El documento analiza el año 1968 como el "año mágico" que marcó un punto de inflexión en el mundo. Este año se caracterizó por las protestas juveniles y estudiantiles en varios países, influenciadas por la inconformidad con la dictadura y la corrupción del estado. Los estudiantes, académicos y líderes sociales lideraron movimientos por la libertad de expresión y los derechos humanos. Aunque hubo eventos violentos como masacres, este año permitió que la juventud expresara sus creencias y opiniones.