El documento describe dos enfoques para entrenar la fuerza emprendedora: el camino del saber (epistemología) y el camino del ser (ontología). Propone trabajar desde una perspectiva ontológica para abordar los condicionantes que limitan a las personas para ser emprendedores profesionales. Asimismo, sugiere aprender el emprendimiento desde la experiencia adquiriendo habilidades de forma natural, más que enseñarlo como teorías. Finalmente, plantea tres espacios básicos para abordar este desafío: el