El documento discute el concepto de domicilio desde dos perspectivas teóricas. La teoría clásica ve el domicilio como una noción abstracta que supone una relación jurídica entre una persona y un lugar, mientras que la teoría concreta lo considera como un lugar específico donde la ley supone que una persona siempre está presente para efectos legales. También define el domicilio como el asiento legal donde una persona desarrolla sus actividades económicas, familiares y jurídicas, ejerciendo sus derechos y obligaciones.