La inoculación al estrés es una técnica desarrollada en 1974 para enseñar a las personas a prepararse y enfrentar situaciones estresantes. Consiste en cuatro pasos: aprender a relajarse, construir una jerarquía de situaciones estresantes, seleccionar pensamientos de afrontamiento, y enfrentar la situación real. La inoculación al estrés puede ser útil para reducir la ansiedad general y específica, el miedo escénico, las fobias, y la irritabilidad, preparándose para situaciones como exámenes o el