Se describen algunas reflexiones para la inserción laboral en el estado de Guerrero, méxico

1. REFLEXIONES PARA LA INSERCIÓN
LABORAL EN EL ESTADO DE GUERRERO.
Por Julio Cesar Cortez Jaimes.
Después de concluir la investigación “La
inserción laboral de egresados de la
Licenciatura en Contaduría de la
Universidad Autónoma de Guerrero, de la
generación 2009-2014. Un estudio de caso”
que sirvió como tesis doctoral para la
obtención del grado de Doctorado en ciencias de la educación, en el Colegio Mayor
de San Carlos, campus pacífico, me permite opinar de manera consecuente en
torno a este tema y compartir con ustedes algunas reflexiones:
El contexto actual de la inserción laboral es un asunto que se debate entre lo
complejo y funcional, para generar alternativas de desarrollo social para los jóvenes
egresados de las Instituciones de Educación Superior (IES), por lo tanto, es un tema
que se ha ido colocando en las agendas públicas y ha llamado la atención de
investigadores de diversas disciplinas sociales, pues la cohorte de edad que transita
de la Universidad a la entrada al mercado laboral, a decir de expertos, es un sector
poblacional fuertemente afectado por los cambios que se han originado en el
sistema productivo y la crisis de las instituciones públicas y sociales que
tradicionalmente funcionaban como mecanismos de integración a la vida adulta.
Para entender la complejidad de este problema, partimos del análisis de tres
momentos específicos:
El primero es la disputa por el ingreso a un sistema educativo ya sea público o
privado en el que dependerá de las condiciones socioeconómicas para iniciar su
proceso formativo. En el sistema público se corre el riesgo de ser rechazado y
retardar dicho proyecto.
El segundo momento corresponde a la permanencia en el periodo formativo que va
de tres a cinco años, en el que el estudiante hará uso de recursos materiales y
económicos, así como el esfuerzo para lograr una buena preparación.
El tercer momento corresponde al egreso del sistema educativo, que en algunas
veces terminan con su grado académico obtenido (en ocasiones postergan este
propósito) e inician la lucha por obtener un empleo.
En las condiciones en que la población guerrerense se encuentra actualmente,
pareciera que el acceso a la universidad es un privilegio social relativo, para afirmar
identidades juveniles específicas, que ponen en evidencias graves desigualdades
propias del sistema económico, político y social que impera en nuestro país.

2. El discurso de gobiernos, de autoridades educativas y de algunos políticos, que
justificando el estado de cosas en el que se encuentra nuestro sistema educativo,
defienden la tesis de que la educación iguala socialmente y que acceder a la
universidad genera la promesa de ascenso social y la afirmación de nuevas
identidades.
Que afirmación tan aberrante, impulsora de falsas expectativas para nuestros
jóvenes que egresan de los distintos sistemas educativos, pues hoy en día tener un
título universitario no les garantiza la obtención de un empleo y mucho menos
mejora sus condiciones sociales.
No es un asunto fácil, el problema de la inserción laboral de los egresados se torna
cada día más complejo, ya que no solo tiene que ver con su situación personal y de
formación, sino que inciden muchos factores, tales como el mercado laboral, la
economía o el sistema económico del país, los actores locales del contexto laboral,
las instituciones de gobierno y sus políticas, las leyes laborales y reformas
educativas.
Vale la pena entonces, cuestionar a las Instituciones de Educación Superior (IES)
en torno a ¿Cuántos egresados haz podido colocar en el mercado laboral?,
¿Generas las condiciones para vincular a los jóvenes en su proceso formativo con
el campo laboral? ¿Se tiene un programa de seguimiento de egresados? ¿Qué tan
eficiente es? ¿Cuáles han sido los resultados en los últimos años? Tal vez las
respuestas queden volando. Lo más fácil es proclamar la sentencia: “¿ya
terminaste?, ya vete, asume tu responsabilidad, búscate un empleo y recuerda que
llevas siempre el sello de esta institución.
La inserción laboral es un referente para determinar si un programa educativo es de
calidad o no lo es, sirve para medir el resultado de su proceso formativo y detectar
las debilidades, oportunidades y amenazas de su entorno, para tomar las decisiones
pertinentes de corrección y actualización de los contenidos de sus unidades de
aprendizaje, así como sus procesos de vinculación al mercado laboral.
En efecto, un aspecto muy relevante que se refiere directamente a la inserción
laboral es el del perfil de egreso de los estudiantes, es decir, que la curricula de su
formación profesional sea acorde a los requerimientos del mercado laboral. De ahí
que se tenga que revisar los temas como el seguimiento de egresados, la opinión
de los empleadores, de autoridades y docentes, etcétera.
El proceso de inserción laboral de los contadores egresados de la Facultad de
Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Guerrero no es una
cuestión sencilla. Se trata de egresados que en la gran mayoría de los casos no
cuentan con una trayectoria o no tienen experiencia en la esfera de su competencia
técnico-profesional y más grave aún, están apartados de la práctica profesional, es
decir, no cuentan con los conocimientos necesarios para desempeñarse
laboralmente y sus credenciales son mínimas. Tal situación se agrava con las

3. condiciones políticas del contexto interno que influye mucho en su formación
profesional. La simulación y la improvisación, así como los intereses personales por
encima de los institucionales, acarrean graves deficiencias y construyen un futuro
sombrío y lleno de adversidades.
La falta de inserción laboral de los jóvenes es causada básicamente porque la
realidad actual es que no hay trabajo para todos, aunque existen nuevas formas de
trabajo y la presión formativa es continua. A esto le agregamos dos elementos que
empeoran las condiciones: Lo que corresponde a un esquema de bajos salarios que
ofrece el contexto de trabajo, que le quita lo atractivo de la profesión, y por otro lado
la influencia cada vez mayor de la economía informal, ofertando empleos inseguros,
temporales o sin ninguna contratación, con prestaciones casi nula y condiciones de
trabajo deplorables.
Puesto al descubierto esta problemática, los egresados se enfrentan a la dura
realidad de que la capacitación no garantiza la inserción laboral, es decir, los
egresados universitarios no acceden fácilmente a la inserción laboral, aun cuando
la carrera de la Licenciatura en Contaduría, haya sido creada con base en la una
aparente demanda del contexto político-económico.
Estas reflexiones que comparto, contribuyen en gran medida a visualizar el
panorama actual de inserción laboral de egresados de las diferentes Instituciones
de Educación Superior (IES) en el estado de Guerrero, ya sea públicas o privadas.
Sin embargo, este espacio limita la posibilidad de generar algunas conclusiones al
respecto, lo que será un asunto que dejaré pendiente.