Este documento discute tres modelos de organización escolar (agregativo, burocrático y sistémico), tres modelos profesionales (liberal, burocrático y democrático), y tres enfoques para intervenir en la educación (mano invisible, mano de hierro, mano intangible). Argumenta que una organización sistémica y un enfoque democrático y de compromiso cultural son los más efectivos para responder a los cambios sociales.