La continuidad en el lenguaje audiovisual se refiere al mantenimiento coherente de los elementos en el encuadre a lo largo de una secuencia de planos para preservar la unidad del relato. Esto incluye mantener la dirección de los movimientos y la posición relativa de las figuras en la pantalla al cambiar de ángulo. La "línea imaginaria" une las miradas o direcciones de movimiento para no cruzarla al cambiar de campo y conservar la coherencia espacial. Existen técnicas para romper esta línea de