La alimentación saludable proporciona los nutrientes necesarios en cada etapa de la vida para mantener la salud. Para ser saludable, una dieta debe ser equilibrada, incluir alimentos de diferentes grupos como frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras, y limitar las grasas, azúcares y sal. Además de comer bien, es importante hacer ejercicio regularmente y evitar el tabaco y el alcohol excesivo para mantener un estilo de vida saludable.