2. Introduccion
Técnica utilizada en la odontología basada en la desmineralización de esmalte y
dentina, que se emplea para facilitar la adherencia a la superficie dental de los
adhesivos necesarios y previos a la realización de una reconstrucción de composite o
una rehabilitación de caries dentales.
Este concepto nació en 1955, cuando Michael Buonocore utilizó el ácido ortofosfórico
al 85% en la superficie adamantina y observó que se generaban irregularidades por la
descalcificación de los prismas del esmalte.
Además de las irregularidades del esmalte, el ácido fosfórico logra remover la
contaminación de la superficie logrando aumentar la energía superficial y el área de
contacto, favoreciendo la posibilidad de obtener adhesión.
3. Objetivo
Desmineralizar los prismas dentarios generando
microporos y microsurcos.
Aumentar el área superficial
Remover el esmalte defectuoso
Aumentar la energia superficial
El objetivo del grabado ácido es proporcionar
una superficie porosa, ya que la
desmineralización forma microporos de 20 a
30 micrones de profundidad.
4. La técnica del grabado ácido se basa en el efecto que produce este al contactar con la
pieza dentaria este sea en esmalte o dentina.
Cuando la solución contacta con el esmalte dental, el ácido disuelve selectivamente los
cristales de hidroxiapatita. Este efecto se determina como una desmineralización
selectiva, ya que crea superficies irregulares sobre el esmalte y también proporciona el
aumento de energía de la superficie.
Además, el grabado ácido puede desmineralizar tanto la región central de los prismas
como su parte periférica, creando microespacios o rugosidades en la superficie del
esmalte. La profundidad de estas rugosidades en esmalte es de 25 a 30 µm, generando
la obtención de patrones de grabado en esmalte.
5.
6. TABLA DE VALORES
TIPO 0 Superficie adamantina sin alteración en su estructura.
TIPO 1 Superficie irregular con erosiones de profundidad variable.
TIPO 2 Estructuras geométricas repetidas, sin erosión en el centro de los prismas.
TIPO 3 Estructuras geométricas repetidas con erosión moderada en el centro de los
prismas.
TIPO 4 Estructuras geométricas repetidas con erosión completa en el centro de los
prismas.
TIPO 5 Pérdida total de definición de las estructuras geométricas y presencia de
grandes erosiones.
7. El ácido utilizado actualmente es el ácido ortofosfórico
(H3PO4) el cual es muy compatible con la composición
del esmalte que es [Ca10 (PO4)6(OH)2], a diferencia con
otros ácidos que son muy reactivos.
El ácido ortofosfórico al accionar sobre la hidroxiapatita,
lo hace extrayendo calcio, que pasa a formar parte de la
solución y luego es arrastrado con el lavado de la
superficie que busca eliminar esta solución.
8. La concentración de 37.5% es la más utilizada en la actualidad, ya que se
ha visto que concentraciones mayores producen un patrón de grabado
deficiente, así como una menor profundidad de grabado, y
concentraciones menores del ácido, aumentan la velocidad de
formación de éstos.
Respecto al tiempo de aplicación del ácido, no debe ser muy largo, ya
que la reacción es autolimitante y se produce una precipitación de
fosfato de calcio sobre el esmalte, obliterando los poros, con lo que
disminuye la capacidad de unión. Además, poder retirar esta capa de
sales precipitadas es muy difícil, creándose problemas para la adhesión
del material restaurador.
9. El lavado del ácido que actuó debe ser por un tiempo
adecuado, por lo menos igual o bien superior al de su
aplicación y con una fuerza alta para poder penetrar en
los microporos para remover el ácido y las sales de
calcio disueltas en el líquido, ya que más que por
remoción directa, se eliminan por una dilución del
ácido presente en el fondo de las grietas en que está
atrapado.
La presencia de restos de ácido y de sales de fosfato
contaminarán la superficie y fracasará la adhesión entre
la resina compuesta y el esmalte.