Eliminar la estigmatización a priori que realizan los policías hacia las tribus urbanas y organizaciones juveniles. Dar espacios alternativos donde la juventud pueda interactuar con la policía, expresar sus quejas sobre el trato diario recibido en la calle y mejorar la comprensión entre ambos grupos. Las sociedades tienden a imponer normas rígidas sobre los jóvenes, lo que los lleva a rebelarse y conformar tribus urbanas con sus propias reglas, dividiendo aún más las ciudades.