La piel consta de tres capas principales: la epidermis, la dermis y la hipodermis. La epidermis no tiene vasos sanguíneos y consiste en cinco capas de células. La dermis se encuentra debajo de la epidermis, es gruesa y vascular, y contiene dos capas. La hipodermis es la capa más profunda formada por tejido adiposo. La piel cumple funciones importantes como protección, regulación de la temperatura y sensación.