Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
Trabajo 15
1. Universidad Nacional de Loja
Facultad de la Salud Humana
Carrera de Medicina
Reumatología
Nombre: Esther abad
Dr: raúl pineda
Ciclo: 7mo B
FECHA: 03/09/2021
2. Realizar la prescripción médica:
para un paciente de sexo femenino y de 42 años de edad con diagnóstico de
fibromialgia;
Una estrategia terapéutica neuro-moduladora racional podría ser la utilización de algún
fármaco que disminuya los mecanismos excitatorios, como la pregabalina o la gabapentina,
junto con la utilización de algún fármaco que potencie los mecanismos inhibitorios del
sistema nociceptivo, como la amitriptilina, duloxetina o milnacipran, utilizados con
introducción progresiva o secuencial para minimizar los efectos adversos, sin dejar de tener
presente que otros fármacos dopaminérgicos o gabaérgicos pueden aportar también
beneficios.
para un paciente de sexo masculino de 64 años de edad con artrosis,
además de un cuadro de diabetes, hipertensión arterial y alteración leve de
la función renal
Evitar el sobrepeso. En el caso de padecer artrosis en articulaciones de carga (rodilla,
cadera, región lumbar...). En ocasiones, la pérdida de peso, por poco que sea, es suficiente
para mejorar de manera evidente el dolor asociado a la artrosis.
No realizar movimientos repetitivos ni usar de manera excesiva las articulaciones
comprometidas. Un ejemplo podría ser evitar las escaleras siempre que se pueda en los
pacientes con artrosis de rodilla.
Correcta higiene postural. Por ejemplo adecuar la silla en el lugar de trabajo para
preservar la anatomía de la región lumbar o evitar estar mucho tiempo de pie si hay artrosis
en los miembros inferiores.
También podemos tratar con:
Analgésicos. Son los medicamentos más utilizados para reducir el dolor y mejorar la
rigidez de la articulación. El analgésico más común es el paracetamol.
Antiinflamatorios. Muchos de estos pacientes tienen dolor, a pesar del uso de analgésicos,
y pueden ser tratados con los llamados antinflamatorios no esteroideos (AINE), como el
diclofenaco, el naproxeno, el ibuprofeno, el aceclofenaco, etc., especialmente cuando el
dolor es más agudo. En los casos que no responden a analgésicos comunes o a
antiinflamatorios no esteroideos, pueden utilizarse analgésicos más potentes como los
opiáceos (por ejemplo, tramadol).
3. Condroprotectores. En los últimos años se han comercializado unos fármacos llamados
condroprotectores, que son sustancias constituyentes del cartílago articular y que pueden
disminuir el dolor de la artrosis. Sin embargo, su eficacia no está aún ampliamente
aceptada. Dentro de este grupo estarían la glucosamina y el condroitin sulfato. Otros
fármacos como la diacereína tienen una eficacia similar.
Terapia interarticular o infiltraciones. Muchos pacientes pueden beneficiarse de la
administración dentro de la articulación de sustancias antiinflamatorias. Es la terapia
interarticular o infiltraciones. En la mayoría de ocasiones se infiltran glucocorticoides,
derivados de la cortisona, y más recientemente se está utilizando también el ácido
hialurónico. Las infiltraciones se pueden realizar en el caso en el que el dolor no ceda con
las medidas anteriores. Son especialmente útiles en aquellas articulaciones donde los signos
inflamatorios, especialmente el derrame articular, son más evidentes. Siempre se deben
tener en cuenta como medida puntual, y no realizarlas de manera repetitiva, ya que en
ocasiones el empleo de corticoides puede ser contraproducente en dosis excesivas. Su uso
ideal es en articulaciones donde aún es posible revertir determinados procesos. En cambio,
en artrosis muy avanzadas, donde la cirugía es ya la única opción, su eficacia disminuye de
manera notable, además debe seguir con el tratamiento de presión y diabetes.
para un paciente de 46 años de edad, de sexo masculino, con un cuadro de ataque
agudo de gota.
En pacientes con disfunción renal los fármacos de elección para el tratamiento de los
episodios agudos son los corticosteroides. En caso de que esté desaconsejado su empleo,
(por ejemplo en pacientes diabéticos), se recomienda colchicina a dosis bajas, debiendo
iniciar el tratamiento lo antes posible. A diferencia de lo que ocurre en enfermos con
función renal normal, debe evitarse el uso de AINE. En general, el éxito de la terapia en
estas situaciones depende más de la velocidad de instauración del tratamiento que del
fármaco empleado. En pacientes con función renal normal las drogas de elección son los
AINE, la colchicina, los corticosteroides y la corticotropina (ACTH o tetracosáctida.
Antiinflamatorios no esteroideos A dosis altas estos medicamentos han mostrado eficacia
en el tratamiento de episodios agudos de gota, tanto los tradicionales como los inhibidores
selectivos de la ciclo-oxigenasa 2 y, secundariamente, de prostaglandinas. La producción
renal de prostaglandinas es escasa en sujetos sanos euvolémicos, por lo que el efecto
hemodinámico de estos fármacos no es relevante y tampoco su toxicidad a este nivel. Sin
embargo, la secreción de prostaglandina E, prostaciclina y tromboxano A2 es muy
importante para el mantenimiento de la hemodinámica renal en situaciones de baja
perfusión. Por consiguiente, la inhibición de la síntesis de prostaglandinas en situaciones
patológicas como ERC, insuficiencia cardiaca congestiva, cirrosis, edad avanzada,
deplección de volumen o tratamiento diurético , origina vasoconstricción renal y reducción
del flujo plasmático renal, pudiendo provocar proteinuria, retención de agua y sal,
hipertensión, hiperpotasemia , e incluso necrosis tubular aguda, nefritis intersticial aguda
(197-199), y daño renal crónico (200-202). En pacientes con ERC no ha sido definida
4. ninguna dosis segura, por lo que debe evitarse su empleo incluso en ciclos de corta
duración; en cualquier caso, si su utilización se considera inevitable, debe hacerse durante
el periodo de tiempo más breve posible monitorizando estrechamente la función renal.
Bibliografía
https://www.ser.es/wp-content/uploads/2015/09/GPCGota13.pdf
https://www.msdmanuals.com/es-ec/professional/trastornos-de-los-tejidos-
musculoesquel%C3%A9tico-y-conectivo/artritis-inducida-por-cristales/gota.