la división
entre Norte y Sur, si queremos tener paz.
• Sólo después de alcanzar la unificación pacífica y restaura
nuestra soberanía, lograremos la paz mundial.
• El pueblo coreano nació para traer la paz a este mundo.
Todo tiene un nombre y los nombres tienen significado.
Nuestros atuendos tradicionales blancos son fáciles de ver,
tanto de día como de noche.
10. • Es bueno usar el blanco para hacer señas de noche,
porque resulta fácilmente visible en la oscuridad. De
manera similar, nuestro pueblo está destinado a transmitir
mensajes de paz por todo el mundo, tanto de día como de
noche.
• El Norte y el Sur están divididos por la línea de alto el
fuego, pero ese no es el problema. Una vez que retiremos
esa línea, encontraremos una barrera aún mayor entre
nosotros y Rusia y China.
• Para que nuestro pueblo pueda disfrutar de la verdadera
paz tendremos que superar también esas otras líneas de
alto el fuego. Será difícil, pero no imposible. Lo importante
es nuestra propia actitud.
11. • Creo que cuando una persona suda debería sudar hasta la
última gota; sudar hasta lo último que haya en su corazón.
De esa manera no tendrá qué lamentarse y todo se
purificará y quedará en orden.
• Lo mismo vale cuando se intenta algo difícil. La dificultad
solamente terminará cuando se haya alcanzado la victoria
a cada nivel y todo haya quedado claro. Todos los asuntos
que tratéis deben quedar completamente resueltos.
Entonces podrán dar su fruto.
• No podemos restablecer la plena soberanía de nuestro
pueblo sin pasar por esas arduas dificultades.
• Hoy en día, mucha gente habla de la unificación pacífica.
Yo sin embargo, ya hablaba de esto cuando nadie se
12. • Atrevía siquiera a utilizar la expresión “reunificación
pacífica”, por temor a ser acusados de violar la Ley
Anticomunista y la ley de Seguridad Nacional.
• Hoy, cuando la gente me pregunta que hacer para lograr la
unificación, repito lo que siempre he dicho sobre este
asunto:
• “Si los surcoreanos aman a Corea del Norte más que al
Sur y los norcoreanos aman a Corea del Sur más que al
Norte, podemos unificar la península hoy mismo”.
• Arriesgué mi vida para ir a Corea del Norte y reunirme con
el presidente Kim en 1991 porque tenía ese tipo de amor.
• Logré acuerdos con el presidente Kim sobre reuniones de
familias separadas, cooperación económica Norte-Sur,
14. • El Abrazo de nuestro
Verdadero Padre Sun Myung
Moon al que era uno de sus
peores enemigos Kim IL Sung,
quién planeó matarle en
diversas ocasiones, por ser
anticomunista.
• Cuando se reunieron todo el
hielo se derritió y el calor del
Amor Verdadero de nuestro
Verdadero Padre triunfó
haciéndoles hermanos y
amigos para siempre.
15. • Desarrollo del monte Kumgang como destino turístico,
desnuclearización de la península coreana, y preparación
de una cumbre Norte-Sur.
• Nadie pensaba que un anticomunista podía ir a un país
comunista y abrir las compuertas de la unificación, pero
acabé sorprendiendo al mundo.
• Antes de mi encuentro con el presidente Kim pronuncié un
discurso de 2 horas titulado “La sangre es más espesa
que el agua” en el salón de la Asamblea Mansudae, sede
de la Asamblea popular suprema, el máximo órgano
legislativo de Corea del Norte.
• Ese día hablé a sus dirigentes de cómo unificar el Norte y
el Sur mediante el amor.
16. • Me puse ante esos líderes norcoreanos pertrechos con la
filosofía de Kim IL Sung, y dije exactamente lo que creía.
“El Norte y el Sur deben unificarse”.
• Les dije, “pero ni las armas de fuego ni las espadas lo
conseguirán. La unificación Norte-Sur no ocurrirá por la
fuerza militar.
• Incluso la guerra de Corea fracasó en este sentido y es de
necios pensar que se puede hacer otro intento usando la
fuerza militar. Tampoco se logrará la unificación con la
ideología Juche que ustedes defienden.
• ¿Qué lo logrará entonces? El mundo no funciona sólo por
el poder de los seres humanos. Puesto que Dios existe,
nada puede hacerse sólo con el esfuerzo humano.
17. • Incluso en situaciones de maldad, como una guerra, Dios
obra Su Providencia. Por ello, el Norte y el Sur no pueden
unirse mediante la ideología Juche que pone al hombre en
el centro.
• A una patria unificada sólo puede llegarse mediante el
Diosismo. Dios nos protege y el tiempo de la unificación
se acerca.
• La unificación es el destino, la tarea que hemos de llevar a
cabo en nuestra era. Si no cumplimos ahora la sagrada
tarea de unificar la patria, no seremos capaces de
mantener la cabeza erguida en presencia de nuestros
antepasados ni descendientes por el resto de la eternidad.
18. • ¿Qué es el Diosismo?
• Es la práctica del amor perfecto de Dios. Ni las derechas ni
las izquierdas pueden unificar al Norte y el Sur.
• Sólo será posible cuando haya un “pensamiento centrado”
capaz de armonizar a derechas e izquierdas.
• Para recorrer el camino del amor, deben disculparse ante
el mundo por haber invadido el Sur. Entiendo que Corea
del Norte tiene a 20.000 espías viviendo en el Sur.
• Envíenles inmediatamente una orden a todos para que se
entreguen a las autoridades surcoreanas. Si lo hacen, voy
a impartirles una educación que rectifique su ideología y
los convierta en patriotas que contribuyan a la unificación
pacífica del Norte y el Sur”.
19. • Mientras hablaba, golpeaba la mesa. Las caras del señor
Yun Ki Bok y del viceprimer Ministro, Kim Dal Hyun, se
pusieron tensas. Era consciente de los peligros a los que
me exponía al hacer estas declaraciones, pero tenía que
decir lo que había venido a decir.
• No estaba simplemente tratando de sorprender al público.
Sabía que el presidente Kim y su hijo Kim Jong IL iban a
ser informados de mi discurso de inmediato, palabra por
palabra. Por eso quería expresar mis intenciones
claramente.
• Cuando terminé, algunos de los norcoreanos presentes
incluso protestaron, exigiendo saber cómo me atrevía a
hablar de esa manera.
20. • Miré a mi alrededor y no ví más que caras lívidas. Los
miembros de nuestra iglesia que estaban conmigo me
dijeron: “El discurso tuvo un tono muy fuerte y la atmósfera
en la audiencia no fue la mejor”.
• Sin embargo, me mantuve firme. “¿Para qué vine aquí?”,
les pregunté. “No he venido a ver la tierra de Corea del
Norte. Si me fuera de aquí sin decir lo que había que decir,
el Cielo me castigaría. Aunque mi discurso de hoy sea
utilizado como excusa para negarme una reunión con el
presidente Kim y para expulsarnos del país, aún así tenía
que decir lo que vine a decir”.
• El 8 de julio de 1994 el presidente Kim murió súbitamente.
Su muerte se produjo cuando las relaciones Norte-Sur
21. • Estaban pasando por su peor momento. Se habían
desplegado misiles Patriot en territorio surcoreano y los
halcones en Estados Unidos abogaban por destruir las
instalaciones nucleares norcoreanas de Yongbyon.
• Parecía que la guerra podía estallar en cualquier momento.
Corea del Norte anunció que no recibiría a nadie fuera del
país que quisiera asistir al funeral, pero yo sentí que era
importante enviar a alguien.
• Quería cumplir con mis obligaciones morales, ya que había
establecido una relación de hermandad con el presidente
Kim. Llamé a Bo Hi Pak. “Ve de inmediato a Corea del
Norte como mi representante, para transmitir mi pésame
por la muerte del presidente Kim”, le dije.
22.
23. • “Nadie puede entrar en Corea del Norte ahora”. Me
contestó. “Sé que es difícil, pero de un modo u otro debes
ir. No me importa si tienes que cruzar a nado el río Yalu.
Ve y transmite mis condolencias”.
24. • Bo Hi Pak viajó primero a Beijing y arriesgó su vida para
comunicarse con Corea del Norte. Luego el presidente Kim
Jong IL dio instrucciones: “Se hará una excepción para un
representante del presidente Moon. Escoltadlo a
Pyongyang”.
• Después de transmitirle mis condolencias, el presidente
Kim Jong IL se reunió con Bo Hi Pak y amablemente lo
saludó, diciendo: “Mi padre siempre dijo que el presidente
Moon estaba trabajando mucho por la unificación de
nuestra patria. Me alegro de que haya usted venido”.
• En 1994, la península coreana atravesaba una crisis tan
grave que podía haber explotado en cualquier momento.
25. • Pero entonces nosotros pudimos resolver la crisis nuclear
en la península de Corea, gracias a la relación que había
establecido con el presidente de Corea, Kim IL Sung.
• Enviar un representante que transmitiera mis condolencias
no fue simplemente una cuestión protocolaria de duelo.
• He relatado mi reunión con el presidente Kim (sección V del
capítulo VI) detalladamente para ilustrar la importancia de la fe
y la lealtad entre dos personas.
• Me encontré con él por el bien de la unificación pacífica de
nuestra patria. Tuve oportunidad de expresarle mi
preocupación por el destino de nuestro pueblo, con fe y
lealtad.
26. • Como resultado, después de su muerte, su hijo, el
presidente Kim Jong IL, aceptó a nuestro representante en
las ceremonias de duelo. No hay pared que no se pueda
escalar, y no hay un sueño que no se pueda realizar
cuando compartimos nuestro amor de todo corazón.
• Cuando fui a Corea del Norte pensé que esa era mi
patria y el hogar de mi hermano. No fui allí con el deseo
de conseguir nada suyo, sino para compartir con ellos mi
corazón de amor.
• El poder del amor no sólo conmovió al presidente Kim IL
Sung, sino también a su hijo, el presidente Kim Jong IL.
• Desde entonces, y así ha sido hasta hoy, hemos
mantenido una relación especial con Corea del Norte.
27. • Cada vez que las relaciones Norte-Sur han pasado por
dificultades, hemos jugado un papel en desbloquear la
situación. Todo viene de cuando me reuní con el presidente
Kim IL Sung, le transmití mi corazón sincero y construí una
relación de confianza con él.
• Eso demuestra la importancia de la confianza.
• Después de mi encuentro con el presidente Kim,
inauguramos en Corea del Norte:
• 1. La fábrica de coches Pyeonghwa Motors,
• 2. El hotel Potonggang, y
• 3. El Centro de la paz mundial.
• Por todo Pyongyang hay carteles anunciando Pyeonghwa
Motors.
28. • Cuando el presidente de Corea del Sur visitó el Norte, los
funcionarios norcoreanos le llevaron a ver la fábrica de
coches Pyeonghwa Motors.
• Los empresarios surcoreanos que acompañaban al
presidente se alojaron en el hotel Potonggang.
• Miembros de nuestra iglesia que no son norcoreanos y
que trabajan en Corea del Norte se reúnen cada domingo
para el culto religioso en el Centro de la paz mundial.
• Todos esos proyectos son esfuerzos para fomentar
intercambios pacíficos entre el Norte y el Sur.
• No se hacen para obtener beneficios a cambio. Son
esfuerzos para contribuir a la unificación del Norte y el Sur,
como una expresión de amor al pueblo coreano.
29. • El gran milagro del Verdadero Amor.
• Con fe y lealtad ganando la confianza del enemigo.
30. • La Paz llega con la siembra del Amor de Dios hacia la humanidad.
31. • Una Corea con Dios “Hanulpumonim” y el Diosismo.
• Eok Mansei!!!