México tiene los índices más altos de obesidad infantil y en adultos en el mundo. La obesidad representa un grave problema de salud pública en el país y genera altos costos médicos y de productividad. De no implementarse medidas efectivas de prevención, se espera que los índices de obesidad y las complicaciones médicas asociadas continúen aumentando, lo que podría sobrecargar los sistemas de salud y tener un gran impacto económico en el país.