El documento define un humedal como un ecosistema donde el suelo permanece saturado de agua y carece de oxígeno, lo que crea condiciones únicas para la vida. Explica que el agua juega un papel fundamental en estos ecosistemas, ya que determina su estructura y funciones ecológicas. También señala que los organismos que habitan en los humedales deben adaptarse a cambios hidrológicos extremos como períodos de sequía e inundación.