novelas-cortas--3.pdf Analisis introspectivo y retrospectivo, sintesis
ANEXO DE RELIGIOÓN 05-09-2022.pdf
1. Haciendo uso del ingenio
Hace mucho tiempo existieron dos
hombres
llamados Nicolás, mientras uno era rico el otro era pobre, por este
motivo al rico lo llamaban Nicolasón y el pobre era conocido como
Nicolasín. Este último trabajaba de lunes a sábado en los campos del primero
ayudado por los cuatro caballos que este tenía. Los domingos eran utilizados por
Nicolasín para ocuparse de sus tierras, con su pobre jamelgo.
Un día el pobre Nicolasín tuvo la mala fortuna al darle a uno de los aballos del
patrón, con la fusta y el animal hizo tal alboroto que, al advertirlo su amo, montó en
cólera y fue a las tierras de Nicolasín y de un golpe mató al pobre penco.
La piel del animal muerto podía venderse en el pueblo cercano por lo que el labriego
la colocó en un saco y se fue. En el poblado tuvo la buen afortuna de proveer a un
hombre de una suculenta cena y de no morir ahogado a otro. Cada uno le dio una
bolsa de oro, con ellas y lo obtenido por la venta de la piel regresó. A las preguntas
de Nicolasón simplemente dijo que obtuvo dos bolsas de oro en su viaje.
Sin pensarlo dos veces, el avaricioso amo, mató a los
cuatro caballos y se fue a vender las pieles al pueblo
vecino. Todos se reían cuando lo escuchaban pedir
dos bolsas de oro por cada una de las pieles. El día
acabo y no vendió piel alguna. Enojadísimo se dirigió
a las tierras de Nicolasín y sin mediar dialogo alguno lo metió en un saco para tirarlo
al río.
En el camino entró el amo a una posada para cenar. Entretanto Nicolasín decía:
“¡no quiero morir!”, “¡no quiero morir!”. Un viejo muy rico lo escuchó y abriendo el
saco le ofreció cambiar de lugar, pues, él estaba cercano a la muerte y no tenía
quien lo acompañe en el postrer momento. De buen grado intercambiaron lugar y el
anciano antes de quedar encerrado dio a Nicolasín las llaves de su casa y caja
fuerte.
Al regresar el avaricioso Nicolasón al pueblo vio a Nicolasín bien
vestido y sobre todo ¡vivo! “¿Cómo ha sucedido esto, te acabo de
arrojar al río? ¿Qué pasó?” Nicolasín le dijo que todo era cuestión de
un poquito de suerte y de la astucia para salir adelante ante las
adversidades que ahora lo convertían en el hombre más rico de la
región.
Hans C. Andersen
05/09/2022