El documento describe las principales etapas del desarrollo motor en los primeros años de vida de una persona, incluyendo habilidades como levantar la cabeza, rodar, sentarse, gatear y caminar. Explica que este desarrollo sigue una secuencia donde el dominio de una habilidad ayuda a desarrollar la siguiente. También menciona las etapas posteriores del desarrollo, como la infancia, la preescolaridad, la escolaridad y la adultez.
Actividad motora del niño crecimiento y desarrollo
1. Los cambios más importantes con respecto al desarrollo motor de toda persona ocurren en los
primeros años de vida, es en este periodo en el cual el niño adquiere destrezas básicas y necesarias
que le permitirán la supervivencia y el desarrollo de habilidades superiores.
Este desarrollo motor sigue una secuencia, es decir que el dominio de una habilidad ayuda a que surja
otra. Observamos así como primero aprende a levantar su cabeza, luego a girar, sentarse, gatear, para
luego pararse, caminar, correr, saltar, haciendo cada vez más complejo el ejercicio de sus movimientos.
DESARROLLO DE HABILIDADES MOTORAS POR ETAPAS:
1.- Levantar la cabeza: Es la primera destreza que debe dominar el bebé es el control cefálico, en
posición boca abajo, el bebé debe levantar la cabeza y mantenerse en esa posición, para ello necesitará
fortalecer los músculos del cuello, la espalda y ayudarse con sus manitas.
2.- Rodar: Cuando el bebé ya es capaz de tener control de los movimientos de su cabeza y sostenerse
sobre sus brazos, debe aprender a darse vueltas, esto generalmente se consigue entre los 4 y 6 meses,
es una preparación para las siguientes fases: sentarse, gatear y caminar, pues se requiere rotar el cuerpo
y tener movimientos coordinados.
3.- Sentarse: Para aprender a sentarse, el bebé debe dominar las siguientes actividades: controlar su
cabeza, cuello, los movimientos de sus brazos y manos y a girar hacia ambos lados, Ahora le tocará
controlar su tronco, ser capaz de mantenerse sentado, mantener el equilibrio para finalmente fortalecer
los músculos de sus piernas y poder caminar. En esta etapa, el bebé será capaz de mantenerse sentado
por algunos segundos si alguien o algo lo sostiene, existirá todavía una curvatura en la espalda por lo
que será necesario que adquiera una adecuada postura, sin arquear la columna. Si se sujeta al niño
fuertemente por las caderas, su espalda se reforzará para mantener un buen equilibrio y aprenderá
gradualmente a controlar los músculos del cuello y de la parte superior de la espalda, para finalmente
conseguir estar sentado con poca o ninguna ayuda.
4.- Gatear: El gateo es un proceso que constituye un gran avance para el bebé, a nivel neurológico y de
coordinación. Una vez que el niño se sienta sin apoyo, está listo para ponerse en posición de gateo,
primero aprenderá a arrastrarse, el objetivo de esta fase es lograr que el bebé aprenda a coordinar los
movimientos de sus piernas y brazos (brazo derecho-pierna izquierda, brazo izquierdo-pierna derecha),
tenga dominio y control de su propio cuerpo y aprenda a ubicarse y desplazarse sobre su espacio, todo
ello es un preámbulo y una preparación para empezar a caminar. Cabe resaltar que cada niño tiene sus
propias particularidades, es decir no todos gatean a los 7 u 8 meses, algunos lo hacen antes y otros
después.
5.- Caminar: Las fases previas son preparatorias para la caminata, además de ello, debe mantener el
equilibrio de rodillas y de pie para lograr pararse solo y vencer la fuerza de gravedad para dar sus
primeros pasos, podemos estimularlo con apoyo en un principio y luego por sí solo cuando logre el
equilibrio. Como apreciamos, para aprender a caminar, el niño debe tener control de su cuerpo, una
adecuada postura, coordinación motora adecuada y el equilibrio necesario para estar de pie y
desplazarse.
SECUENCIA DE DESARROLLO DE HABILIDADES MOTORAS
HABILIDAD COMO ESTIMULAR MATERIALES
MOTORA
Control de la cabeza Con el niño recostado boca abajo, mostrar Sonajeros.
(0 – 3 meses) juguetes, sonajeros, figuras en colores contraste Juguetes de preferencia color blanco,
para focalizar su visión y hacer mantenga la negro y rojo.
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2. cabeza levantada por breves minutos. Cuñas
Tarjetas de estimulación visual.
Posteriormente se realizan ejercicios de control
cefálico: Movimiento de la cabeza en 90º y 180º.
Rodar Colocar al niño de espaldas en una superficie Rodillo de estimulación
(4-6 meses) firme y estimúlelo a que voltee su cabeza hacia Cuñas
un lado, luego ayúdelo a levantar el brazo y a Colchonetas
doblar la pierna contraria ayudándolo del Sonajeros
hombro para completar el movimiento de Juguetes preferidos por el bebé.
rotación.
Sentarse Siente al niño en una superficie firme, déle Rodillos
(5-7 meses) apoyo en las caderas, ayúdelo a que se apoye Pelotas para ejercicios de equilibrio.
hacia el frente sobre sus manos. Asiento para bebés.
Juguetes diversos
Colóquelo sobre el asiento para bebes, por Tablero de actividades
breves minutos y bríndele algunos juguetes o un
tablero de actividades para que poco a poco
adopte esta posición.
Gatear Con el niño sentado, ayúdelo a que apoye las Rodillos de gateo
(7-10 meses) manos hacia adelante, doble las rodillas y dirija Pelota de terapia, para trabajar gateo,
los pies hacia atrás, quedará apoyado en coordinación.
posición de gateo. También puede hacer esto Túneles de gateo
sobre una pelota o un rodillo para gateo y
balancear al niño suavemente.
Caminar Párelo sobre un piso con textura que favorezca Módulos de coordinación para trabajar
(11 -15 meses) la caminata, cuide que la espalda esté recta. El fuerza muscular en brazos y piernas,
niño caminará fácilmente con los brazos lateralidad
extendidos al frente y apoyándose en los brazos Pisos microporoso para favorecer la
de la madre o sobre un material resistente. estimulación táctil y la caminata.
Paralelo a este desarrollo motor grueso, se presenta el desarrollo motor fino, y a partir del primer año,
podemos observar como el bebé agarra los objetos con mayor facilidad, existe mayor dominio de la
presión tipo pinza, lo que le permitirá realizar ejercicios de pasado, ensarte, garabateo y el proceso de
escritura.
El desarrollo de esta secuencia es muy importante para el niño, debe los cuidados, la atención y la
estimulación necesaria puesto que será la base que permitirá el desarrollo de otras habilidades, tanto
intelectuales como afectivas. También nos permite detectar alguna alteración en el desarrollo, a nivel de
tono muscular, postura o retraso psicomotor.
DESARROLLO
1. Etapa de la lactancia.
2. Etapa muscular o segunda infancia.
3. Etapa preescolar o edad del juego.
4. Etapa escolar.
5. Adolescencia.
6. Etapa del adulto joven.
7. Etapa madura o adultez media.
8. Senescencia o adultez tardía.
Etapa de la lactancia: El niño al nacer pasa desde el medio intrauterino a otro, sigue dependiendo
directamente de la madre para sobrevivir biológicamente. Según Erikson cuando se obtiene el vinculo
madre e hijo, el niño adquiere “confianza básica” en su medio circundante, y una actitud esperanzada y
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3. optimista con respecto a su vida. El alejamiento, depresión materna, etc; crea en el niño una actitud de
desconfianza, pesimismo en relación al ambiente. Según Margaret Mahler, señala que este periodo se
produce el “nacimiento psicológico” de la persona. Este a diferencia del nacimiento biológico, es un
proceso lento en el cual se avanza desde una simbiosis inicial con la madre, a través de un proceso de
separación/individuación.
Etapa muscular o segunda infancia: Comprende el periodo de 2 a 4 años cuando se produce la
maduración neurológica. Surge su capacidad de movilización, de control de musculatura y su capacidad
de vocalización se desarrolla. Según Erikson, se adquiere el sentido de autonomía; el niño siente que
posee voluntad propia, que es capaz de autocontrolarse. El exceso de protección por la madre produce
en el niño sentimientos de duda, vergüenza o inseguridad en sí mismo.
Etapa preescolar o edad del juego: Comprende entre los 4 y 5 años; el niño sé ha independizado, tanto
psicológica como físicamente de la madre. El niño se percata mas claramente de su medio externo.
Cuando los padres u otros; definen los intentos del niño para tomar iniciativas y conseguir sus propios
fines como algo negativo o malo, y son por lo tanto castigados, se puede generar una reacción de culpa.
Cuando aparece el exceso de culpa, y no se concreta un sentido de finalidad claro, se abre la posibilidad
de que en la vida adulta aparezcan cuadros neuróticos.
Etapa escolar: Comprende entre los 5 y 10 anos, el niño comienza a pasar periodos cada vez mas
prolongados fuera del hogar y da mayor importancia al medio escolar. Surge el sentido de ser
competente; el juego, los deportes competitivos y el rendimiento escolar son cruciales en la consolidación
de un sentido de ser competente; en la medida que el niño rinde bien y se relaciona adecuadamente con
sus pares. Cuando esto no sucede surge el sentimiento de inferioridad o de incompetencia.
Adolescencia: Periodo entre los 10 y 19 años, los cambios biológicos de la pubertad dan origen a
respuestas psicológicas; el adolescente se separa en forma progresiva de la familia y se plantea el tema
de la propia identidad. La “identidad” es definida por Erikson como el sentido de continuidad y estabilidad
de la persona alo largo del tiempo. El sentido de la propia identidad se traduce en decisiones al final de la
adolescencia con respecto a elecciones vocacionales y de pareja. Si esta consolidación no se logra,
Erikson habla de “confusión de identidad”.
Etapa del adulto joven: Periodo entre los 20 y 40 años, constituye el de mayor capacidad física, y
corresponde a la inserción activa en el mundo laboral y social. Generalmente, es el periodo de formación
y consolidación de relación de pareja. Para Erikson el logro central de esta etapa es la capacidad de
“intimidad” con el otro, y el riesgo más serio es el del “aislamiento”.
Etapa madura o adultez media: Periodo entre los 40 y 65 años; según Erikson se caracteriza por el
desarrollo de la capacidad de “generatividad” la de quienes saben cuidar el desarrollo de los demás, sean
los propios hijos o a las generaciones más jóvenes. La conciencia de la propia mortalidad, empieza a
surgir en forma cada vez más real, ya sea a través de las señales físicas externas del paso del tiempo
(canicie, calvicie, arrugas, etc.) o a través de los primeros signos de enfermedades crónicas del adulto
(diabetes, hipertensión, etc.). Cuando este periodo no es enfrentado exitosamente, suelen surgir
conflictos familiares, uso excesivo de alcohol o de otras sustancias químicas, o cuadros ansiosos o
depresivos crónicos. Ortega y Gasset llaman a este periodo “generación dominante”, ya que en el se
tiende a ocupar posiciones de mayor responsabilidad y poder social.
Senescencia o adultez tardía: Posterior a los 65 anos. Para Erikson se llega aquí al tema final del ciclo
vital, siempre que el individuo haya vivido plenamente y asegurado la sobrevida de la generación que le
sigue. Este cierre se logra al aceptar la finitud de la vida biológica y la sucesión de las generaciones. El
desenlace negativo se da con la sensación de fracaso o de no completar el propio proyecto vital, en este
caso surge la “desesperanza”; frecuente en los cuadros depresivos.
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