La resiliencia se refiere a la capacidad de una persona para responder positivamente a las adversidades de la vida cotidiana. Aunque la resiliencia forma parte de la personalidad de alguien, también se puede desarrollar a través del tiempo mediante el cultivo de actitudes positivas. Las teorías conductistas y positivistas sugieren que es posible lograr mayor resiliencia trabajando en la propia percepción de la realidad y enfrentando los desafíos de la vida.