La embolia pulmonar se define como una oclusión parcial o completa de la arteria pulmonar o sus ramas. Ocurren alrededor de 300,000 muertes al año por embolia pulmonar en Estados Unidos. El diagnóstico se basa en la sospecha clínica, datos analíticos y estudios de imagen como la angio-TC de tórax o la ecocardiografía. El tratamiento incluye la anticoagulación y en algunos casos la terapia trombolítica o procedimientos invasivos.