Las tres etapas clave de la planificación de la evaluación son: 1) identificar los objetivos del programa de estudio a evaluar para tener claro el aprendizaje deseado, 2) identificar la finalidad para la cual se evaluará, ya sea para identificar fortalezas o dificultades, y 3) definir los criterios con los que se juzgarán los resultados del programa.