El documento describe el modelo tradicional de educación, incluyendo sus características principales. El modelo tradicional se originó durante la escolástica de la Iglesia Católica entre los siglos IX y XV y enfatiza la formación del carácter de los estudiantes a través de la disciplina. Las características incluyen que los estudiantes son receptores pasivos, se enfatiza la memorización sobre la innovación, y el conocimiento se adquiere a través de la repetición con poca participación estudiantil.