1. UNIVERSIDAD DE LOS ANDES
FACULTAD DE ADMINISTRACION
MBA-EN GESTION PUBLICA
ORGANIZACIONES E INSTITUCIONES PUBLICAS
INOCENCIO MELENDEZ JULIO
Bogotá D.C; Septiembre 23 de 2003.
EL CONCEPTO DE LA NUEVA GESTION PUBLICA: GENESIS Y
DESARROLLO.
El concepto de la nueva gestión pública se ha iniciado en razón al polémico desarrollo
logrado, por enfoques de diversa naturaleza e índole, con el propósito de explicar el
funcionamiento de las organizaciones públicas y el comportamiento de los responsables de
dirigirlas, de tal manera que sea una estructura en construcción permanente que marcan el
origen y la tendencia de de la NGP. De un lado está la guía de los supuestos y espacios de
acción gubernamental guiados por la eficiencia y eficacia. De otro lado, está el argumento
que prescribe el modelo de organización-estructuración gubernamental a niveles tanto intra
como interorganizacional.
La evolución del estudio de la administración pública se ha dividido básicamente en dos: La
clásica, que le hace culto a la eficiencia y al control de los recursos públicos, dando inicio a
la separación de la política y la administración del gobierno. Desde la perspectiva de
Wilson, la toma de decisiones en los sistemas democráticos no debe entorpecer la acción
del gobierno, no debe hacerla ineficiente, debido a que las decisiones se toman en el
sistema político, cuyo escenario es el Congreso pero una vez se tomen la implementación
es un trámite meramente administrativo. En este contexto, la Administración científica
promovida por Frederick Taylor cobró importancia para la administración pública, que
quería evitar el desperdicio en las organizaciones y lograr el mayor grado de eficiencia
posible. El modelo de organización de los clásicos ortodoxos era concebido con una
estructura jerárquica verticalmente definida y con un poder centralizado que se distribuye a
través de la estructura, en donde el control es personal y burocrático. En al ámbito de lo
público mostró una gran preocupación por controlar a los funcionarios públicos para evitar
el desvío de los recursos públicos para fines o beneficios personales.
Por su parte, la Administración pública neoclásica, centraba su atención en la importancia
de la decisión, e introduce un mayor grado de complejidad en el estudio y concepción de

2. las organizaciones, que considera el factor humano como fundamental, es decir, la
construcción de una administración pública más humana y democrática, que incorpora
conceptos de equidad y democracia. La Gestión Pública, propendía por un revisionismo de
la ortodoxia y con ello se estableció que no se podía seguir manteniendo grandes aparatos
gubernamentales interviniendo en casi todos los aspectos de la vida pública, ya que la
sociedad no sólo cuestionaba el tamaño del Estado, sino también obligaba a probar y
comprobar la eficacia de su funcionamiento.
Las distintas corrientes sobre la administración pública nos conducen a establecer que ésta
no tiene una filosofía propia, pues alimenta su legitimidad con principios, valores y
conceptos de otras disciplinas u otras ciencias. La nueva gestión pública pretende influir en
dos dimensiones de la actividad del gobierno, de una parte en la redefinición de las
funciones del Estado, a través de las reformas del Estado, y de otra parte, encontramos las
doctrinas con las que se pretende dar solución a la pretensión de hacer la tarea del Estado
mas eficiente y eficaz. Esta corriente, para lograr su cometido retoma el liberalismo
económico y la corriente de elección racional, a partir de las cuales se fundamentan las
prescripciones sobre el tamaño del aparato del gobierno, así como el comportamiento de
los individuos burócratas o consumidores. También retoma la teoría de la organización,
con la que se soportan instituciones como la autonomía de gestión, evaluación por
indicadores de desempeño, desarrollo del liderazgo de gerentes y cultura organizacional.
El origen de la nueva gestión pública en los pensamientos económicos y organizacionales
genera una contradictoria convivencia de estos fundamentos analísticos arriba descritos, a
los que se intentan fusionar a efectos de darle mucho mas consistencia a la perspectiva de
la nueva gestión pública. La mezcla se hace evidente en la perspectiva del control,
específicamente en la forma de controlar el aparato burocrático, de los funcionarios y
empleados del gobierno. El pensamiento económico estructuró la propuesta de cuasi-
mercados, que obligaría a las dependencias a competir entre sí, reduciendo el costo e
ineficiencia de los procesos colectivos de toma de decisiones, controlando la
discrecionalidad de los gerentes. Esta combinación de los organismos de control, es la mas
clara respuesta de la nueva gestión pública a la problemática que originó su nacimiento, que
es la crisis de legitimidad del Estado.

3. De otro lado, se ha buscado controlar a los funcionarios evaluando los resultados de las
agencias por indicadores de su desempeño, más que por el cumplimiento de reglas y
procedimientos rígidos, y con ello se cumple con la pretendida evaluación de impactos de
los productos de las organizaciones en la solución a los problemas que se atacan. La Nueva
gestión pública tiene la propuesta de de solucionar los problemas de gestión con
mecanismos como la reingeniería de procesos y la administración de calidad, que se aplican
bajo supuestos inexistentes como los individuos corporativos perdiendo la perspectiva de
complejidad que le dan los factores políticos y humanos.
Finalmente, se observa que la reforma al Estado ha evidenciado la necesidad de diseñar
una nueva configuración del espacio público, así como el incremento en la participación del
Congreso, incrementa el factor político en el diseño y gestión de las políticas públicas. El
entorno de las agencias públicas en este espacio se vuelven complejas y turbulentas, debido
a las nuevas dinámicas de funcionamiento del Estado y donde la planeación estratégica
como herramienta de direccionamiento son superadas de manera frecuente por la
complejidad política.
La complejidad política se incrementa a propósito de la reforma del Estado que contiene
elementos como la gestión, el rol económico del Estado, la relación entre Estado y
Sociedad, el redimensionamiento de los público, que no sólo existe fuera de agencias, sino
también al interior de estas por todos los factores que no permiten que la dicotomía sea
una realidad, en virtud de que cualquier miembro de una agencia es también un actor
político al mismo tiempo que también hace parte de la sociedad.