Rodo construye una hermosa cometa y la lleva a volar con sus compañeros a una colina. Cuando las cometas están en el aire, Marcial comienza a retroceder hacia un barranco sin darse cuenta del peligro. Para salvarlo, Rodo suelta su preciada cometa y jala a Marcial antes de que caiga. Aunque triste por haber perdido su creación, lo más importante es que salvó a su amigo. El hermano pequeño de Marcial le obsequia entonces su modesta cometa a Rodo.