SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 6
1




                   Ensayo monográfico

Actitud natural, mundo de la vida y reflexión trascendental




                       Marcos Jasminoy
                    Antropología Filosófica
                       Filosofía - 2° año
                     Prof. Julia V. Iribarne
                     Entregado: 05/05/08
2

El pensamiento de Husserl está orientado a la creación de un sistema metafísico que
responda al sentido y al ser del existente u objeto. Sigue la línea de Descartes y Kant al
dirigir sus esfuerzos al plano de la subjetividad, que será la que constituya el sentido de
ser del objeto. Esta metafísica de la subjetividad debe estar fundada en evidencias
apodícticas, y por lo mismo, dar cuenta de su propia existencia. Llevada a la práctica,
esta filosofía se concretiza en una tarea de infinita, que es método y filosofía a la vez.
No será suficiente librarse de los prejuicios de las ciencias y filosofías anteriores, sino
que hay incluso habrá que hacerlo con el fondo común de todas ellas: el mundo de la
experiencia. Solo se aceptará el mostrarse del mundo a nosotros, es decir, el fenómeno.1

        Es así que llegamos a delinear el concepto de actitud natural. Ésta es la actitud
espontánea, que se da tanto en la vida cotidiana como en el conocimiento científico, en
la cual la existencia del mundo y sus objetos no ha sido cuestionada. Es, por ello, una
actitud ingenua, o mejor, a-crítica. En otras palabras, hay una disposición natural a
aceptar la realidad que se nos presenta como “estando ahí adelante”. Al vivir inmersos
en el mundo, no tenemos por qué cuestionarlo. Y las ciencias de la actitud natural
siguen ese camino; no hacen más que profundizar y resolver problemas sobre ese
mismo suelo común. Por ello, toda filosofía que se precie de ser rigurosa debe superar
esta actitud natural. A esto se dirige el método fenomenológico, que va a eliminar los
hábitos intelectuales anteriores y a poner entre paréntesis juicios acerca de la existencia
de la realidad extra-mental espacio-temporal experimentada.2

        Husserl ensayó muchas aproximaciones distintas a la fenomenología. Una de
ellas fue una aguda interpretación de la crisis que sacudía a Europa. Una crisis
primariamente epistémica, podría decirse, pero que en realidad afecta a la vida misma
de Europa. No es el lugar de repasar el análisis de su presente en crisis, que hace
Husserl observando detenidamente el pasado. Sin embargo podemos mencionar dos
cosas. La primera es la necesidad histórica de desembocar en la fenomenología. La
segunda es la conclusión que saca acerca de las causas de tal crisis. Entre otras, hay que
destacar la siguiente: la imposibilidad de las ciencias de dar radicalmente cuente de sus
propias producciones. Eso equivale a decir que las ciencias, en su conformación como
tales, han olvidado el suelo de su fundamentación, la condición a priori de su
posibilidad: el mundo-de-la-vida.3

        El mundo-de-la-vida es el mundo pre-reflexivo de la experiencia asentada en el
sujeto. Se da por sentado en toda vivencia, en la vida humana misma, existe siempre de
antemano, es decir, en él se basa cualquier actividad, sea teorética o extra-teorética, y le
damos existencia real sin reflexionar sobre ello. El mundo-de-la-vida “nos es pre-dado,
no ocasionalmente sino necesariamente como campo universal para toda práctica
actual y posible, como horizonte. Vivir es siempre vivir con la certeza del mundo”4. En
la historia de la humanidad, siempre estuvo-ahí, incluso antes de la ciencia y sus ínfulas
de conocimiento objetivo, y por ello se funda en él y hacia él afluye.5

       Es en el mundo-de-la-vida que todo lo humano es realizable, y toda actividad
está englobada en él. Pero su sentido cambia constantemente, puesto que su aprehensión
1
  Para todo el párrafo: Cfr. Mgr, p. 140 – 141.
2
  Para todo el párrafo: Cfr. Mgr, p. 141 – 142.
3
  Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 1.
4
  E. Husserl, La crisis de las ciencias europeas y la fenomenología trascendental, La Haya, Martinus
Nijhoff, 1954, p. 145.
5
  Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 1.
3

es histórica. Además, es aprehendido junto con otros, es decir, no lo hacemos de forma
aislada, sino de forma inter-subjetiva. Este es un concepto clave, no sólo para entender
el mundo-de-la-vida, sino incluso la naturaleza misma de la filosofía trascendental de
Husserl, pero no compete su interpretación a este breve trabajo. Lo que sí hay que
mencionar es que ante la certeza de que existe tal mundo, la mirada puede detenerse allí
o preguntarse para quién hay una certeza, remitiendo así a la subjetividad.

        Si al comienzo de sus investigaciones fenomenológicas (antes de la Crisis),
Husserl quería superar la actitud natural del aún conceptualmente implícito mundo-de-
la-vida, para llegar a la actitud trascendental de la conciencia pura, ahora pareciera
volcarse a la comprehensión del mismo mundo-de-la-vida, examinando la primaria
actitud de la experiencia.

         Pero, ¿puede existir una ciencia que sirva a la vida en su mundo-de-la-vida?
Habría que distinguir primero dos clases de certeza o verdad. En primer lugar, está la
certeza objetiva (o mejor, objetivante) de las ciencias de la actitud natural. Pero el
conocimiento teórico-objetivo no es más que un acercamiento a la realidad del mundo-
de-la-vida. El sujeto vive en el mundo-de-la-vida, y por tanto no sólo todo conocimiento
sino también toda vivencia, desde la volición hasta el recuerdo, pasando por la creación
artística, la valoración e incluso la fantasía, se hallan en él. Es por esto que el mundo-
de-la-vida es eminentemente subjetivo, y por eso le corresponden un segundo tipo de
certezas, “certezas puestas a prueba en la práctica y asumidas como
incondicionalmente válidas, tomadas del círculo de certezas confiables desde antiguo, y
en la vida del ser humano previas a toda necesidad de fundamentación científica”6. Esta
verdad subjetiva está basada en la inducción, entendida ésta como pre-científica, es
decir, como una tendencia del hombre (entendido como conciencia encarnada, es decir,
en sus aspectos mentales y corporales también) al mundo-de-la-vida, “cotidianamente
confiable y sin embargo científicamente desconocido”7. El mundo-de-la-vida,
finalmente, incluye la totalidad de lo existente-para el hombre.

       Así fijada la meta de esta ciencia, volvemos a preguntarnos por la posibilidad de
su existencia. Hay que aclarar ahora que, en vistas a lo recién dicho, se entiende al
mundo-de-la-vida como certeza absoluta que no se pone en duda y por eso mismo como
presupuesto para cualquier constitución efectuada por el yo. Esto es ya uno de los a
prioris del mundo-de-la-vida: hay una subjetividad que lo produce. Ya nos habíamos
topado implícitamente con otro a priori: su carácter espacio-temporal o, en otras
palabras, su ser-aquí y su ser-ahora, su presencia y su presente.

        La captación que tienen las ciencias de la actitud natural sobre el mundo-de-la-
vida es insuficiente porque su objetivación es siempre teórica e ideal. Ahora bien, si
Husserl pretende encontrar el fundamento de este mundo que actúa como campo de toda
actividad humana, debe hacerlo con una cientificidad más abarcadora. La
fundamentación o constitución del mundo, el darle sentido, tiene que ser algo más que
simple actividad objetivante. Porque si toda actividad humana (el mundo-de-la-vida) es
puesta bajo la mirada objetivante entonces la misma conciencia, en tanto inmersa en el
mundo, quedaría objetivada, se convertiría en fenómeno, y en este caso un fenómeno
siempre falseado, alejado del presente en que se realiza la actividad de la conciencia.
Pero el sujeto nunca puede ser objeto. La conciencia es actividad pura, y no necesaria ni
6
    Crisis, p. 441.
7
    Ibidem, p. 449.
4

primordialmente actividad teorética. O para entenderlo aún de otra manera: la misma
ciencia del mundo-de-la-vida es una actividad humana y como tal se realiza sobre el
mismo suelo del mundo-de-la-vida.

        Lo que pasa es que el interés teorético de las ciencias de la actitud natural debe
superarse en la gestación de una ciencia del mundo-de-la-vida. Y aquí entra en juego la
reflexión fenomenológico-trascendental, que en este trabajo se ha intentado postergar lo
más posible para acercarnos de lleno a ella y comprender su importancia que es, como
veremos, definitoria.

        Husserl parte de que las actividades humanas pueden ser o bien directas o bien
reflexivas. Las primeras son siempre intencionales: percibir, recordar, predicar,
querer… Las segundas, sin dejar de ser intencionales, se dirigen a una actividad directa
y al estar dirigida de ésta a un objeto intencional. Así, la percepción de una casa es
directa; si reflexionamos, a través de cualquier actividad, sea por ejemplo el recuerdo,
sobre esta percepción, recordaremos la percepción misma y su estar dirigida
perceptivamente a la casa.8

        A su vez, la reflexión se divide en natural y fenomenológico-trascendental. La
reflexión natural se dará en el terreno del mundo dado como tal (por ejemplo, “quiero
ver una casa”, “me acuerdo de haber oído una melodía”, “odio tener proyectos de tal
cosa”). En la reflexión fenomenológico-trascendental, en cambio, el sujeto reflexiona
sobre otra actividad o vivencia, pero poniendo su existencia entre paréntesis. Es así que
si tenemos una vivencia I (ingenua), ésta se le hará presente a una vivencia II, que
contemplará desinteresadamente la primera. Es así que se descubre la vivencia en curso
y el objeto vivenciado. Ahora bien, hará una falta una vivencia III, también
desinteresada, que se dará cuenta de que esto tiene lugar. Así, desinteresándonos, de la
existencia no sólo de la vivencia I, sino también de la vivencia II, llegamos a descubrir
el yo trascendental del cual la vivencia II es cosa suya. Esta esfera del yo está llamada a
ser la base de todo crítica universal y radical.9

        En otras palabras, se puede afirmar: cogito cogitatum (qua cogitatum). Esto se
puede traducir, en el lenguaje de la estática de la conciencia husserliana a: mi nóesis
tiene como correlato un nóema, a mi acto psíquico intencional le corresponde (como
contenido) un objeto intencional10. Y así, dando un paso más, poniendo la misma
existencia de la nóesis y del nóema entre paréntesis, llegamos a lo más profundo de la
reflexión trascendental, en la cual salta a la vista que el yo que aplica la reflexión
fenomenológico-trascendental puede llegar a ser, “no sólo en algunas particularidades,
sino con universalidad, ‘espectador desinteresado’ de sí mismo, y como incluido en
esto, de toda objetividad que ‘exista’ para él, y tal como exista para él ”11.

       Hemos llegado al sujeto trascendental. ¿De eso se trataba toda esta ciencia de
los a prioris del mundo-de-la-vida? ¿Acaso todo el fundamento del mundo-de-la-vida
no es más que un paso metodológico previo para alcanzar a la conciencia pura, puesto
que una vez aplicada la reducción fenomenológico-trascendental llegamos al sujeto
trascendental? No y no, dos veces no.
8
  Para todo el párrafo: Cfr. Meditaciones cartesianas, traducidas por J. Gaos, México, F. C. E., 1996, p.
80.
9
  Para todo el párrafo: Cfr. Idem, p. 81 – 83.
10
   Cfr. Idem, p. 83.
11
   Idem, p. 84.
5



        Por un lado, si bien esta ciencia de los a prioris sirve como paso metodológico,
tiene valor en sí misma, es decir, no se reduce a eso. Y por el otro, la conciencia pura no
puede ser comprendida aún con esta reflexión trascendental si no se pone en evidencia
otro elemento del que no hemos hablado aún.

        Este elemento es la historicidad, otro a priori del mundo de la vida. Nos
referiremos a él antes de aclarar el valor (el nuevo valor) del mundo-de-la-vida. El
camino para llegar a él parte de la pregunta sobre en qué esta nueva ciencia no modifica
nuestro mundo-de-la-vida, transformado desde ya por su aplicación. Husserl dirá que la
ciencia afluye al mundo-de-la-vida y lo transforma con sus metas y obras. Así, según
cambie (progrese hacia al télos, en última instancia) la ciencia, el mundo-de-la-vida
cambiará también con las condiciones históricas. Sin embargo, el sujeto, que siempre
tiene intereses, no sólo estará envuelto en el mundo histórico, sino que a través de la
efectuación de la ciencia podrá modificarlo. Tendrá iniciativa, si se quiere, frente a las
determinaciones del mundo-de-la-vida que, a pesar de su carácter cultural histórico,
inter-subjetivo si se quiere, en el fondo siempre será constituido por el mismo sujeto. Es
decir, el mundo histórico espacio-temporal no tendrá validez definitiva, sino presuntiva,
por su carácter natural; es decir, será un momento del “fluir heracliteano”.12

        Para superar el material intuitivo de las ciencias de la actitud natural, en este
caso de la historia de las formas culturales, no basta con buscar lo que tienen en común
sino que hay que profundizar sobre la raíz última. Para abandonar un relativismo
histórico y cultural, en el que la verdad subjetiva del mundo-de-la-vida vale sólo en
determinada época y cultura, se trata de alcanzar la “la reflexión sobre las condiciones
de posibilidad de esa relatividad, que se hallan en la subjetividad trascendental ”13. Y
así se desemboca en la “estructura temporal de la subjetividad constituyente que se
constituye a sí misma como fluir temporal”, en el presente fluyente viviente, la
conciencia vacía de todo contenido vivencial, un cambio permanente sin nada que
cambie, una naturaleza naturante intemporal que trasciende y funda todo el mundo. Que
contiene, incorporadas como horizonte, todas sus vivencias, sean pasadas o por venir.

        Y así llegamos al otro punto, al verdadero valor del mundo-de-la-vida. Sólo
puede ser comprendido si nos convencemos de que es siempre mundo constituido
(aunque no necesariamente teorizado) por un yo. Esto es afirmar que el conocimiento es
la relación que une a los objetos intencionados (en cuanto tales) con el modo de
conciencia intencional. Estos dos correlatos, de los que ya hemos hablado antes, son
inseparables y se hallan en íntima comunión. Mientras el objeto sea externo a la
conciencia, se nos presentara bajo tal o cual perspectiva, por lo que siempre será
inagotable. Ahora bien, si el objeto es la misma vivencia interna, es decir, un momento
del mismo flujo de la conciencia, o en otras palabras, si la actividad reflexiva tiene
como objeto otra actividad, entonces se abandona definitivamente el dualismo que había
entre la vivencia hacia fuera y el objeto vivenciado espacio-temporal exterior, ya que
ahora tendremos que hablar de vivencia y objeto vivenciado llanamente, sin agregar más
epítetos. Todo está como contenido vivencial; no hemos perdido el mundo, sino que lo
hemos ganado en cuando vivenciado y éste es su valor.
        Y así se concluye que en realidad, como la conciencia intencional y sus objetos
intencionales están en inseparable unión, cada vez que el sujeto constituye un objeto en
12
     Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 2.
13
     Idem, p. 2.
6

el mundo, cada vez que tiene una vivencia, cada vez que es activo, más aún, cada vez
que el sujeto constituye el mundo-de-la-vida, está constituyéndose a sí mismo como
sujeto trascendental. El yo no puede ser sin estar en el mundo. Permítasenos terminar
con unos bellos versos de Jorge Guillén:

        Yo soy, soy... ¿Cómo? Donde estoy: contigo,
        mundo, contigo. Sea tu absoluta
        compañía siempre.
               ¿Yo soy?
                        Yo estoy.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Presentacion husserl metodos
Presentacion husserl metodosPresentacion husserl metodos
Presentacion husserl metodosvlaudimirgonzalez
 
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...Arcangel Campos
 
La fenomenología como método de investigación científica
La fenomenología como método de investigación científicaLa fenomenología como método de investigación científica
La fenomenología como método de investigación científicaBlanca Katiuzca Loayza
 
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaProtocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaRafael
 
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcion
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcionMerleau ponty-el-mundo-de-la-percepcion
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcionFran Art
 
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaProtocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaRafael
 
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3jesler
 
Las obras trascendentales de Husserl y Wittgenstein
Las obras trascendentales de Husserl y WittgensteinLas obras trascendentales de Husserl y Wittgenstein
Las obras trascendentales de Husserl y WittgensteinEsteban Quiroz
 
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morente
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morenteLecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morente
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morenteingxiomy
 

La actualidad más candente (19)

La nueva gnoseología de Merleau-Ponty
La nueva gnoseología de Merleau-PontyLa nueva gnoseología de Merleau-Ponty
La nueva gnoseología de Merleau-Ponty
 
Teoría de la_gestalt
Teoría de la_gestaltTeoría de la_gestalt
Teoría de la_gestalt
 
Fenomenologia
FenomenologiaFenomenologia
Fenomenologia
 
Presentacion husserl metodos
Presentacion husserl metodosPresentacion husserl metodos
Presentacion husserl metodos
 
Fenomenologia
FenomenologiaFenomenologia
Fenomenologia
 
Fenomenologia ale[1]
Fenomenologia ale[1]Fenomenologia ale[1]
Fenomenologia ale[1]
 
Materialismo Dialéctico
Materialismo DialécticoMaterialismo Dialéctico
Materialismo Dialéctico
 
Fenomenología de la percepción maurice merleau ponty
Fenomenología de la percepción   maurice merleau pontyFenomenología de la percepción   maurice merleau ponty
Fenomenología de la percepción maurice merleau ponty
 
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...
Análisis interpretativo de la voluntad de poder de Nietzsche frente a la inte...
 
Antropología fenomenológica
Antropología fenomenológicaAntropología fenomenológica
Antropología fenomenológica
 
Fenomenología
FenomenologíaFenomenología
Fenomenología
 
La fenomenología como método de investigación científica
La fenomenología como método de investigación científicaLa fenomenología como método de investigación científica
La fenomenología como método de investigación científica
 
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaProtocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
 
Fenomenología II
Fenomenología IIFenomenología II
Fenomenología II
 
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcion
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcionMerleau ponty-el-mundo-de-la-percepcion
Merleau ponty-el-mundo-de-la-percepcion
 
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosaProtocolo la filosofia como ciencia rigurosa
Protocolo la filosofia como ciencia rigurosa
 
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3
Perspectiva fenomenológica hermenéutica_grupo3
 
Las obras trascendentales de Husserl y Wittgenstein
Las obras trascendentales de Husserl y WittgensteinLas obras trascendentales de Husserl y Wittgenstein
Las obras trascendentales de Husserl y Wittgenstein
 
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morente
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morenteLecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morente
Lecciones preliminares de_filosofia_-_manuel_garcia_morente
 

Destacado

Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blog
Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blogBlogs. uso educativo_y_como_crear_un_blog
Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blogalbayadriana
 
CREAR UN BLOG EN BLOGGER
CREAR UN BLOG EN BLOGGERCREAR UN BLOG EN BLOGGER
CREAR UN BLOG EN BLOGGERinformaticaynee
 
Blog ,presentacion
Blog ,presentacionBlog ,presentacion
Blog ,presentacionClaudiayAlba
 
Titular Blog
Titular Blog Titular Blog
Titular Blog Hayarpi
 
Personalizar blogger
Personalizar bloggerPersonalizar blogger
Personalizar bloggerPaz Gonzalo
 
Como hacer un_blog
Como hacer un_blogComo hacer un_blog
Como hacer un_blogolbsis
 

Destacado (10)

Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blog
Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blogBlogs. uso educativo_y_como_crear_un_blog
Blogs. uso educativo_y_como_crear_un_blog
 
CREAR UN BLOG EN BLOGGER
CREAR UN BLOG EN BLOGGERCREAR UN BLOG EN BLOGGER
CREAR UN BLOG EN BLOGGER
 
Blog ,presentacion
Blog ,presentacionBlog ,presentacion
Blog ,presentacion
 
WordPress v/s Blogger
WordPress v/s BloggerWordPress v/s Blogger
WordPress v/s Blogger
 
Titular Blog
Titular Blog Titular Blog
Titular Blog
 
Personalizar blogger
Personalizar bloggerPersonalizar blogger
Personalizar blogger
 
Uso de Blog’s.
Uso de Blog’s. Uso de Blog’s.
Uso de Blog’s.
 
Cómo crear tu propio blog en WordPress
Cómo crear tu propio blog en WordPressCómo crear tu propio blog en WordPress
Cómo crear tu propio blog en WordPress
 
Blogs
BlogsBlogs
Blogs
 
Como hacer un_blog
Como hacer un_blogComo hacer un_blog
Como hacer un_blog
 

Similar a Actitud natural, mundo de la vida y reflexión trascendental

El hombre superluminoso-pr regis dutheil
El hombre superluminoso-pr regis dutheilEl hombre superluminoso-pr regis dutheil
El hombre superluminoso-pr regis dutheilcienciaspsiquicas
 
Fenomenología
FenomenologíaFenomenología
FenomenologíaNataabs
 
La fenomenología trascendental
La fenomenología trascendentalLa fenomenología trascendental
La fenomenología trascendentalbrigidacarvajal
 
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresClasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresHernanCarmona
 
Antropologia
AntropologiaAntropologia
AntropologiaRBMG512
 
metodos_fenomenologia.pptx
metodos_fenomenologia.pptxmetodos_fenomenologia.pptx
metodos_fenomenologia.pptxFernán Ramírez
 
Nuevo documento de microsoft office word
Nuevo documento de microsoft office wordNuevo documento de microsoft office word
Nuevo documento de microsoft office wordOrlando Medina Vargas
 
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoQue es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoJesus Paucar Palomino
 
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoQue es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoJesus Paucar Palomino
 
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresClasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresHernanCarmona
 
Metodo Fenomenológico
Metodo FenomenológicoMetodo Fenomenológico
Metodo Fenomenológicodeiciklemm
 
Fenomenologia
FenomenologiaFenomenologia
FenomenologiaCollege
 
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1. que es gnosis, que es el movimiento gnosticoCentrodeEstudiosAnub
 
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanicaVerito Runiahue Coli
 
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...Luis Felipe González del Riego Collomp
 
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1. que es gnosis, que es el movimiento gnosticoCentrodeEstudiosAnub
 

Similar a Actitud natural, mundo de la vida y reflexión trascendental (20)

El hombre superluminoso-pr regis dutheil
El hombre superluminoso-pr regis dutheilEl hombre superluminoso-pr regis dutheil
El hombre superluminoso-pr regis dutheil
 
Fenomenología
FenomenologíaFenomenología
Fenomenología
 
La fenomenología trascendental
La fenomenología trascendentalLa fenomenología trascendental
La fenomenología trascendental
 
Ortega y gasset
Ortega y gassetOrtega y gasset
Ortega y gasset
 
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresClasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
 
Antropologia
AntropologiaAntropologia
Antropologia
 
metodos_fenomenologia.pptx
metodos_fenomenologia.pptxmetodos_fenomenologia.pptx
metodos_fenomenologia.pptx
 
Nuevo documento de microsoft office word
Nuevo documento de microsoft office wordNuevo documento de microsoft office word
Nuevo documento de microsoft office word
 
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoQue es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
 
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnosticoQue es gnosis. que es el movimiento gnostico
Que es gnosis. que es el movimiento gnostico
 
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autoresClasificacion de la ciencia según 5 autores
Clasificacion de la ciencia según 5 autores
 
Ortega y gasset
Ortega y gassetOrtega y gasset
Ortega y gasset
 
Fenomenologia todos
Fenomenologia todosFenomenologia todos
Fenomenologia todos
 
Metodo Fenomenológico
Metodo FenomenológicoMetodo Fenomenológico
Metodo Fenomenológico
 
Filosophia
FilosophiaFilosophia
Filosophia
 
Fenomenologia
FenomenologiaFenomenologia
Fenomenologia
 
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
 
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica
7177836 husserl-el-articulo-fenomenologia-de-la-enciclopedia-britanica
 
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...
Materiales de Teoría del Conocimiento. Sapere Aude 1. Conocimiento, Realidad ...
 
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico1.  que es gnosis, que es el movimiento gnostico
1. que es gnosis, que es el movimiento gnostico
 

Más de Tabanito

Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto Eriúgena
Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto EriúgenaLas causas primordiales en el sistema de Juan Escoto Eriúgena
Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto EriúgenaTabanito
 
El Liber de Causis
El Liber de CausisEl Liber de Causis
El Liber de CausisTabanito
 
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. Leibniz
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. LeibnizLa centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. Leibniz
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. LeibnizTabanito
 
Alcibíades
AlcibíadesAlcibíades
AlcibíadesTabanito
 
El Arte y el Hombre
El Arte y el HombreEl Arte y el Hombre
El Arte y el HombreTabanito
 
Principio antrópico y finalismo en la naturaleza
Principio antrópico y finalismo en la naturalezaPrincipio antrópico y finalismo en la naturaleza
Principio antrópico y finalismo en la naturalezaTabanito
 
Viajes a traves_del_tiempo
Viajes a traves_del_tiempoViajes a traves_del_tiempo
Viajes a traves_del_tiempoTabanito
 
Trascendiendo la unidad de la apercepción
Trascendiendo la unidad de la apercepciónTrascendiendo la unidad de la apercepción
Trascendiendo la unidad de la apercepciónTabanito
 
Comentario a la isagoge
Comentario a la isagogeComentario a la isagoge
Comentario a la isagogeTabanito
 
Comentario a la Isagoge
Comentario a la IsagogeComentario a la Isagoge
Comentario a la IsagogeTabanito
 

Más de Tabanito (10)

Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto Eriúgena
Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto EriúgenaLas causas primordiales en el sistema de Juan Escoto Eriúgena
Las causas primordiales en el sistema de Juan Escoto Eriúgena
 
El Liber de Causis
El Liber de CausisEl Liber de Causis
El Liber de Causis
 
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. Leibniz
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. LeibnizLa centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. Leibniz
La centralidad del tema de Dios en algunas tesis metafísicas de G.W. Leibniz
 
Alcibíades
AlcibíadesAlcibíades
Alcibíades
 
El Arte y el Hombre
El Arte y el HombreEl Arte y el Hombre
El Arte y el Hombre
 
Principio antrópico y finalismo en la naturaleza
Principio antrópico y finalismo en la naturalezaPrincipio antrópico y finalismo en la naturaleza
Principio antrópico y finalismo en la naturaleza
 
Viajes a traves_del_tiempo
Viajes a traves_del_tiempoViajes a traves_del_tiempo
Viajes a traves_del_tiempo
 
Trascendiendo la unidad de la apercepción
Trascendiendo la unidad de la apercepciónTrascendiendo la unidad de la apercepción
Trascendiendo la unidad de la apercepción
 
Comentario a la isagoge
Comentario a la isagogeComentario a la isagoge
Comentario a la isagoge
 
Comentario a la Isagoge
Comentario a la IsagogeComentario a la Isagoge
Comentario a la Isagoge
 

Último

Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.yhostend
 
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxCRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxRicardoMoreno95679
 
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfPARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfAntonio Miguel Salas Sierra
 
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxLA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxAntonio Miguel Salas Sierra
 
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfEXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfinmalopezgranada
 
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosla Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosGemmaMRabiFrigerio
 
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA VLA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA Vczspz8nwfx
 
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxEl Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxjenune
 
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases."Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.Opus Dei
 
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxHIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxPalitoBlanco1
 

Último (12)

Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
 
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxCRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
 
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfPARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
 
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxLA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
 
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CMLa oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
 
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfEXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
 
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosla Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
 
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA VLA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
 
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitarSanta Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
 
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxEl Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
 
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases."Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
 
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxHIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
 

Actitud natural, mundo de la vida y reflexión trascendental

  • 1. 1 Ensayo monográfico Actitud natural, mundo de la vida y reflexión trascendental Marcos Jasminoy Antropología Filosófica Filosofía - 2° año Prof. Julia V. Iribarne Entregado: 05/05/08
  • 2. 2 El pensamiento de Husserl está orientado a la creación de un sistema metafísico que responda al sentido y al ser del existente u objeto. Sigue la línea de Descartes y Kant al dirigir sus esfuerzos al plano de la subjetividad, que será la que constituya el sentido de ser del objeto. Esta metafísica de la subjetividad debe estar fundada en evidencias apodícticas, y por lo mismo, dar cuenta de su propia existencia. Llevada a la práctica, esta filosofía se concretiza en una tarea de infinita, que es método y filosofía a la vez. No será suficiente librarse de los prejuicios de las ciencias y filosofías anteriores, sino que hay incluso habrá que hacerlo con el fondo común de todas ellas: el mundo de la experiencia. Solo se aceptará el mostrarse del mundo a nosotros, es decir, el fenómeno.1 Es así que llegamos a delinear el concepto de actitud natural. Ésta es la actitud espontánea, que se da tanto en la vida cotidiana como en el conocimiento científico, en la cual la existencia del mundo y sus objetos no ha sido cuestionada. Es, por ello, una actitud ingenua, o mejor, a-crítica. En otras palabras, hay una disposición natural a aceptar la realidad que se nos presenta como “estando ahí adelante”. Al vivir inmersos en el mundo, no tenemos por qué cuestionarlo. Y las ciencias de la actitud natural siguen ese camino; no hacen más que profundizar y resolver problemas sobre ese mismo suelo común. Por ello, toda filosofía que se precie de ser rigurosa debe superar esta actitud natural. A esto se dirige el método fenomenológico, que va a eliminar los hábitos intelectuales anteriores y a poner entre paréntesis juicios acerca de la existencia de la realidad extra-mental espacio-temporal experimentada.2 Husserl ensayó muchas aproximaciones distintas a la fenomenología. Una de ellas fue una aguda interpretación de la crisis que sacudía a Europa. Una crisis primariamente epistémica, podría decirse, pero que en realidad afecta a la vida misma de Europa. No es el lugar de repasar el análisis de su presente en crisis, que hace Husserl observando detenidamente el pasado. Sin embargo podemos mencionar dos cosas. La primera es la necesidad histórica de desembocar en la fenomenología. La segunda es la conclusión que saca acerca de las causas de tal crisis. Entre otras, hay que destacar la siguiente: la imposibilidad de las ciencias de dar radicalmente cuente de sus propias producciones. Eso equivale a decir que las ciencias, en su conformación como tales, han olvidado el suelo de su fundamentación, la condición a priori de su posibilidad: el mundo-de-la-vida.3 El mundo-de-la-vida es el mundo pre-reflexivo de la experiencia asentada en el sujeto. Se da por sentado en toda vivencia, en la vida humana misma, existe siempre de antemano, es decir, en él se basa cualquier actividad, sea teorética o extra-teorética, y le damos existencia real sin reflexionar sobre ello. El mundo-de-la-vida “nos es pre-dado, no ocasionalmente sino necesariamente como campo universal para toda práctica actual y posible, como horizonte. Vivir es siempre vivir con la certeza del mundo”4. En la historia de la humanidad, siempre estuvo-ahí, incluso antes de la ciencia y sus ínfulas de conocimiento objetivo, y por ello se funda en él y hacia él afluye.5 Es en el mundo-de-la-vida que todo lo humano es realizable, y toda actividad está englobada en él. Pero su sentido cambia constantemente, puesto que su aprehensión 1 Para todo el párrafo: Cfr. Mgr, p. 140 – 141. 2 Para todo el párrafo: Cfr. Mgr, p. 141 – 142. 3 Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 1. 4 E. Husserl, La crisis de las ciencias europeas y la fenomenología trascendental, La Haya, Martinus Nijhoff, 1954, p. 145. 5 Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 1.
  • 3. 3 es histórica. Además, es aprehendido junto con otros, es decir, no lo hacemos de forma aislada, sino de forma inter-subjetiva. Este es un concepto clave, no sólo para entender el mundo-de-la-vida, sino incluso la naturaleza misma de la filosofía trascendental de Husserl, pero no compete su interpretación a este breve trabajo. Lo que sí hay que mencionar es que ante la certeza de que existe tal mundo, la mirada puede detenerse allí o preguntarse para quién hay una certeza, remitiendo así a la subjetividad. Si al comienzo de sus investigaciones fenomenológicas (antes de la Crisis), Husserl quería superar la actitud natural del aún conceptualmente implícito mundo-de- la-vida, para llegar a la actitud trascendental de la conciencia pura, ahora pareciera volcarse a la comprehensión del mismo mundo-de-la-vida, examinando la primaria actitud de la experiencia. Pero, ¿puede existir una ciencia que sirva a la vida en su mundo-de-la-vida? Habría que distinguir primero dos clases de certeza o verdad. En primer lugar, está la certeza objetiva (o mejor, objetivante) de las ciencias de la actitud natural. Pero el conocimiento teórico-objetivo no es más que un acercamiento a la realidad del mundo- de-la-vida. El sujeto vive en el mundo-de-la-vida, y por tanto no sólo todo conocimiento sino también toda vivencia, desde la volición hasta el recuerdo, pasando por la creación artística, la valoración e incluso la fantasía, se hallan en él. Es por esto que el mundo- de-la-vida es eminentemente subjetivo, y por eso le corresponden un segundo tipo de certezas, “certezas puestas a prueba en la práctica y asumidas como incondicionalmente válidas, tomadas del círculo de certezas confiables desde antiguo, y en la vida del ser humano previas a toda necesidad de fundamentación científica”6. Esta verdad subjetiva está basada en la inducción, entendida ésta como pre-científica, es decir, como una tendencia del hombre (entendido como conciencia encarnada, es decir, en sus aspectos mentales y corporales también) al mundo-de-la-vida, “cotidianamente confiable y sin embargo científicamente desconocido”7. El mundo-de-la-vida, finalmente, incluye la totalidad de lo existente-para el hombre. Así fijada la meta de esta ciencia, volvemos a preguntarnos por la posibilidad de su existencia. Hay que aclarar ahora que, en vistas a lo recién dicho, se entiende al mundo-de-la-vida como certeza absoluta que no se pone en duda y por eso mismo como presupuesto para cualquier constitución efectuada por el yo. Esto es ya uno de los a prioris del mundo-de-la-vida: hay una subjetividad que lo produce. Ya nos habíamos topado implícitamente con otro a priori: su carácter espacio-temporal o, en otras palabras, su ser-aquí y su ser-ahora, su presencia y su presente. La captación que tienen las ciencias de la actitud natural sobre el mundo-de-la- vida es insuficiente porque su objetivación es siempre teórica e ideal. Ahora bien, si Husserl pretende encontrar el fundamento de este mundo que actúa como campo de toda actividad humana, debe hacerlo con una cientificidad más abarcadora. La fundamentación o constitución del mundo, el darle sentido, tiene que ser algo más que simple actividad objetivante. Porque si toda actividad humana (el mundo-de-la-vida) es puesta bajo la mirada objetivante entonces la misma conciencia, en tanto inmersa en el mundo, quedaría objetivada, se convertiría en fenómeno, y en este caso un fenómeno siempre falseado, alejado del presente en que se realiza la actividad de la conciencia. Pero el sujeto nunca puede ser objeto. La conciencia es actividad pura, y no necesaria ni 6 Crisis, p. 441. 7 Ibidem, p. 449.
  • 4. 4 primordialmente actividad teorética. O para entenderlo aún de otra manera: la misma ciencia del mundo-de-la-vida es una actividad humana y como tal se realiza sobre el mismo suelo del mundo-de-la-vida. Lo que pasa es que el interés teorético de las ciencias de la actitud natural debe superarse en la gestación de una ciencia del mundo-de-la-vida. Y aquí entra en juego la reflexión fenomenológico-trascendental, que en este trabajo se ha intentado postergar lo más posible para acercarnos de lleno a ella y comprender su importancia que es, como veremos, definitoria. Husserl parte de que las actividades humanas pueden ser o bien directas o bien reflexivas. Las primeras son siempre intencionales: percibir, recordar, predicar, querer… Las segundas, sin dejar de ser intencionales, se dirigen a una actividad directa y al estar dirigida de ésta a un objeto intencional. Así, la percepción de una casa es directa; si reflexionamos, a través de cualquier actividad, sea por ejemplo el recuerdo, sobre esta percepción, recordaremos la percepción misma y su estar dirigida perceptivamente a la casa.8 A su vez, la reflexión se divide en natural y fenomenológico-trascendental. La reflexión natural se dará en el terreno del mundo dado como tal (por ejemplo, “quiero ver una casa”, “me acuerdo de haber oído una melodía”, “odio tener proyectos de tal cosa”). En la reflexión fenomenológico-trascendental, en cambio, el sujeto reflexiona sobre otra actividad o vivencia, pero poniendo su existencia entre paréntesis. Es así que si tenemos una vivencia I (ingenua), ésta se le hará presente a una vivencia II, que contemplará desinteresadamente la primera. Es así que se descubre la vivencia en curso y el objeto vivenciado. Ahora bien, hará una falta una vivencia III, también desinteresada, que se dará cuenta de que esto tiene lugar. Así, desinteresándonos, de la existencia no sólo de la vivencia I, sino también de la vivencia II, llegamos a descubrir el yo trascendental del cual la vivencia II es cosa suya. Esta esfera del yo está llamada a ser la base de todo crítica universal y radical.9 En otras palabras, se puede afirmar: cogito cogitatum (qua cogitatum). Esto se puede traducir, en el lenguaje de la estática de la conciencia husserliana a: mi nóesis tiene como correlato un nóema, a mi acto psíquico intencional le corresponde (como contenido) un objeto intencional10. Y así, dando un paso más, poniendo la misma existencia de la nóesis y del nóema entre paréntesis, llegamos a lo más profundo de la reflexión trascendental, en la cual salta a la vista que el yo que aplica la reflexión fenomenológico-trascendental puede llegar a ser, “no sólo en algunas particularidades, sino con universalidad, ‘espectador desinteresado’ de sí mismo, y como incluido en esto, de toda objetividad que ‘exista’ para él, y tal como exista para él ”11. Hemos llegado al sujeto trascendental. ¿De eso se trataba toda esta ciencia de los a prioris del mundo-de-la-vida? ¿Acaso todo el fundamento del mundo-de-la-vida no es más que un paso metodológico previo para alcanzar a la conciencia pura, puesto que una vez aplicada la reducción fenomenológico-trascendental llegamos al sujeto trascendental? No y no, dos veces no. 8 Para todo el párrafo: Cfr. Meditaciones cartesianas, traducidas por J. Gaos, México, F. C. E., 1996, p. 80. 9 Para todo el párrafo: Cfr. Idem, p. 81 – 83. 10 Cfr. Idem, p. 83. 11 Idem, p. 84.
  • 5. 5 Por un lado, si bien esta ciencia de los a prioris sirve como paso metodológico, tiene valor en sí misma, es decir, no se reduce a eso. Y por el otro, la conciencia pura no puede ser comprendida aún con esta reflexión trascendental si no se pone en evidencia otro elemento del que no hemos hablado aún. Este elemento es la historicidad, otro a priori del mundo de la vida. Nos referiremos a él antes de aclarar el valor (el nuevo valor) del mundo-de-la-vida. El camino para llegar a él parte de la pregunta sobre en qué esta nueva ciencia no modifica nuestro mundo-de-la-vida, transformado desde ya por su aplicación. Husserl dirá que la ciencia afluye al mundo-de-la-vida y lo transforma con sus metas y obras. Así, según cambie (progrese hacia al télos, en última instancia) la ciencia, el mundo-de-la-vida cambiará también con las condiciones históricas. Sin embargo, el sujeto, que siempre tiene intereses, no sólo estará envuelto en el mundo histórico, sino que a través de la efectuación de la ciencia podrá modificarlo. Tendrá iniciativa, si se quiere, frente a las determinaciones del mundo-de-la-vida que, a pesar de su carácter cultural histórico, inter-subjetivo si se quiere, en el fondo siempre será constituido por el mismo sujeto. Es decir, el mundo histórico espacio-temporal no tendrá validez definitiva, sino presuntiva, por su carácter natural; es decir, será un momento del “fluir heracliteano”.12 Para superar el material intuitivo de las ciencias de la actitud natural, en este caso de la historia de las formas culturales, no basta con buscar lo que tienen en común sino que hay que profundizar sobre la raíz última. Para abandonar un relativismo histórico y cultural, en el que la verdad subjetiva del mundo-de-la-vida vale sólo en determinada época y cultura, se trata de alcanzar la “la reflexión sobre las condiciones de posibilidad de esa relatividad, que se hallan en la subjetividad trascendental ”13. Y así se desemboca en la “estructura temporal de la subjetividad constituyente que se constituye a sí misma como fluir temporal”, en el presente fluyente viviente, la conciencia vacía de todo contenido vivencial, un cambio permanente sin nada que cambie, una naturaleza naturante intemporal que trasciende y funda todo el mundo. Que contiene, incorporadas como horizonte, todas sus vivencias, sean pasadas o por venir. Y así llegamos al otro punto, al verdadero valor del mundo-de-la-vida. Sólo puede ser comprendido si nos convencemos de que es siempre mundo constituido (aunque no necesariamente teorizado) por un yo. Esto es afirmar que el conocimiento es la relación que une a los objetos intencionados (en cuanto tales) con el modo de conciencia intencional. Estos dos correlatos, de los que ya hemos hablado antes, son inseparables y se hallan en íntima comunión. Mientras el objeto sea externo a la conciencia, se nos presentara bajo tal o cual perspectiva, por lo que siempre será inagotable. Ahora bien, si el objeto es la misma vivencia interna, es decir, un momento del mismo flujo de la conciencia, o en otras palabras, si la actividad reflexiva tiene como objeto otra actividad, entonces se abandona definitivamente el dualismo que había entre la vivencia hacia fuera y el objeto vivenciado espacio-temporal exterior, ya que ahora tendremos que hablar de vivencia y objeto vivenciado llanamente, sin agregar más epítetos. Todo está como contenido vivencial; no hemos perdido el mundo, sino que lo hemos ganado en cuando vivenciado y éste es su valor. Y así se concluye que en realidad, como la conciencia intencional y sus objetos intencionales están en inseparable unión, cada vez que el sujeto constituye un objeto en 12 Para todo el párrafo: Cfr. Mundo de la vida, p. 2. 13 Idem, p. 2.
  • 6. 6 el mundo, cada vez que tiene una vivencia, cada vez que es activo, más aún, cada vez que el sujeto constituye el mundo-de-la-vida, está constituyéndose a sí mismo como sujeto trascendental. El yo no puede ser sin estar en el mundo. Permítasenos terminar con unos bellos versos de Jorge Guillén: Yo soy, soy... ¿Cómo? Donde estoy: contigo, mundo, contigo. Sea tu absoluta compañía siempre. ¿Yo soy? Yo estoy.