1. Y con la familia ¿Qué hago?
Entrevista familiar:
1. Recoger los datos personales del alumno (fecha de nacimiento, problemas de salud, saber si
necesita gafas, si oye bien), y datos de la familia (componentes del núcleo familiar, quién
convive en el domicilio de la familia, número de hermanos, estudios, trabajo de los padres, y
hermanos).
2. Recoger información del desarrollo evolutivo del niño: tuvo problemas para empezar a
hablar, a caminar, tuvo problemas en el control de esfínteres.
3. Relaciones familiares: el niño es cariñoso con sus padres, contesta con malos modos,, cómo
es la relación con sus hermanos (celos, rivalidad, comparten juegos, se ayudan, les molesta).
4. Recoger información sobre hábitos y habilidades de autocuidado en la vida diaria: comida,
aseo, sueño, tareas domésticas (colabora o no, lo hace habitualmente o esporádicamente, en
qué tareas participa). Informarnos si es ordenado /cuidadoso con sus libros, juguetes…..
5. Informarnos sobre la historia escolar del alumno: en cuántos centros ha estado escolarizado,
saber si ha repetido curso, qué medidas han tomado sus profesores antes, qué información
les ha llegado de los profesores, qué materias son las que le resultan más difíciles, cuáles le
gustan, si recibe apoyo fuera del colegio.. Preguntar también cómo ha sido hasta ahora la
colaboración de la familia con el centro: acuden a citas programadas, se reúnen al menos
trimestralmente con el tutor, aportan información al centro de las revisiones con salud
mental….
6. Relación con los iguales: conocer si tiene amigos, saber si estos amigos son los compañeros
del cole, o son otros. Preguntar con qué frecuencia se relaciona con sus iguales, qué
actividades comparte con ellos.
7. Hábitos de estudio: preguntar a la familia cómo es el día a día del alumno qué hace cuando
llega a casa, descansa, ve televisión… ¿A qué hora se pone a estudiar, dónde? Preguntar
también cuánto tiempo está haciendo los deberes, si repasa o prepara los exámenes con
antelación, si necesita que un adulto se siente con él todo el tiempo o solamente necesita
supervisión. Conocer si usa agenda, si en casa se la revisan, si la utilizan para comunicarse
con los maestros. Es importante también saber si tiene el horario de clases en casa, si
además le ayudan a supervisar que lleva todo el material necesario para la jornada siguiente.
Informarnos también si los fines de semana dedica tiempo al estudio. Preguntar a los padres
si el tema de realizar las tareas escolares es motivo de discusión con su hijo, si discuten por
qué (porque no inicia la tarea, porque no los refleja en la agenda, porque tarda
demasiado…). Comentar también con los padres dónde perciben ellos que su hijo tiene más
dificultades, en qué materias, en que tipo de tareas.
8. Aficiones: qué le gusta hacer en su tiempo libre en casa (videojuegos, consolas) y fuera de
casa (deportes, parque…). Cómo encaja en el horario diario el tiempo dedicado al ocio.
Saber si le gusta compartir actividades de ocio con sus padres….
9. Normas en casa: preguntar por problemas de conducta que puede manifestar en casa
(desautoriza a los padres, grita, rompe objetos). Conocer si existen normas claras en casa y
sobre qué temas (tareas domésticas, hábitos personales, tareas escolares..). Cómo se
sancionan el incumplimiento de las normas (castigo, retirada de privilegios…..). Saber si se
recompensan los esfuerzos y cumplimiento de las normas (premios materiales o de
actividad, se le conceden a corto o largo plazo…).
10. Preguntar a los padres, por el seguimiento del niño con los profesionales de salud mental
(con qué frecuencia asiste, si precisa tratamiento farmacológico..). También preguntar si
2. acuden a alguna asociación especializada en TDAH, quién le atiende, si es posible la
coordinación con el terapeuta….
11. Por último preguntar a la familia por las expectativas que tiene para este curso, qué esperan
del equipo docente, de su hijo, y en qué podemos colaborar.
Actuaciones pertinentes para implicar a la familia:
1. Establecer un calendario de reuniones, intentando una coordinación mensual, para analizar
dificultades y progresos.
2. Mantener una reunión con los padres y el alumno, para establecer un horario de trabajo para
casa, analizando cuidadosamente el horario del niño y la forma en que está organizada su
vida: tiempo que dedican a la televisión, video juegos, extraescolares y horario de sueño.
3. Poner en marcha una agenda que permita el intercambio de información de forma diaria.
4. Proporcionar información a los padres sobre hábitos de estudio adecuados.
a. Establecer una rutina de trabajo.
b. Acondicionar el cuarto de estudio.
c. Entrenar para que se acostumbre a trabajar solo.
d. Premiar el ser capaz de adelantar materia de estudio.
e. No trabajar con la tele encendida, ni con música, ni con el móvil cerca.
f. Preparar la mochila para el día siguiente.
g. Premiar la conservación del material escolar.
5. Aconsejar a los padres que permitan practicar un deporte, baloncesto es el favorito del
alumno, que además de permitir canalizar su gran actividad física, favorecerá el contacto
con otros niños.
6. Intentar que en la comunicación diaria no haya gritos, para evitar que se altere, y el
grito no implica mayores medidas de disciplina. Intentar ser un modelo reflexivo.
7. Asesorarles para crear hábitos en casa, exigiéndole siempre las mismas rutinas, y ayúdele
reforzando su buena conducta cada vez, y fomentando su autonomía personal.
8. Reforzar su autoestima, resaltando los aspectos positivos de su conducta.
9. Animarles a generalizar la utilización de autoinstrucciones.
10. Asesorarles sobre cómo ayudar a su hijo a autoevaluar su conducta correctamente,
recordando paso por paso lo que ha ocurrido en una situación problemática, ayudando a
interpretar la conducta de los demás y la suya propia, haciéndole reflexionar sobre qué otra
actuación podría haber sido adecuada y, finalmente, ayudarle a redefinir el problema.
