El FMI presenta previsiones económicas mundiales ligeramente menos negativas, aunque se espera una caída del PIB global del 4,4% en 2020. Luis Arce ganó las elecciones presidenciales en Bolivia con el apoyo del partido de Evo Morales. China registró un crecimiento del PIB del 4,9% en el tercer trimestre, afirmando su recuperación económica.
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INTERNACIONAL
INTERNACIONAL
│ Nuevas previsiones del FMI
En la última edición del World Economic Outlook publicado por el Fondo Monetario Internacional
la semana pasada, el organismo presenta un panorama económico global ligeramente menos
sombrío de lo anticipado. Esta revisión al alza (con respecto a las previsiones anunciadas el
pasado junio) está motivada por la evolución del PIB de las economías avanzadas en el segundo
trimestre de 2020, que finalmente no fue tan negativa como se había proyectado, el regreso al
crecimiento de China, y ligeros signos de recuperación en el tercer trimestre. El fondo recalca que
todo esto ha sido posible por las cuantiosas, rápidas e inauditas respuestas fiscales, monetarias y
regulatorias por parte de los estados. No obstante, se espera una caída récord del PIB mundial
del 4,4% en 2020 por diversas razones: el abrupto parón en la actividad económica y el comercio
mundial, todavía muy por debajo de los niveles pre-crisis; el duro efecto que esto ha tenido en el
mercado laboral, con la pérdida de más de 400 millones de puestos de trabajo; y el hecho de
que la pandemia continua expandiéndose. Tras esta profunda recesión, se anticipa una
recuperación del 5,2% en 2021 (lo que equivaldría a un nivel de PIB global solamente un 0,6%
mayor que en 2019). A medio plazo, las previsiones apuntan a que el crecimiento mundial se
estabilice en el entorno del 3,5% anual, en un contexto de baja inflación y una recuperación lenta
del comercio internacional. Todo esto supone un marcado distanciamiento con respecto a la
trayectoria económica proyectada antes de la pandemia, así como un retroceso en los esfuerzos
por mejorar las condiciones de vida y reducir la pobreza de la población mundial. Se espera que,
entre las diez mayores economías avanzadas, el PIB potencial en el medio plazo sea de media un
3,5% menor de lo proyectado antes de la pandemia, mientras que en el caso de los diez mayores
mercados emergentes la caída llegue hasta el 5,5%.
│Diferencias entre regiones
En el grupo de economías avanzadas, se prevé que el impacto de la pandemia en el crecimiento
sea de un -5,8% en 2020, y que el rebote en 2021 se limite a un 3,9%. En el caso de los países
emergentes y en desarrollo, el mayor golpe será para la región de Latinoamérica y el Caribe,
actual epicentro de la pandemia, cuyo PIB caerá un 8,1% en 2020, seguido de Oriente Medio y
Asia Central (-4,1% en 2020), región afectada también por la caída histórica de los precios del
petróleo. En Asia destaca China, que experimentará un crecimiento del 1,9% en 2020 (seguido
por un 8,2% en 2021) gracias a una sorprendentemente rápida vuelta a la normalidad. Pese a que
esta cifra supone una fuerte desaceleración con respecto a su serie histórica, China es una de las
pocas excepciones al decrecimiento generalizado de la economía mundial. Esto contrasta con
el caso de otros países asiáticos en vías de desarrollo que, además de tener estructuras
económicas más vulnerables (altos niveles de economía informal y mayor desigualdad y pobreza,
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entre otros), no han sido capaces de controlar la expansión del virus. Este es el caso de India (que
sufrirá una reducción de su PIB de un 10,3%), Filipinas (-8,3%), Tailandia (-7,1%) o Malasia (-6%).
│Riesgos a la recuperación
El FMI, no obstante, advierte que la débil recuperación proyectada para el año que viene, está
sujeta a notables riesgos. Entre ellos se encuentra un repunte en la incidencia del virus, la retirada
prematura de los paquetes de ayuda, el empeoramiento de los indicadores de liquidez y
solvencia a nivel global, un aumento de las tensiones geopolíticas o una intensificación del
descontento social. Para evitar que estos riesgos se materialicen, el Fondo, una vez más, aconseja
aumentar la cooperación multilateral y apoyar financieramente a los países que más lo necesiten,
así como apostar por un crecimiento económico medioambientalmente sostenible.
LATINOAMÉRICA
BOLIVIA
│Resultados preliminares de las elecciones
Luis Arce, el candidato del partido de Evo Morales, ha ganado, con casi toda seguridad, las
elecciones presidenciales celebradas el 18 de octubre en la primera vuelta, tal y como indican
los sondeos a pie de urna. Los resultado definitivos no se conocerán hasta dentro de un par de
días pero todo apunta a que el candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), habría logrado en
torno al 52,4% de los votos frente al 31,5% de su rival más cercano, el centrista Carlos Mesa. El
candidato de ultra derecha Luis Fernando Camacho conseguiría tan solo el 14%. La alta
participación y la tranquilidad, salvo episodios aislados, fueron la tónica general de unos
elecciones que se esperan ponga fin a la crisis política que se generó tras la anulación de los
comicios realizados en octubre del año pasado que supuestamente fueron ganados por Morales.
Las denuncias de fraude y masivas protestas forzaron la salida del mandatario del país dejando
un vacío de poder, hasta que Jeanine Áñez asumió a los dos días el Gobierno de forma interina.
│Arce, el delfín de Morales
La carrera política de Arce está íntimamente ligada a la de Evo Morales, de quien fue ministro de
Economía durante gran parte de los 14 años que estuvo en el poder. Para muchos bolivianos su
gestión fue uno de los pilares que llevó al país sudamericano a una etapa de notable dinamismo
económico (con tasas de crecimiento del PIB por encima del 5%) que permitió sacar a tres
millones de la pobreza. Como se recordará, la política económica bajo el mandato de Morales
se caracterizó por una combinación de nacionalización, obras públicas y algunas políticas
favorables para sectores como la agricultura lo que ayudó a impulsar el crecimiento durante más
de una década. De hecho, Arce, en su momento, fue un férreo defensor de las polémicas
nacionalizaciones, principalmente la de los hidrocarburos. No obstante, dicha estrategia derivó
en un modelo de crecimiento excesivamente dependiente de los ingresos del sector gasista, muy
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vulnerables a shocks externos y difícilmente sostenibles en el tiempo. A partir de 2015, Bolivia
registró una preocupante desaceleración económica a causa del desplome del precio de los
hidrocarburos, que fue parcialmente compensada con políticas expansivas, lo que condujo a
elevados déficit gemelos (fiscal y exterior) y un preocupante descenso de las reservas.
HONDURAS / GUATEMALA / ESTADOS UNIDOS
│Escándalo migratorio
Según un informe del Senado norteamericano, agentes de la unidad de Aduanas y Protección
de Fronteras de EE.UU. habrían ejecutado una operación irregular en Guatemala, trasladando
inmigrantes hondureños de vuelta a su país. Dicha deportación ilegal se ejecutó sin cumplir los
protocolos esenciales de seguridad y sin la más mínima protección de los derechos humanos. El
gobierno de Guatemala ha anunciado que estudiará los hechos denunciados en el informe, que
tuvieron lugar el pasado enero, cuando se formó en Honduras una caravana de inmigrantes
dirigida a la frontera de México con Estados Unidos. Este es el último roce entre las naciones
centroamericanas y Washington, tras meses de calma en materia de migración a causa de las
medidas tomadas en la lucha contra el Covid-19. La relación entre los países ha empeorado
desde el ascenso al poder de Donald Trump, quien ha hecho de la lucha contra la inmigración
una de las prioridades de su presidencia al culparla de los altos índices de criminalidad en EE.UU.
Existe, por tanto, una gran expectación por las elecciones estadounidenses máxime teniendo en
cuenta que el candidato demócrata ha señalado que se encargará de deshacer el “daño”
causado por la administración Trump en materia migratoria. Todo apunta a que con Joe Biden en
la Casa Blanca se retornará a las herramientas diplomáticas tradicionales e, indudablemente,
hacia una postura menos beligerante en esta materia. Todo esto, en un contexto en el que se
anticipa que los efectos de la pandemia agraven la inmigración ilegal en la región a medio plazo.
VENEZUELA
│Ley Antibloqueo
La Asamblea Nacional Constituyente (ANC), órgano dominado por el chavismo y que la oposición
considera “ilegal”, aprobó la semana pasada la Ley Antibloqueo que otorga al presidente
Maduro poderes extraordinarios para tomar decisiones en materia económica, alegando que
será un instrumento para “contrarrestar” sanciones encabezadas por los Estados Unidos. La
polémica norma trata de atraer inversión directa extranjera gracias a una cláusula de
discrecionalidad que permite no revelar la identidad de las potenciales empresas inversoras, con
el fin de evitar la persecución del gobierno estadounidense. El objetivo es burlar las sanciones
internacionales con el fin de dotar de algo de oxígeno al país, ahogado financieramente tras seis
años de contracción económica. La ley otorga al mandatario socialista directamente la potestad
para “inaplicar” normas legales “cuya aplicación resulte imposible o contraproducente”. Por si
esto fuera poco, declara “secretos y reservados” todos los actos derivados de su aplicación, por
lo que el Gobierno no estaría obligado a someterse a ningún tipo de control. La oposición no ha
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tardado en reaccionar ante este nuevo abuso de poder del oficialismo. El Legislativo, único poder
en manos opositoras, aprobó un acuerdo para “desconocer la supuesta Ley Antibloqueo” y
rechazó negociaciones amparadas por dicha normativa “paralegal”. Conviene destacar que, a
diferencia de lo que ha ocurrido en otras ocasiones, la ley ha sido cuestionada también por figuras
del propio chavismo y aliados de Maduro, que la han criticado porque consideran que
contraviene el legado de Hugo Chávez al fomentar la entrada de capital extranjero.
ASIA
CHINA
│Crecimiento del 4,9% PIB en el tercer trimestre
Las autoridades han publicado esta semana el dato de crecimiento del PIB entre julio y
septiembre sobre el mismo periodo del año anterior. La cifra oficial se sitúa en el 4,9%, que si bien
está algunas décimas por debajo de lo que esperaba el mercado, sigue afianzando la
recuperación del crecimiento chino y apuntando a un crecimiento en torno al 2% para todo el
año, una cifra relativamente buena si tenemos en cuenta el contexto internacional.
│Ley antiexportación de tecnología
La semana pasada China aprobó una ley antiexportación de tecnología diseñada como
represalia contra las medidas tomadas por EE.UU. contra las compañías tecnológicas chinas. La
ley, que entrará en vigor el 1 de diciembre, establece controles sobre la exportación de
tecnología tanto en empresas chinas como en extranjeras con presencia en el país y fija posibles
sanciones económicas y revocación de las licencias de exportación a los infractores, así como
posibles cargos penales contra individuos y organizaciones que pongan en peligro la seguridad
nacional al vender tecnología nacional. La norma es una nueva vuelta de tuerca en el
enfrentamiento por la supremacía tecnológica entre China y EE.UU.
TAILANDIA
│Crisis política
A pesar del decreto de emergencia del gobierno contra las reuniones públicas en masa y el
arresto de los principales líderes del movimiento, decenas de miles de personas se manifestaron
por quinto día consecutivo el pasado 18 de octubre en las calles de Bangkok, utilizando tácticas
muy similares a las protestas prodemocracia de Hong-Kong. Cerca de 10.000 personas se
reunieron frente al monumento de la victoria para pedir nuevamente la renuncia del primer
ministro Prayut (ex militar y cabecilla del golpe de 2014) y la reforma de la Constitución para limitar
los poderes del Rey. El ejecutivo ha utilizado hasta el momento un tono conciliador con los
manifestantes pero sí se ha mostrado tajante en cuanto a la defensa de la figura del Rey. El
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parlamento se reunirá de urgencia esta semana a petición del primer ministro para tratar la crisis
política.
EUROPA DEL ESTE - CEI
BIELORRUSIA
│¿Vientos de cambio en Minsk?
El pasado 10 de octubre el presidente bielorruso, Aleksander Lukashenko, sorprendió a todos
cuando accedió a reunirse con miembros destacados de la oposición actualmente
encarcelados. Entre ellos destacaba Dimitri Rabtsevic un empresario del incipiente sector
tecnológico bielorruso que cuenta con la simpatía del Kremlin. Poco después de la reunión, 10
de los 12 opositores quedaron en libertad. Un gesto sin precedentes en un país con una extensa
tradición de represión a la sociedad civil, máxime si se tiene en cuenta la grave crisis política en
la que se encuentra inmerso desde hace más de dos meses. Este movimiento del presidente
contrasta, sin embargo, con la dureza con la que actuaron las fuerzas armadas contra los
manifestantes tan solo un día más tarde y que se saldaron con más de 700 detenidos. Existen,
pues, serias dudas acerca de si la idea de mantener dicha reunión fue del propio presidente o si,
por el contrario, fue una “sugerencia” de Moscú, actualmente el único valedor internacional del
mandatario. Bruselas, en cambio, acordó hace algo más de una semana la imposición de
sanciones contra 40 personalidades cercanas al mandatario a las que les prohibió pisar suelo
europeo y congeló los activos. Una decisión que refleja el deterioro que han sufrido en los últimos
años las relaciones entre el bloque europeo y Minsk, antaño una pieza fundamental de la Política
de Vecindad Europea.
RUSIA / UNIÓN EUROPEA
│Más veneno, más sanciones
La Unión Europea impuso, el pasado 14 de octubre, nuevas sanciones sobre seis miembros del
Kremlin y un organismo estatal por su vinculación con el envenenamiento del opositor ruso, Alexei
Navalni el pasado mes de agosto. Las medidas adoptadas contemplan la congelación de los
activos financieros y la prohibición de pisar suelo europeo. Reino Unido, por su lado, decidió hacer
extensibles las medidas que también tienen validez en el territorio británico. Recordemos que
Navalni es un destacado activista ruso que fue envenenado con un agente nervioso, Novichock,
mientras organizaba las fuerzas opositoras en la región de Siberia. Tras pasar cerca de un mes
ingresado en un hospital en Berlín, fue recientemente dado de alta. A pesar de que Moscú ha
negado cualquier acusación, el pasado 6 de octubre la Organización para la Prohibición de las
Armas Químicas (OPAC) confirmó haber encontrado restos del agente nervioso Novichok en el
cuerpo del opositor, lo que apunta directamente al Kremlin. Rusia ya empleó esta misma sustancia
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contra el exagente secreto Sergei Skripal y su hija en 2018 en Salisbury, Reino Unido. En aquella
ocasión, sin embargo, la Unión Europea tardó casi cerca de un año en decidir cómo reaccionar.
Ahora, en cambio, apenas ha pasado un mes. La contundencia y celeridad del gesto responde,
en parte, a un cambio de actitud de Berlín frente a Moscú ya que, hasta ahora, Alemania era el
principal valedor de Rusia en Europa. Vemos, pues, cómo las relaciones diplomáticas entre Moscú
y Bruselas no dejan de deteriorarse a pesar de los fuertes vínculos energéticos que las unen.
NORTE DE ÁFRICA – ORIENTE MEDIO
ARABIA SAUDÍ / ESTADOS UNIDOS
│Preocupación ante un triunfo de Biden en las presidenciales
La aparente ventaja en las encuestas de Joe Biden sobre Donald Trump es vista con inquietud por
Mohamed Bin Salman (MBS), príncipe heredero de Arabia Saudí, quien, en caso de triunfo el
próximo 3 de noviembre del candidato demócrata, perdería un grandísimo aliado. MBS no olvida
que el actual inquilino de la Casa Blanca estuvo siempre a su lado cuando se filtraron las noticias
del asesinato del periodista disidente Jamal Khashoggi hace ahora justo dos años. Entonces, la
comunidad internacional criticó con saña a MBS, a quien responsabilizó del horrible crimen de
Estado, y boicoteó de manera ostensible la conferencia de inversores, conocida como el “Davos
en el Desierto” celebrada a finales de 2018 en Ryad. El príncipe heredero ve también en Trump un
firme bastión anti-iraní, como quedó demostrado cuando, en enero de 2020, el todavía Presidente
de los EE.UU. ordenó el asesinato de Qassem Soleimani, el comandante en jefe iraní de todos los
grupos armados chiítas que, bajo la dirección de la República Islámica, llevan a cabo acciones
militares contra EE.UU. y sus aliados en la región. MBS teme que si Biden es elegido Presidente, la
superpotencia decida volver a retomar las conversaciones con Irán en el marco del acuerdo
nuclear de 2015, del que Trump sacó unilateralmente a su país hace dos años. Una reanudación
de las conversaciones con Irán podría, además, implicar un levantamiento, siquiera parcial, de
las sanciones económicas impuestas por Trump hace dos años a la República Islámica.
│Demasiados intereses en juego
Pese a todo lo anterior, un triunfo demócrata en las presidenciales no implicaría tampoco una
ruptura total de los EE.UU. con Arabia Saudí, su principal aliado en esa parte del mundo. Los
intereses ─especialmente económicos─ entre ambos países son demasiado fuertes e importantes.
Arabia Saudí, además de un grandísimo importador de armas estadounidenses, ha sido
históricamente, gracias a los petrodólares, uno de los principales compradores de deuda pública
de la superpotencia, contribuyendo de este modo a apuntalar la fortaleza del billete verde. EE.UU,
además, no tiene intención de poner en peligro la más que probable participación de sus
empresas en el plan Visión 2030 con el que MBS quiere diversificar la economía de su país,
reduciendo su actual dependencia del crudo. Dicho lo cual, aunque una victoria de Joe Biden
en las próximas elecciones presidenciales no afectaría a los cimientos de una relación muy
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estrecha que se remonta prácticamente al final de la Segunda Guerra Mundial, MBS se sentiría
mucho más cómodo si Donald Trump siguiera ocupando el Despacho Oval durante los próximos
cuatro años.
LÍBANO / ISRAEL / ESTADOS UNIDOS
│Conversaciones para delimitar la frontera marítima común
Israel y Líbano, dos países que oficialmente no están en paz, iniciaron el pasado día 14 de octubre
conversaciones para intentar llegar a un acuerdo de delimitación de la frontera marítima común.
Las conversaciones tienen una vertiente económica muy importante, ya que se sabe que en el
subsuelo de las aguas en disputa hay importantes yacimientos de petróleo y de gas que, para el
caso concreto del Líbano, un país muy mal dotado en recursos naturales y cuyas finanzas están
exangües, supondrían un verdadero balón de oxígeno. Pero si la vertiente económica de las
conversaciones es relevante, la política no lo es menos. En primer lugar, porque están teniendo
lugar en un contexto de creciente normalización de las relaciones diplomáticas entre Israel y
varios estados árabes del Golfo Pérsico, como los EAU y Bahréin, con el tácito consentimiento de
Arabia Saudí. En segundo término, porque las conversaciones se están manteniendo en la región
libanesa meridional de Naqoura, próxima a la frontera y bastión de Hezbollah, el partido-milicia
chiíta. Aunque éste último, enemigo jurado de Israel, haya asegurado que las conversaciones no
implican una normalización ni, mucho menos, una reconciliación con el Estado hebreo, el hecho
de haber dado su aval a que se celebren en su feudo constituye un aspecto positivo. Hay que
señalar que desde la fatídica explosión del pasado 4 de agosto que destruyó el puerto y barrios
enteros de Beirut, Hezbollah está siendo uno de los grupos políticos libaneses más criticados, tanto
a nivel interno como a nivel internacional, por su actitud obstruccionista de cualquier atisbo de
reforma que pretenda sacar al Líbano del marasmo, político y económico, en el que actualmente
se encuentra. Hay que señalar, por último, que la Casa Blanca, deseosa de apuntarse triunfos
diplomáticos en Oriente Medio con vistas a las elecciones presidenciales del próximo 3 de
noviembre, está auspiciando las conversaciones entre los dos teóricos enemigos, a las cuales ya
ha calificado de “históricas”. Pese a ello, debido a la gran cantidad de intereses en juego, no se
puede excluir la posibilidad de que no acaben llegando a buen puerto.
ÁFRICA SUBSAHARIANA
GUINEA CONAKRY
│Elecciones
El domingo 18 de octubre el país africano celebró, en un contexto enrarecido, unas nuevas
elecciones presidenciales. El origen de la tensión es la participación en los comicios del presidente,
Alpha Condé, de 82 años, en el poder desde 2010. Al igual que ha ocurrido en un buen número
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de países africanos, el mandatario ha moldeado la legislación a su medida para poder
enquistarse en el poder. En concreto, las autoridades aprobaron, mediante referéndum, una
reforma constitucional a principios de año que, en la práctica, supuso poner “el contador a cero”
el número de mandatos de Condé. Esta maniobra, que se ha convertido en un ejercicio
recurrente en los países africanos con graves deficiencias democráticas, ha agravado el clima
de crispación. En el último año cerca de 90 personas, según la oposición, han fallecido en las
protestas contra la deriva autoritaria del presidente. En este escenario no sorprende que la
campaña electoral haya estado marcada por los incidentes, como el bloqueo a la caravana
electoral del principal líder de la oposición, Cellou Dalein Diallo, en la región de Kankan, y el
incendio de la sede de su partido, la Unión de Fuerzas Democráticas de Guinea. La tensión social
se agrava con la fuerte división étnica del país. La comunidad peul, seguidores en su mayoría de
los partidos de la oposición, acusan al gobierno de aplicar una política económica que prioriza
las necesidades de la etnia malinké. Se prevé que los resultados de los comicios se publiquen
dentro de 48-72 horas. En un escenario central se espera una nueva victoria del presidente.
Además de la enorme ventaja que le otorga el control de las instituciones, el gobierno adoptó en
los días previos a los comicios algunas medidas que reforzaron aún más sus opciones, como el
cierre de la frontera con Senegal para impedir el voto de la diáspora guineana o las restricciones
de internet y las redes sociales para limitar la capacidad de actuación de las voces críticas.
SUDÁFRICA
│Plan de recuperación
El presidente, Cyril Ramaphosa, anunció la semana pasada los principales puntos del esperado
“Plan de recuperación y reconstrucción económica”. El eje central del programa será la
ejecución de un ambicioso plan de inversión pública durante los próximos tres años que incluirá
actuaciones para mejorar la educación, la sanidad, las infraestructuras de transporte y el sistema
energético, entre otros. El programa tendrá una dotación de 100.000 mill. de rands (equivalente
a 6.000 mill.$). La ejecución de los proyectos podría, según los cálculos de las autoridades, crear
alrededor de 800.000 empleos, algo prioritario en un país donde la tasa de desempleo se sitúa
cerca del 23%. Asimismo, el gobierno asegura que las actuaciones tendrán un impacto positivo
en el crecimiento a largo plazo, ya que mitigarán algunas de las barreras que han lastrado
tradicionalmente el desarrollo del país, como el pésimo funcionamiento del sistema eléctrico.
TANZANIA
│Retomando la actividad
El sector aurífero parece haber superado, al fin, el estado de hibernación. Durante años la
explotación de oro en Tanzania ha estado paralizada como consecuencia de la disputa entre el
Estado y la principal compañía que operaba en el país, Acacia Mining. En concreto, en 2017 las
autoridades tanzanas acusaron a la empresa de subestimar las exportaciones de oro para evadir
el pago de impuestos. En respuesta, el gobierno prohibió las ventas al exterior de oro, lo que
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provocó, en la práctica, el cese de la actividad. La adquisición en 2019 de los activos mineros de
Acacia Mining por parte de la compañía de origen canadiense, Barrick Gold, ha sido
determinante para desbloquear la situación. La nueva propietaria de los derechos de explotación
acordó con las autoridades la creación de una joint venture con el estado soberano, a partes
iguales, donde canalizar los ingresos procedentes de la explotación de oro. Esta alianza ha puesto
fin a la disputa y, la semana pasada, la sociedad conjunta abonó 250 mill.$ en dividendos a sus
accionistas, unos fondos que supone un importante aumento de los ingresos fiscales del país.
OCDE
ESTADOS UNIDOS / UNIÓN EUROPEA
│Fallo a favor de Europa
La OMC ha autorizado a la Unión Europea a imponer aranceles a Estados Unidos por valor de
4.000 mill.$ en el litigio que mantienen por las subvenciones a las empresas aeronáuticas, Boeing
y Airbus. Se trata de un capítulo más de un contencioso que dura ya más de 15 años y por el que,
el año pasado, la OMC permitió a Estados Unidos imponer aranceles a las importaciones europeas
equivalentes a 7.500 mill.$. Entonces, Washington elevó los aranceles a más de 100 productos
europeos como los tractores, aviones, productos agroalimentarios o el whisky escocés. Sin
embargo, ahora, el comisario europeo de comercio, Valdis Dombrovskis, ha anunciado que
esperarán a las elecciones estadounidenses celebradas el próximo 3 de noviembre para actuar.
Dombbrovskis ha aclarado que Bruselas prefiere hacer borrón y cuenta nueva, abrir una mesa de
negociación y acordar un marco común de ayudas estatales en el sector. Sin embargo, la actual
Administración estadounidense se decanta por la compensación de los daños ocasionados en el
pasado y la confrontación a futuro. De ganar en los comicios estadounidenses el candidato
demócrata, Joe Biden, posiblemente esté más dispuesto a sentarse en la mesa de negociación
que su antecesor.
UNIÓN EUROPEA
│Francia mueve ficha
Francia ha reintroducido el impuesto digital del 3% a las grandes empresas ante la falta de
acuerdo tributario global en las negociaciones que se estaban produciendo en el seno de la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Recordemos que París
aprobó esta normativa en julio de 2019 pero suspendió su aplicación tan solo unos meses después
ante la amenaza de presidente Trump de elevar los aranceles a las importaciones francesas.
Francia accedió, entonces, a esperar a la resolución del grupo de trabajo que se había formado
OCDE y que se comprometió a crear un marco normativo común antes de final de año. Sin
embargo, la falta de consenso entre los más de 135 países que componen el grupo ha provocado
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que las negociaciones se hayan extendido hasta 2021. Como consecuencia, París ha decidido
no posponer nuevamente la aplicación de la polémica tasa. Cabe señalar que la actual
Administración estadounidense representa el principal obstáculo para que se logre un acuerdo
impositivo común. La firme oposición del presidente Trump contrasta, sin embargo, con la
propuesta del candidato demócrata Joe Biden que pretende elevar el impuesto de sociedades
a las grandes corporaciones entre las que, obviamente, se encuentran los gigantes tecnológicos.
Por lo que, quizás, un cambio en la jefatura de la Casa Blanca podría traducirse en un consenso
para gravar la riqueza que las corporaciones tecnológicas generan en cada uno de los estados
en donde prestan servicios, riqueza que actualmente no tributa en la mucho de ellos.