Unos dientes y encías sanas son esenciales para la buena salud general de los niños. Cuando los dientes no se cuidan adecuadamente, pueden ocasionar serios problemas como caries, gingivitis y sangrado, e inflamación de las encías. Es importante cepillarse los dientes por lo menos dos veces al día, usar hilo dental diariamente, asistir regularmente al dentista, examinar periódicamente la boca, y establecer buenos hábitos alimenticios para prevenir enfermedades dentales.