El documento describe cómo la autora emplea dos tendencias pedagógicas, el aprendizaje vivencial y el aprendizaje flexible, en su clase de lenguaje. Ella comienza las lecciones tomando los pre-saberes y experiencias diarias de los estudiantes y construye el conocimiento a partir de ahí. Por ejemplo, al enseñar figuras retóricas, los estudiantes comparten expresiones familiares y cómo usan el lenguaje en diferentes contextos. Esto permite que el aprendizaje sea significativo para sus vidas. Ella también se adapta