El documento describe el papel del maestro y las características de un ambiente de aprendizaje efectivo. Explica que un buen maestro guía e instruye a los estudiantes, pero no necesita ser perfecto. También discute los diferentes tipos de personalidad de los estudiantes y ambientes de aula, señalando que un ambiente democrático en el que el maestro escucha y guía a los estudiantes es el más efectivo para el aprendizaje. Además, enfatiza la importancia de las interacciones bidireccionales
2. ¿Quién es el maestro?
Maestro: aquél que guía o enseña
(dos acciones complementarias)
El ser maestro no implica que la
persona sea perfecta, pero en cuanto
más cerca se encuentre de
desarrollar sus potencialidades más
oportuna será su intervención en la
vida educativa de sus alumnos.
Ha decidido dar algo de sí a otros.
3. continuación
Posee dotes intelectuales, es un comunicador que
habla y escucha, es menos “resistente al cambio”.
Está bien con otros y a solas, se expresa en pocas
palabras.
Puede hablar con muchos y conversar con uno.
Es observador y a veces lo ataca el prejuicio.
Debe cuidarse del sueño de omnipotencia creyendo
que puede solucionar todos los problemas.
4. La personalidad del maestro
(Ryan, 1960, citado por Calderón 2002)
La imparcialidad.
El estimular relaciones
democráticas.
La amabilidad.
La disponibilidad.
La comprensión.
El estímulo.
El optimismo.
La confianza en sus
alumnos.
El dominio de contenidos.
El interés.
La originalidad.
La adecuada
presentación personal.
La expresividad.
La responsabilidad.
El control.
El equilibrio.
La seguridad en sí
mismo.
El orden.
La Facilidad de
adaptación.
5. continuación
El maestro trata con seres humanos, que
continúan siendo cambiantes, creciendo y
desarrollándose y que alteran sus
comportamientos.
Su mayor fortaleza radica en la posibilidad
de cambio, de adaptaciones para ayudar a
sus alumnos de acuerdo con las
características particulares de cada uno, a
lograr los objetivos de aprendizaje.
6. La habilidad del maestro
Actitud hacia el estudio.
Poseer una mente abierta.
Aptitudes pedagógicas.
7. La personalidad del alumno
Wispé diferenció tres tipos de estudiantes:
1. De personalidad insegura.
2. El satisfecho.
3. El independiente.
Cada maestro debe indagar sobre la
modalidad de aprendizaje de sus
estudiantes y proporcionar el ambiente
adecuado para alcanzar los objetivos
propuestos.
8. El ambiente en el aula Partiendo de la
teoría de ambientes familiares de Fitz-
Simon
Ambiente autoritario: el maestro toma todas
las decisiones sin tomar en cuenta a la
clase.
Ambiente de desinterés: el maestro no
cumple con sus funciones.
Ambiente de hiperprotección: el maestro
brinda la mayor cantidad de información,
indicaciones, etc a sus alumnos.
Ambiente de indulgencia: el estudiante
hace lo que le parece, en el aspecto
negativo.
9. Ambientes educativos según
K. Lewin
Ambiente autoritario: el maestro dueño de
la clase.
Ambiente permisivo: el maestro tiende a
dejar al alumno toda la iniciativa sin asumir
él su rol protagónico. Es el maestro
ausente.
Ambiente democrático: El maestro asume
una actitud de escucha, modera, a veces
dirige, propicia la discusión y practica la
flexibilidad, permite el diálogo y las
relaciones interpersonales, siendo en todo
momento guía y moderador.
10. El aula como escenario
interactivo
Bidireccional (Profesor-alumno)
entre alumno y profesor se establece una relación
horizontal en la que se genera un diálogo constructivo y
un clima de confianza. Permite que el alumno aprenda
de forma activa y significativa posibilitando al profesor
conocer los intereses, los conocimientos previos, ...
para poder ser guía de todo el proceso enseñanza-aprendizaje.
La naturaleza de este tipo de interacción
es muy motivante para el alumnado a la vez que
productiva para dicho proceso.
11. Unidireccional (Profesor-alumno)
Debido al único sentido en la
direccionalidad del discurso podríamos
afirmar que no encontramos en un mismo
plano al profesor, emisor de información, y
al alumno, como receptor pasivo de la
misma. Por este motivo entendemos que
utilizado puntualmente puede ser funcional
para transmitir información que se hace
necesaria en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
12. Interacción alumno-alumno
Es necesaria, al igual que la anterior, para
el aprendizaje y en consecuencia para el
crecimiento personal. Fomenta la
socialización y ayuda a definir la
personalidad propia de cada alumno en
interrelación con sus iguales. Posibilita que
en el seno del propio alumno se
establezcan las normas que lo rijan
adquiriéndose valores y generándose
actitudes. Supone una fuente de
enriquecimiento producida por los propios
alumnos y para estos mismos.
13. Multidireccionalidad de las
interacciones en el aula
La conjunción de los tres modelos de
relación entre los distintos miembros que
intervienen en el proceso de enseñanza-aprendizaje
en el aula nos llevaría a un tipo
de interrelación que podríamos denominar
"multidireccional" ya que sería un tipo de
relación que se establece en todas las
direcciones. Lo ideal es que se conjuguen
utilizando en cada momento el más
apropiado dependiendo del contexto y del
momento del proceso.