2. La atonía uterina se define como la incapacidad del útero de contraerse tras el
parto, lo que conlleva una falta de hemostasia del lecho placentario, con la
consiguiente hemorragia excesiva en el postparto inmediato (más de 500 ml
de sangre tras parto vaginal o más de 1000 ml tras cesárea en las primeras
24 horas).
3. Constituye una verdadera emergencia, ya que este sangrado está asociado a
clínica, originando hipovolemia, inestabilidad hemodinámica y shock. Siendo
la principal causa de muerte materna en todo el mundo, especialmente en
países subdesarrollados o en vías de desarrollo
4. Los factores desencadenantes y de riesgo para que se pueda desarrollar una
atonía uterina son:
Haber tenido varios embarazos y partos anteriores, tener una edad
avanzada, haber padecido anteriormente una hemorragia puerperal
(después del parto), infecciones o tener un parto prolongado o precipitado.
Factores desencadenantes
5. También es un factor de riesgo el que el útero esté sometido durante el
embarazo a una sobredistensión por una gestación múltiple, un feto
grande (macrosómico), o un aumento anormal del líquido amniótico
(polihidramnios).
6. Padecer enfermedades en las que se producen alteraciones de la
coagulación de la sangre (coagulopatías adquiridas o congénitas, etc), o
que se produzca una muerte fetal dentro del útero, son otros posibles
factores que pueden influir en el desarrollo de esta patología.
7. Por último, tener una placenta previa (implantada en la zona baja del útero), o
en el desprendimiento prematuro de la placenta (cuando se separa del
útero antes de tiempo), pueden desencadenar una atonía uterina.
8. El diagnóstico se realiza mediante la exploración física. El ginecólogo tras el
parto, objetiva a la palpación del abdomen, que el útero está blando y ha
aumentado de tamaño, y al realizar un masaje uterino sobre el abdomen,
observa la salida de sangre y coágulos “a bocanadas” por los genitales.
Además, el médico explora el canal del parto, vagina y cuello del útero, para
detectar algún tipo de desgarro.
Diagnostico
9. Inicialmente se coge una vía venosa y se inicia reponiendo líquidos
como suero fisiológico según las pérdidas que haya en la hemorragia.
Además se realiza un masaje uterino con ambas manos ejerciendo presión
externa por la pared abdominal sobre la zona uterina, y de forma interna a
través de la vagina
Tratamiento de la atonía uterina
Se pueden administrar fármacos por vía intravenosa que ayuden a la
contracción del útero (Oxitocina, Carbetocina, Metilergotamina,
Prostaglandinas, Misoprostol... etc.)
10. Cuando estas medidas fracasan se realiza un tratamiento quirúrgico que
puede ser mediante:
11.
12. La complicación más importante de la atonía uterina es una hemorragia mayor
que produzca una pérdida de sangre tal que, a pesar del tratamiento, sea
insuficiente la rapidez de reposición de líquidos o las transfusiones
sanguíneas y la paciente padezca un shock hipovolémico, disminuyendo la
presión arterial por la incapacidad de bombeo del corazón de la suficiente
sangre hacia los órganos y tejidos, lo que lleva a un fallo multiorgánico y,
si no se resuelve, la muerte de la paciente.
Complicaciones
13. Fuente: Guía de practica clínica sobre Diagnóstico y Tratamiento DEL
CHOQUE HEMORRAGICO EN OBSTETRICIA
Catálogo Maestro de Guías de Práctica Clínica: IMSS-162-09