El documento habla sobre cómo enseñar a ver la televisión de manera responsable. Explica que la televisión no es ni buena ni mala, sino que depende del uso que se le dé. Ofrece una lista de recomendaciones como seleccionar programación de manera compartida, hacer comentarios críticos, limitar el tiempo de exposición, y usarla como excusa para el diálogo en familia.