El presidente Calderón agradeció su invitación a la Asamblea General Ordinaria de la CONCAMIN. Reconoció las contribuciones de la industria al desarrollo de México y felicitó a Ismael Plascencia Núñez por su liderazgo. El presidente enfatizó la importancia del diálogo para mejorar las condiciones de México y apoyar la competitividad de la industria. También destacó la necesidad de mantener la estabilidad macroeconómica, reducir los costos de producción a través de

1. EL PRESIDENTE CALDERÓN EN LA COMIDA CON MOTIVO DE LA CLAUSURA DE LA LXXXIX
ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DE LA CONCAMIN 2007
Muy buenas tardes.
Señor Ismael Plascencia Núñez, Presidente de la CONCAMIN; licenciado Juan Manuel Oliva
Ramírez, Gobernador del Estado de Guanajuato; señoras y señores embajadores, señoras y
señores legisladores; señoras y señores industriales, distinguidos miembros del presídium.
Amigas y amigos todos:
Agradezco enormemente la gentil invitación para participar en esta Asamblea General Ordinaria
de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos.
Celebro además con ustedes el LXXXIX Aniversario, de verdad los felicito por contribuir con su
esfuerzo, con su inversión al desarrollo de la industria y con ello al desarrollo de México.
También quiero felicitar muy especialmente a nuestro buen amigo Ismael Plascencia Núñez por la
responsabilidad que hoy nuevamente asume.
Yo lo invito a él y a todos ustedes a que mantengamos un diálogo permanente en favor de un
mejor presente y por supuesto de un mejor futuro para México.
Yo reconozco a todos los sectores que integran la CONCAMIN la invaluable aportación que hacen
a la generación de inversión productiva y con ello al crecimiento de los empleos formales en el
país.
Yo agradezco su compromiso de constituirse en promotores del crecimiento de México y les
reitero mi disposición para impulsar una agenda de competitividad que le dé un impulso renovado
que exige, que demanda, que necesita el sector industrial de México.
He tomado debida nota de los planteamientos que se han hecho respecto de los diversos temas
que debemos abordar para avanzar, estoy convencido que hay que hacerlo, que México tiene que
contar con una economía competitiva, verdaderamente generadora de empleos, que es el sector
industrial quizá el que más se ve enfrentado a la competencia mundial, el que tiene que abordar
con mayor rapidez cambios tecnológicos y el que enfrenta una estructura de costos que define
cada vez de manera más determinante quién subsiste y quién se pierde en la competencia que ya
no es nacional, sino que es una sola, y mundial.
Cada uno de los planteamientos amigas y amigos, que ha hecho aquí don Ismael, estén ustedes
seguros que será atendido, revisado, discutido, replanteado por mi Gobierno, porque nos interesa
hacer de México un país rentable para invertir, porque queremos hacer de México el mejor lugar
para invertir en el mundo, porque sólo mediante la inversión productiva podremos tener el
crecimiento y empleo que tanto necesitamos.
Algunos de estos planteamientos, como ya lo ha mencionado aquí él, ya se están revisando junto
con la CONCAMIN en paralelo y espero que sigamos de manera muy constructiva durante los
próximos meses y años.
En el nuevo entorno económico mundial de competencia y de competencia acelerada, entre
muchas, hay dos condiciones fundamentales para incrementar la competitividad de nuestra
economía.
Primero: la estabilidad macroeconómica y segundo la reducción consistente de los costos de
producción en nuestro país.

2. Por lo que toca a lo primero, es claro que desde el inicio de mi Gobierno un objetivo fundamental
ha sido el mantener la estabilidad económica de México, esto se ha reflejado en bajas tasas de
interés, en un menor riesgo país, en la estabilidad de nuestro tipo de cambio y también en que
México ha podido acomodar los cambios que en precios relativos en mercados bursátiles se han
registrado fuera de nuestro país sin mayores turbulencias para nuestra economía.
Hemos puesto especial énfasis en conservar la disciplina, las finanzas públicas y tenemos un
presupuesto, no sólo balanceado, sino que incluso si se considera el Fondo de Estabilización
Petrolera, que por ley estamos obligados a guardar, es un presupuesto notoriamente
superavitario.
A este esfuerzo por mantener la estabilidad económica del país, no sólo en el corto plazo, sino por
darle la anhelada viabilidad financiera de largo plazo que nuestra economía necesita, hay que
sumarle también a ello la aprobación en la Cámara de Diputados de la Reforma al Régimen de
Pensiones del Instituto de Seguridad Social y Servicios para los Trabajadores del Estado.
Yo reconozco el gran sentido de responsabilidad de nuestros diputados del PAN, del PRI, del
Partido Verde, del Partido Nueva Alianza y del Partido Alternativa Social, y espero que este mismo
espíritu constructivo prive en la discusión en el Senado.
Una reforma muy importante, es una reforma trascendental que no sólo garantiza los derechos de
los trabajadores, sino que le da viabilidad desde luego al ISSSTE, pero sobre todo viabilidad
financiera a México.
Y es una de esas reformas llamadas estructurales de las cuales el país estuvo ansioso por ver,
que estuvimos esperando, y promoviendo, y exigiendo durante casi 12 años y que finalmente hoy
ve la claridad y que esperemos se pueda concluir pronto en el Senado de la República.
Este tipo de acciones son las que verdaderamente construyen futuro para el país, este tipo de
acciones en las que a través del diálogo, del diálogo sensato y la corresponsabilidad, más allá de
diferencias políticas, la búsqueda de acuerdos es lo que va a permitir que nuestro México sea
cada día mejor.
Para estar en condiciones de capitalizar en beneficio de sus empresas, de sus industrias, en
beneficio del país, este menor riesgo país y esta estabilidad económica sólida que tanto trabajo le
ha costado forjar a los mexicanos, también es necesario avanzar en el segundo objetivo, el de
reducir los costos para producir en México.
Esto requiere varias cosas, por ejemplo, garantizar la seguridad pública a la población y la
certidumbre jurídica a la inversión.
Hemos trabajado también muy, muy intensamente en acciones concretas, decididas, para
enfrentar la inseguridad y la criminalidad organizada en nuestro país.
Es fundamental para ello, por supuesto, el objetivo central, el darle seguridad a nuestras familias y
a las futuras generaciones de mexicanos.
Pero también, y hay que decirlo con toda claridad, que el factor de inseguridad en México estaba
generando serios obstáculos a la inversión y, en consecuencia, al desarrollo.

3. La falta de seguridad pública repercute tanto o más en la falta de inversión en México, como la
falta de reformas estructurales.
Por eso a la par de que se buscan acuerdos con el Congreso, es medular hacer, y yo diría,
perseverar, en la lucha contra la criminalidad, la inseguridad y la delincuencia organizada.
También, otra cosa que hay que hacer es ampliar la infraestructura del país y detonarla con
recursos públicos sí, como es el Presupuesto de Egresos que este año es el mayor destinado a
infraestructura, pero sobre todo, con recursos privados.
Detonar la infraestructura en carreteras, en puertos, en aeropuertos que nos permita
verdaderamente romper los cuellos de botella que tiene México y hacer de nuestro país el eslabón
multidireccional, que por su posición geográfica, estratégica y su acceso al mercado más grande
del mundo, nos permita verdaderamente aprovechar estas ventajas competitivas.
Y tercero, hacer más competitivos los precios de los insumos para la producción incluyendo, por
supuesto, y lo comprendo plenamente, los precios de los bienes y servicios públicos, y en
particular lo que aquí se ha mencionado, los recursos energéticos.
En este sentido, estamos tomando una serie de medidas que incluyen varios puntos y me
permitiré comentar someramente algunos cuantos.
Primero: por lo que toca a brindar mayor seguridad pública y mayor certeza jurídica a la inversión.
En este punto el Gobierno ha librado y seguirá librando una batalla sin tregua ni cuartel contra la
delincuencia, a pesar de los costos que implica, a pesar de los riesgos que conlleva, tengan la
plena seguridad, amigas y amigos industriales, que mi Gobierno no permitirá que el país quede en
manos de la delincuencia.
Este compromiso tiene que avanzar e incluye reforzar las acciones de seguridad en las carreteras
que ustedes y todos los mexicanos con toda justicia demandan, así como combatir con más
fuerza el contrabando y la piratería.
Tenemos que dar pasos adelante y por supuesto que no habrá ni uno solo hacia atrás.
Segundo: por lo que toca al impulso al desarrollo de la infraestructura productiva, hemos puesto
en marcha ya la construcción de nuevas carreteras, nuevas autopistas, nuevos sistemas de
concesión de autopistas y ejes transversales que podrán unir al país, facilitar el transporte y
comercio de productos y servicios, y generar una interconexión de la industria nacional con el
resto del mundo mucho más eficiente.
Estamos, además, armonizando un Plan Maestro de Infraestructura que se presentará junto con el
Plan Nacional de Desarrollo y el Proyecto México 2030 que está enfocado, precisamente, a
mejorar condiciones de menores costos para el desempeño del sector productivo.
Además estamos como ya dijo aquí el señor Presidente de CONCAMIN, arribando a un acuerdo
que espero sea satisfactorio precisamente en los temas que tienen que ver con los pesos y
dimensiones de los vehículos automotores en las carreteras del país.
Tercero: estamos entrando de lleno a un nuevo entorno global de la economía y eso implica seguir
fortaleciendo los lazos comerciales que tenemos con el mundo.
La apertura comercial es precisamente una condición necesaria para la competitividad, porque
permite expandir los mercados y abaratar los insumos de los industriales de México.

4. Estoy convencido, amigas y amigos, que esto tiene que hacerse, pero tiene que hacerse,
precisamente, buscando condiciones de equidad con quien competimos, y reciprocidad para
nuestros industriales.
Es por eso que hemos demandando a otros países, incluyendo a China, para que se realicen las
consultas previas y resolver, si es necesario mediante controversias, las serias dudas que
presenta para la producción mexicana los mecanismos de producción en Medio Oriente y
particularmente en China.
Cuarto: También estoy consciente de que debemos disminuir los costos de los bienes y los
servicios públicos, esto implica revisar precisamente el mecanismo que los mexicanos hemos
diseñado para administrar bienes y servicios públicos, y particularmente en los energéticos.
Aquí quiero ser muy enfático y muy honesto con ustedes. Es un tema tan delicado y tan
importante que lo que he hecho y seguiré haciendo es establecer un diálogo cuidadoso y
respetuoso con el Congreso, con los partidos políticos, con los trabajadores del sector.
De lo que se trata es dar un primer paso, como lo hemos empezado a hacer en PEMEX y como lo
estamos haciendo en todo el sector, para que, sin anticipar un derrotero o un prejuicio al respecto,
lleguemos a un diagnóstico común; que tengamos con claridad todos: los partidos, los actores, los
poderes, los niveles de Gobierno, la sociedad, el Gobierno, los industriales, los trabajadores, que
compartamos un diagnóstico de esa situación.
Y a partir de ese diagnóstico compartido podamos enfocar con claridad y honestidad las
alternativas para llegar al objetivo que, ténganlo por seguro, une a este Gobierno con la economía
del país y, desde luego, con los industriales, que es tener energéticos de calidad y a precios
competitivos a nivel mundial que puedan apoyar en condiciones justas y de mercado a los
industriales de México.
Requerimos sí, tener un sector energético más competitivo, requerimos verdaderamente que
poder hacer esta transición desde la cual pasemos de tener un sector energético que financia al
Gobierno de México a un sector energético que impulsa la competitividad, no sólo del Gobierno,
sino de la economía completa del país.
Por eso voy a revisar con todo detenimiento sus planteamientos en esta materia, tenemos el
importante reto de aumentar la eficiencia en todos los sectores manteniendo siempre la rectoría
del Estado y sin ceder, por supuesto, en absoluto a la soberanía nacional en materia energética.
En materia fiscal ya he girado instrucciones al Secretario de Hacienda y éste ha iniciado ya un
diálogo constructivo con el Congreso a fin de lograr entre todos, los mecanismos a través de los
cuales podamos contar al mismo tiempo que con mayores recursos para hacer frente a los
problemas del país, también con impuestos competitivos y equitativos, sean verdaderamente una
medida que deje de obstaculizar la producción nacional.
Para participar con éxito en los mercados mundiales los mexicanos necesitamos competir en
igualdad de condiciones.
Sé que tenemos todo, no sólo para competir, sino para ganar. Tenemos recursos naturales
envidiables; qué tenemos, no sólo los tradicionales en términos de ser el cuarto país productor de
petróleo o el primero en plata, sino que contamos con lo más valioso para un país, que es
precisamente la gente.

5. Una población económicamente activa, que será mayoritaria en el país hasta el año 2030, es
decir, la población en edad de trabajar, joven, fuerte, será mayor a la población dependiente,
incluidos los niños y los adultos mayores.
Tenemos también una posición geográfica estratégica, una posición que nos ubica realmente con
una gran ventaja sobre cualquier economía emergente, tanto por compartir tres mil kilómetros de
frontera con la economía más grande del mundo, como también por tener 11 mil o más kilómetros
de litorales, tanto a la costa del Pacífico y con ello vincularnos comercialmente a las economías
emergentes de Asia, como con la costa del Atlántico y vincularnos a Europa.
Somos el único país que al mismo tiempo que es latinoamericano, está geográficamente ubicado
en Norteamérica.
Tenemos la cuarta biodiversidad más grande del mundo y, sobre todo, una identidad y una cultura
que en un mundo globalizado es indudablemente un activo y una ventaja insustituible.
Tenemos verdaderamente todo, todo para competir y todo para ganar, y lo vamos a hacer si
hacemos lo que hoy nos corresponde.
Yo por eso le he pedido también al Gabinete Económico, y aquí le recuerdo la instrucción que le
he dado al Secretario de Economía aquí presente, para que terminen de diseñar y presentar a la
brevedad al Presidente y a la opinión pública, una agenda de competitividad, que incorpore
acciones en el corto plazo, que se traduzcan en menores costos, esa es la consigna.
Menores costos de operación para las empresas y con ello estimular la inversión, el crecimiento y
el empleo.
Sin duda otro factor que incide en la actividad productiva es la disponibilidad de crédito, por eso
me da gusto el compromiso que escuché hace algunos días por la Asociación de Bancos de
México, de colocar durante los próximos seis años tres billones 300 mil millones de pesos en
créditos.
Ojalá lo cumpla y pues más les vale.
No, en serio, diríamos que la Banca Comercial se ha propuesto cuadruplicar su saldo actual del
financiamiento hacia el año 2012.
Yo estoy seguro que una vez que la economía marque un derrotero de crecimiento, todas las
actividades vinculadas al financiamiento también se incrementarán.
Simplemente la reforma del ISSSTE le permitiría al país pasar de una situación de inviabilidad
financiera en esta materia a una de viabilidad financiera.
¿Por qué?
Porque el valor presente neto de una reforma como esa implica reducir los costos para el país en
casi 25 puntos del Producto Interno Bruto en el mediano plazo.
Es decir, estamos hablando verdaderamente de cambios significativos que van a tener una
repercusión en reducir aún más el riego país y reducir aún más las tasas de interés en México, lo
cual repercutirá, por supuesto, en un aumento de crédito, no sólo al sector de consumo y al de
hipotecas, sino al crédito que hace falta, que es al sector industrial.
Amigas y amigos:

6. El sector industrial, representado en esta importante Confederación, tiene un muy importante
papel que jugar para lograr los retos que México tiene por delante.
México requiere una mayor inversión orientada al desarrollo de proyectos productivos y de
infraestructura; necesitamos generar más empleos y empleos cada vez mejor pagados.
Porque el trabajo, el trabajo serio, el trabajo honesto, el trabajo responsable de cada empleado, de
cada campesino, de cada trabajador, de cada empresario, es la única puerta para que un país
salga adelante, es la única puerta para superar la pobreza verdaderamente y es el camino para
elevar la calidad de vida de los mexicanos.
Afortunadamente y aunque debo decirlo con toda honestidad, aún es muy temprano para
considerarlo una tendencia, el empleo está respondiendo a pesar de la adversidad en el entorno
exterior, muy favorablemente.
Simplemente dos datos:
En el mes de febrero pasado se crearon 116 mil nuevos empleos formales, es decir, nuevos
empleos registrados en el Seguro Social.
Y en tan sólo los primeros 15 días de marzo, es decir, en la mitad del mes, se registraron ya más
de 80 mil nuevos empleos en el Seguro Social, lo cual hace que sea la cifra, para una quincena
entre las más altas de la historia de México y que haya llevado a una cifra récord el número de
asegurados en el Seguro Social.
Yo quiero hacer un llamado a todas las empresas y en particular a la CONCAMIN para que
sigamos invirtiendo en México, para que aprovechemos los programas con los cuales el Gobierno
decididamente quiere impulsar el trabajo.
Señaladamente, entre otros, el Programa de Primer Empleo mediante el cual si ustedes contratan
a un nuevo trabajador que no haya estado nunca en el Seguro Social, fundamentalmente jóvenes
o recién egresados, el Gobierno va a pagar por nuestra cuenta las cuotas al Seguro Social de ese
nuevo trabajador durante un año.
Por eso los invito, amigas y amigos, inviertan y crean en México, inviertan más en nuestro país y
hagan de México la Nación grande que está llamada a ser.
Estoy consciente de los retos que enfrentamos, pero estoy convencido plenamente de la
capacidad de México para salir adelante, vivimos una época de grandes cambios y de enorme
transformación en el mundo, yo asumo el reto de formar parte de los mexicanos que están
decididos también a cambiar, a ver el futuro con una actitud distinta, que estamos decididos a
triunfar y a sacar al país adelante.
Yo invito a los industriales de México a que vayamos juntos y conduzcamos a México al futuro.
Los invito a que aprovechen las oportunidades que brinda nuestro país y que sigan invirtiendo en
México.
Muchas gracias y enhorabuena a todos ustedes.
Si me permiten vamos a hacer la declaratoria de clausura.

7. Hoy, lunes 26 de marzo del año 2007, siendo las 16 horas con 12 minutos, me es grato
particularmente declarar clausurados los trabajos de la LXXXIX Asamblea General Ordinaria de la
Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos.
Muchas felicidades.