El documento discute cómo las tendencias establecidas en las redes sociales influyen en la formación de la individualidad y la constitución de pequeñas comunidades. El yo se ve a sí mismo como un objeto configurado por estas tendencias y busca afirmar su identidad a través de la interacción en espacios privados y paralelos. Asimismo, el documento analiza cómo el discurso del cuerpo y la performance en las redes sociales participan en la construcción del cuerpo político individual y la producción de sujetos.