El documento describe el ascenso de los regímenes totalitarios en Europa entre las dos guerras mundiales. Explica cómo las democracias occidentales tuvieron dificultades económicas después de la Primera Guerra Mundial que llevaron a crisis políticas y el surgimiento de dictaduras. Luego se enfoca en el fascismo italiano bajo Mussolini y en el nazismo alemán bajo Hitler, resaltando sus características antidemocráticas y su culto al líder autoritario.