Depo-Provera es una inyección anticonceptiva trimestral que previene el embarazo al inhibir la ovulación. Es altamente efectiva pero tiene efectos secundarios como sangrado irregular y aumento de peso. En el pasado fue probada sin consentimiento en mujeres pobres y de color, lo que generó controversia sobre su seguridad. Actualmente es una opción anticonceptiva aprobada por la FDA siempre que no se tengan ciertas condiciones médicas.