El problema de deterioro de los soportes documentales y la desedificación del papel
1. El problema de deterioro
de los soportes
documentales y la
desedificación del papel
Gabasa Marco, Ana
2º Biblioteconomía
2.
3. Conservación
Índice
Introducción.......................................................................................................................1
Introducción al tema..........................................................................................................1
Desarrollo del tema............................................................................................................1
La composición química del papel................................................................................2
La degradación química del papel.................................................................................3
Algunos proyectos llevados a cabo para la desedificación del papel............................5
DEZ...........................................................................................................................5
FMC...........................................................................................................................6
WEI T´O....................................................................................................................6
Otras iniciativas.........................................................................................................7
Conclusión.........................................................................................................................8
Bibliografía......................................................................................................................10
4.
5. Conservación
Introducción
El trabajo que se va a desarrollar a continuación trata como tema principal el
deterioro del papel como soporte documental y el proceso de desedificación del mismo.
Para llevar a cabo el trabajo, se ha recogido información de varias fuentes:
• El libro de cabecera de la asignatura de conservación: SÁNCHEZ
HERNANPÉREZ, Arsenio. Políticas de Conservación en bibliotecas.
• El vídeo recomendado por la profesora y traducido al español “Slow Fires”
• Artículo “Mass desadicification an update of posibilitis and limitations”.
Sacado de la base de datos del ecpa y cuya URL es: http://www.knaw.nl/ecpa
Introducción al tema
Todos los materiales sufren con el tiempo una serie de transformaciones que
alteran sus características primitivas. Los cambios se traducen en una pérdida de
resistencia, en alteraciones en el aspecto externo, una mayor dificultad en el manejo y
modificaciones en la estructura química original. Las alteraciones representan un riesgo
para la integridad física del soporte y de la información que contiene, limitan su uso y,
finalmente, provocan su destrucción. A este envejecimiento se le denomina deterioro.
No todas las alteraciones son visibles en el momento de producirse. La percepción de la
alteración suele realizarse a partir de la aparición de los primeros síntomas claros de
descomposición. Remediar los daños, sin actuar previamente sobre las causas que los
provoca, equivale a tener que reparar el mismo objeto al cabo de un tiempo.
Desarrollo del tema
Tradicionalmente, se han distinguido dos categorías fundamentales de causas de
alteración. Las primeras o endógenas, tienen que ver con las materias empleadas en la
confección del documento, su forma física y las técnicas seguidas para su fabricación y
acabado. Frente a ellas poco se puede hacer, pues no es posible cambiar la composición
química de una tinta metaloácida ni sustituir la pulpa mecánica por una celulosa pura.
Las segundas o exógenas, son causadas por el ambiente que rodea al objeto y la forma
en la que es manipulado; constituyen la verdadera energía de activación de las causas
endógenas. Sin embargo, se puede modificar y controlar las variables para reproducir
su impacto adecuando el sistema ambiental a los niveles óptimos para la conservación o
mediante la aplicación de tratamientos de desedificación en masa se evitará la ruina por
acidez de las colecciones.
Los procesos de degradación se manifiestan por diversos tipos de efectos pero,
básicamente, pueden agruparse en dos categorías principales:
• Los efectos químicos: Los efecto químicos están relacionados con las
transformaciones moleculares que se producen, a corto o largo plazo, en los
1
6. Conservación
soportes y en la grafía. Diferentes causas tienen efectos químicos en los objetos,
como el uso de materiales inestables y técnicas perniciosas en la elaboración del
soporte, (como las pastas de madera, las tintas metaloácidas, los procesos
oxidantes de blanqueo…, etc.), las reacciones químicas a escala molecular
provocadas por el medio ambiente; por la adición bienintencionada de sustancias
extrañas y por la acción enzimática de los microorganismos. En estado
incipiente, sólo se mostrarán pro medio de métodos indirectos de observación
(microscopía, valoración, medición de determinados parámetros…, etc) pero, al
generalizarse, se revelarán en forma de alteraciones de la grafía, cambios de
color en el soporte y debilitamiento. Todo proceso de alteración conlleva una
pérdida de los valores estéticos y funcionales originales de la obra.
• Los efectos físicos: Los efectos físicos son los más visibles, pues son la
revelación externa de que algo extraño está sucediendo en el soporte. Los
materiales bibliográficos son extraordinariamente frágiles y las manipulaciones
incorrectas o precipitadas tienen como consecuencia inmediata la aparición de
desgarros, grietas, deformaciones y manchas.
La desaparición de la cultura escrita desde mediados del siglo XIX a la segunda
mitad del XX, es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las bibliotecas
actuales. Tras la fuerte crisis en la disponibilidad de materias primas a finales de XVIII,
se experimentaron diferentes materias fibrosas para la elaboración barata del papel,
triunfando las obtenidas a partir de la celulosa de madera. Este fenómeno coincide con
la expansión de las bibliotecas en Occidente y se traduce, en que la mayor parte de los
fondos bibliográficos está realizada en un papel de ínfima calidad, creando un problema
de dimensiones inabarcables. La característica fundamental de los papeles realizados
con pasta de madera es su estructura química. Su permanencia es notablemente inferior
a la de los papeles realizados a base de trapos y, por ello, la autodestrucción por el ácido
es la causa de alteración más habitual en los fondos documentales contemporáneos.
La composición química del papel
Para comprender mejor la degradación química del papel es necesario conocer
algo de su estructura química. La celulosa es u polímero formado por un radical
glucósico [C6H10O5]. En la celulosa, los radicales se agrupan formando largas
cadenas que varían en longitud. Las moléculas de celulosa se componen de átomos de
carbono, hidrógeno y oxígeno, además de una serie de grupos hidroxilos que tienen la
capacidad de formar enlaces químicos con los de las cadenas vecinas por puentes de
hidrógeno. Gracias a estos vínculos polímeros, se reúnen formando haces, para dar
lugar a unos filamentos muy pequeños llamados microfibrillas.
Las moléculas de celulosa, se organizan dentro de las microfibrillas de forma
muy diferente. Existen zonas donde se encuentran dispuestas de forma paralela y a
distancias fijas; estas zonas reciben el nombre de cristalinas y se caracterizan por
presentar una estructura muy densa, por ser muy resistentes y presentar, por tanto, una
buena estabilidad. En otras zonas, llamadas amorfas, las microfibrillas se organizan de
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7. Conservación
forma dispersa y desordenada, siendo más accesibles a la intromisión de los agentes
químicos y a la degradación.
De la misma forma que el algodón y el lino empleado en la fabricación de los
primeros papeles presenta un alto contenido en celulosa, los papeles de madera
contienen lignina y hemicelulosa, cuyo comportamiento es más inestable. La lignina es
el ingrediente indeseable de la madera que ocasiona la mayoría de los problemas en
libros y documentos, pues de no ser por su presencia, no sería necesario aplicar
reactivos fuertes para fabricar papel. Los papeles con alto contenido en lignina se
caracterizan por ser muy sensibles a la luz y a la absorción de gases contaminantes.
La degradación química del papel
Los factores químicos de alteración son los más importantes a considerar desde
el punto de la conservación, ya que suponen la transformación parcial o total del
documento. Los materiales pierden sus características originales y dan lugar a un objeto
diferente. La alteración químicas es el resultado de la interacción de los factores
endógenos y exógenos, principalmente, los materiales y técnicas seguidos en la
elaboración del objeto y el medio ambiente en el que éste se conserva.
Los papeles antiguos están realizados con trapos de lino y algodón, cuyo
componente principal es la celulosa, un polímero muy resistente al envejecimiento
natural. Sin embargo, con la introducción de la pasta de madera y de los nuevos
procesos de encolado y blanqueo, la estabilidad de los productos se reduce de manera
drástica. La aparición del refino holandés a principios del siglo XVIII, supuso la
reducción del tiempo necesario para la disgregación y un trabajo más efectivo. Sin
embargo, al hacer pasar la pasta por las cuchillas de hierro, se machacaban las fibras y
se depositaban en el papel iones metálicos que catalizan reacciones químicas
indeseables. La presencia de residuos químicos, la necesidad de la cocción ácida o
alcalina y del blanqueo con cloro de la pasta provocan una degradación térmica y una
oxidación que a largo plazo tiene consecuencias nefastas.
El medio ambiente en el que se conserva un papel es esencial para su estabilidad
a largo plazo. Las variabilidades ambientales más importantes son la humedad, el calor,
los contaminantes atmosféricos y la luz. Todos ellos tienen consecuencias negativas
para la estabilidad química de los documentos. La presencia de humedad hace posible
el desarrollo de plagas de microorganismos e insectos, la aceleración de reacciones
químicas de hidrólisis y el desvanecimiento de un gran número de tintas. El calor
facilita el trabajo a la humedad, pues dependiendo de su intensidad, acelera los
diferentes procesos de alteración química, además de ser necesario para el desarrollo de
plagas de microorganismos.
Los contaminantes atmosféricos afectan de manera catastrófica a los materiales
documentales. Algunos de ellos, como el ozono o el polvo, se encuentran de forma
natural en la atmósfera. Con la aparición del motor de explosión y los combustibles
fósiles, diariamente se están generando toneladas de sustancias altamente reactivas.
Éstas son absorbidas por los materiales documentales y provocan reacciones de
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8. Conservación
oxidación y de acidez que desvanecen los pigmentos de las tientas manuscritas y acaban
destruyendo los soportes y las encuadernaciones.
Finalmente, la luz es uno de los elementos más perniciosos y es preciso señalar
también, que provoca un efecto acumulativo. La exposición incontrolada a fuentes de
iluminación poco adecuadas destruye la celulosa y los pigmentos de las tintas. La
excitación provocada por la luz en los materiales entraña la ruptura de los enlaces
químicos y genera nuevas sustancias que se vuelven a combinar con moléculas vecinas
en una reacción en cadena. Las reacciones fotoquímicas provocan, finalmente, la
decoloración y degradación del papel y el desvanecimiento de un gran número de
pigmentos.
Los cambios irreversibles en la estructura material son comunes en todos los
efectos químicos, y no es erróneo afirmar que los procesos de envejecimiento del papel
son resultado de reacciones químicas continuas. El problema de la acidez, ha ocultado
otros como la hidrólisis ácida y la oxidación.
En presencia de agua y de un ácido, la celulosa se descompone pro hidrólisis.
Los ácidos actúan de forma catalítica sobre la celulosa, es decir, provocan la separación
de las uniones entre las moléculas de glucosa que forman una larga cadena. El proceso
es especialmente importante en las zonas amorfas. La hidrólisis ácida consiste, por
tanto, en la rotura de la cadena de celulosa en dos cadenas más cortas pro la acción de
un ácido. La molécula de celulosa es una cadena de monómeros de glucosa unidos por
un átomo de oxígeno. Este átomo que tiene una carga eléctrica negativa, tenderá a
atraer iones libres de hidrógeno cargados positivamente. Cuando esta atracción se
produce, el oxígeno se separa de uno de los átomos de carbono a los que estaba unido
para retener el protón de hidrógeno, rompiendo así el enlace entre las unidades de
glucosa. De esta forma, se crean dos cadenas: una neutra, que es la que ha recibido el
ion de hidrógeno, y otra inestable por haber perdido uno de sus electrones. A
continuación, esta parte inestable intentará estabilizarse robando un electrón a una de las
moléculas de agua próximas, de forma que quedará libro otro ion de hidrógeno, con
carga positiva, iniciándose, de esta forma, una reacción en cadena.
Las reacciones de acidificación aparecen como consecuencia de la absorción de los
ácidos procedentes de la atmósfera. Sin embargo, la principal causa de de acidez la
constituyen los encolados en masa realizados durante el proceso de fabricación o por los
procesos de blanqueo de la materia prima. Los encolados con sulfato de aluminio en
combinación con la humedad de la atmósfera o del propio papel forman ácido sulfúrico,
y el lejiado con trapos puede provocar la presencia de ácido clorhídrico, dos de los
ácidos más corrosivos conocidos. Además la existencia de radicales ácidos, presentes
en las labores de maceración química de la pasta papelera, puede desestabilizar el papel.
La propia descomposición de la celulosa puede formar grupos ácidos como los
poligucurónicos.
Las moléculas de celulosa son igualmente sensibles a la acción de las sustancias
oxidantes, como el oxígeno de aire, el ozono o los productos clorados. La oxidación es
una reacción química particular que provoca la pérdida de uno o más electrones de un
átomo o grupo de átomos. Cuando esta reacción se produce en la celulosa, modifica su
estructura original y produce una degradación que redunda en la resistencia del material.
Los procesos de oxidación conllevan la introducción de carbonilos y de grupos
carboxílicos en varias posiciones en las unidades de anhidro-D-glucosa de la celulosa,
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9. Conservación
de forma que, a diferencia de la hidrólisis que ataca los enlaces de las moléculas, la
oxidación repercute en la molécula misma.
La degradación enzimática está ligada a los fenómenos microbiológicos de
alteración, es decir, al ataque de hongos y bacterias. Numerosos organismos
celulófagos son capaces de transformar la celulosa en glucosa gracias a un complejo
enzimático en el que coexisten tres tipos de enzimas: Ca-celulasa, que ataca a la
celulosa nativa, produciendo una rotura de enlaces y contribuyendo a un crecimiento
den la capacidad de absorción de agua del documento dañado; la Cy-celulasa, que actúa
por hidrólisis, atacando la celulosa amorfa y sus derivados, y la B-glucosidasa, que
actúa sobre la celobiosa, elemento estructural básico. Los daños que pueden realizar
sobre los documentos varían entre 55 y 91% del total de la celulosa, lo que,
evidentemente, puede llevar a la destrucción total del documento.
Algunos proyectos llevados a cabo para la desedificación del
papel
DEZ
La base del método DEZ fue establecida por G.B. Nelly y J.C. Williams en los
años 80 y surgió a partir de la afirmación de la Biblioteca del Congreso de que ninguna
de las técnicas existentes de desedificación del papel se podrían llevar a cabo en una
escala de 500.000-1.000.000 de libros por año. La Biblioteca del Congreso tomó la
iniciativa para desarrollar un nuevo y adecuado sistema basado en un agente gaseoso
como la mejor opción. La desedificación gaseosa tiene la ventaja de que, generalmente,
los documentos se pueden tratar sin el riesgo de daño a las tintas y pegamentos. Entre
1981 y 1986, el sistema fue probado en una planta experimental en el centro de vuelo
espacial de la NASA Goddard. Como consecuencia a un accidente ocurrido en una
prueba del comportamiento del tratamiento relacionada con la reactividad química del
zinc líquido, la NASA se retira de la investigación adicional y la planta fue desmontada
en 1986. La industria del proceso químico ofreció un ajuste mejor para combatir estos
problemas, y en Tejas fue concedido un contrato por la Biblioteca del Congreso para
construir una nueva planta experimental del DEZ en Houston. En 1990, la Library of
Congreso aceptó las ofertas para la desedificación total de sus documentos y
colecciones que estaban en estado de peligro. Tres sistemas fueron los que participaron:
el DEZ, el FMC y el WEI T´O. Con cada uno realizaron una prueba en casi 500 libros
que fueron evaluados por el instituto para la ciencia del papel. Aunque ninguno de los
proyectos cubría totalmente las expectativas de la Library of Congress, el DEZ era el
que ofrecía un mayor ajuste, indicando que el tratamiento alcanza una neutralización
completa y bastante homogénea de los componentes ácidos del papel,
independientemente del tipo de papel, de la concentración del ácido y del material de la
encuadernación. También se demostró que el envejecimiento acelerado disminuye en
los diferentes tipos de papeles con la aplicación del DEZ. Finalmente, podemos decir
también de este tratamiento que con un valor final de pH de entre un 7 y un 7,8 en el
extracto de agua fría del papel tratado es uno de los procesos más suaves de la
desedificación. Desde 1992, la Biblioteca del Congreso y otras bibliotecas, han
contribuido al proceso de la optimización adicional del proyecto DEZ realizándolo y
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10. Conservación
llevando a cabo una evaluación. En 1994 se canceló las investigaciones adicionales al
DEZ debido a la carencia de perspectivas comerciales.
FMC
El proceso FMC fue desarrollado por el Lithium Corporation de América en
Carolina del Norte. Esta firma, se ha especializado en el desarrollo y la producción de
los compuestos para diversos usos. Desde 1988 el FMC está implicado en la
investigación sobre la conservación total del papel. En base a la investigación el
proceso ha desarrollado un método por el cual los libros son tratados con alkoxide
carbónico del magnesio solubilizado en freon-113. Estos compuestos también se
utilizan en el proceso WEI T´O, descrito más adelante. En los últimos años, varios
cambios se han realizado en la solución del tratamiento. Debido a estas modificaciones,
el proceso FMC entra en una etapa renovada (1993). El instituto de la ciencia y de la
tecnología del papel de Atlanta ha investigado el efecto del tratamiento en papel de
diversas características. Los resultados obtenidos indicaron un efecto positivo del
tratamiento de desadificación; dando unos valores de pH entre el 8.3-9.1 y una reserva
alcalina del 0.7%-2.9%. Los libros tratados presentaron cambios significativos, tales
como olor, residuos pegajosos en las cubiertas y espina dorsal y decoloraciones. Las
pruebas de la fuerza del papel y de envejecimiento acelerado indicaron que, a excepción
del papel alcalino-clasificado, el tratamiento del FMC reduce el índice de la pérdida de
fuerza mecánica del papel. Otros efectos secundarios indeseables, tales como
decoloraciones locales, también se observaron. En base a estos resultados se llegó a la
conclusión de que el proceso FMC no resolvió los requisitos que las instituciones suizas
habían establecido para un sistema conveniente de desadificación total.
Debido a que los riesgos de seguridad y salud del proceso no eran demasiado grandes,
no era necesario que el personal estuviese altamente cualificado se dio el visto bueno a
dar el alta de la instalación en una biblioteca o archivo. Debido a la aprobación de una
instalación de laboratorio por R.S. Wedinger en 1989, permitiendo el tratamiento de 20
libros a la vez, los planes para una planta experimental con capacidad para 100.000
libros y una planta comercial con capacidad para 1-3 millones de libros al año, se
pusieron en marcha en 1990. La planta se localiza en Carolina del Norte y en 1996,
toda vía funcionaba.
WEI T´O
Este proceso fue fundado en 1972 por R.D. Smith y surgió con el fin de
desarrollar soluciones a los metaóxidos del carbono. Este sistema de desadificación
total surgió como resultado de la investigación de Smiths en la Universidad de Chicago
sobre la desadificación del papel en un tratamiento no acuoso. Inicialmente se dio con
una solución que consistía en impregnar libros completos de metaóxido de magnesio en
metanol y freón-12. Para la desadificación de hojas separadas, esta solución fue suplida
por metaóxido de bario, freón-11 y se utilizaba como aerosol. Una mejora importante
en el sistema de WEI T´O fue el reemplazo del agente eficaz de la desadificación; este
reemplazo dio lugar a la reducción de varios efectos secundarios indeseables tales como
un depósito blanco en la superficie del papel y el deterioro de documentos debido al
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11. Conservación
aerosol. El reactivo mejorado de WEI T´O se utiliza en la desadificación total de varias
bibliotecas y colecciones de archivo. Mientras que el uso del metanol puede causar
ciertos daños a las tintas y pegamentos, los esfuerzos han sido varios y sustanciales por
parte de WEI T´O Associates, Inc. (Matteson), para reducir al máximo el contenido de
metanol en el proceso de desadificación del papel y encontrarle un sustituto adecuado.
Además también se debía encontrar una alternativa a los compuestos de freón, que
causan deterioro de la capa de ozono. Las regulaciones ambientales en Canadá
prohibieron el uso de estos compuestos a principios de 1996.
Para permitir que los archivos nacionales llevasen a cabo las nuevas regulaciones, el
consejo de investigación nacional de Canadá, emprendió un proyecto de investigación
para conseguir una alternativa clara. Esto dio lugar a la introducción de una nueva
fórmula en la cual, los cloro-fluoro-carbonos originales fueron sustituidos por los hidro-
cloro-fluoros más comprometidos con el medio ambiente. Tras numerosas
investigaciones, los efectos del WEI T´O fueron investigados en una prueba con 500
libros; la prueba fue llevada a cabo por el Instituto para la Ciencia y el Papel de Atlanta
como respuesta a una petición de la Biblioteca del Congreso. Se observaron cambios
significativos en los libros tratados, tales como el olor, los residuos blancos,
decoloraciones y sangrías adhesivas. A esta prueba se le realizó un estudio comparativo
del que se obtuvieron los siguientes datos: neutralización de la penetración ácida
(desadificación del papel), distribución moderada y homogénea de la reserva alcalina,
producto químico mejorado y, en un grado inferior, estabilidad mecánica en el proceso
de envejecimiento acelerado.
Otras iniciativas
Proceso Bückeburg
El proceso Bückeburg se ha desarrollado en Alemania para la desadificación en
masa y la consolidación combinada de los materiales de archivo en hojas sueltas de
papel. El proceso implica una secuencia de tres pasos:
• Fijación de las tintas y de los tintes
• Desadificación acuosa por medio de una solución de bicarbonato de magnesio
• Consolidación del apresto metílico de la celulosa.
Proceso de la Injertocopolimeración
Esta técnica se utiliza con el fin de consolidar la celulosa por medio de la
polimeración de los monomeros que se introducen en las fibras de papel. La biblioteca
británica ha llevado a cabo una investigación para adaptar este proceso al tratamiento de
libros completos. El procedimiento del tratamiento consta de 7 pasos:
• Se colocan unos 5-10 libros a tratar en un envase especial
• El envase se limpia con un chorro de agua con el gas del nitrógeno para quitar el
oxígeno, que puede inhibir la reacción de la polimeración
• Se introducen los monomeros solubilizados, la cantidad depende del peso de los
libros
7
12. Conservación
• Los libros se tratan con la solución del monómero durante varias horas para
alcanzar una impregnación uniforme
• El envase con los libros se expone durante 13-16 horas a una fuente radiactiva,
haciendo que los monomeros se polimericen y se liguen a las moléculas de
celulosa
• El exceso de monomeros se reduce por evaporación
• Los libros se quitan del envase y se reacondicionan en el depósito que debe estar
bien ventilado.
El proceso de Viena
Este proceso fue desarrollado en los años 80 por O. Wätcher del
Nationalbibliothek austriaco. El proceso se lleva a cabo para la consolidación y
desadificación combinadas de los periódicos encuadernados. El procedimiento del
tratamiento consiste en los siguientes pasos:
• Los volúmenes del periódico se disponen en bloques de 4cm y se colocan en un
compartimiento cilíndrico del vacío,
• Bajo éste, se drena con una solución acuosa que contiene acetato de polivinilo
como consolidación de agentes y carbonato de hidróxido de calcio o de
magnesio como agente de desadificación,
• Los bloques de 4cm ya mojados se congelan rápidamente a una temperatura de
-40º C y se liofilizan posteriormente,
• Después se reacondicionan a la temperatura, humedad y presión normal.
Conclusión
La sombra del mundo se encuentra escrita en las páginas de un libro. Es vital
la información porque si no existiera, nadie podría llegar a fijar sus conocimientos en un
papel. Una completa biblioteca no sólo tiene libros sino que también cuenta con cartas,
documentos sueltos y diarios. Los registros del pasado no sólo incumben a los
historiadores sino que forman parte de cada uno de nosotros; la biblioteca es, por tanto,
el laboratorio de nuestra mente. El tiempo destruye por igual los documentos, pero no
es sólo el tiempo sino que también las catástrofes naturales como inundaciones,
fuegos…,etc. Colecciones enteras se han visto reducidas a pequeñas partículas de papel,
para evitar todo esto debemos tomar una serie de medidas. El papel y su permanencia
dependen de la materia prima y la forma de hacerlo inicialmente.
En todo el mundo las bibliotecas se enfrentan al mismo problema, falta de dinero
y de tiempo mientras un montón de documentos se están desintegrando. Ante esto, se
debe decidir que va a ser tratado y que no; es difícil tomar una decisión de estas
características. El principal problema es que no sabemos que tenemos que desechar y
que no.
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13. Conservación
“Un libro es único porque se puede sujetar con una mano, entre tus manos, porque un
personaje extraño, se convierte en un amigo”.
9
14. Conservación
Bibliografía
SÁNCHEZ HERNANPÉREZ, Arsenio. Políticas de Conservación en
Bibliotecas, 1999.
PORCK, H.J. Mass deacidification an update of posibilitéis and limitations,
1996. En www.knaw.nl/ecpa
Vídeo del Semeta: Slow Fires
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