Este documento describe la virtud de la prudencia y cómo desarrollarla. Explica que la prudencia implica razonar claramente para tomar decisiones adecuadas en cualquier situación. También detalla cómo formar la prudencia en diferentes etapas de la vida, desde la niñez hasta la adultez, a través de actividades como leer cuentos, enseñar normas de seguridad, y corregir comportamientos imprudentes. El documento concluye que la prudencia es importante para mejorar la convivencia con los demás.