Las leyes de Lambert y Beer establecen que la intensidad de la luz que pasa a través de una sustancia absorbente disminuye exponencialmente a medida que aumenta la longitud del medio o la concentración de la sustancia. La combinación de ambas leyes da como resultado la Ley de Beer-Lambert, que establece que la fracción de luz absorbida es proporcional a la concentración de la sustancia y al espesor atravesado.