La nueva ley de educación beneficiará a los nuevos maestros al brindarles más oportunidades, pero perjudicará a los maestros más experimentados como la madre del autor, quien tendrá que sacrificar otras fuentes de ingresos para dedicarse completamente a la enseñanza. Sin embargo, la ley también traerá beneficios a la sociedad educativa al fomentar una mayor unión entre padres, maestros y estudiantes en pro del aprendizaje de los niños.