La profesora tuvo una clase de 17 alumnos de 5-6 años a los que enseñó durante todo el horario escolar en grupos pequeños. Las primeras horas se centraron en contenidos básicos, mientras que más tarde cubrió temas específicos como las matemáticas. Evaluaba el progreso de los estudiantes a través de boletines y pegatinas, en lugar de exámenes, debido a su corta edad. Usó diferentes modelos didácticos como el tradicional, retroactivo, constructivista y colaborativo.