El documento describe las cinco etapas típicas del abuso sexual infantil intrafamiliar: 1) seducción, 2) abuso, 3) instalación del secreto, 4) divulgación del abuso, ya sea intencional o accidental, y 5) retractación por parte del abusador y la familia. También explica las secuelas comunes en las víctimas como traumatización, evitación, y problemas emocionales y de comportamiento.