2. LA ROSCA DE REYES
El roscón de Reyes (denominado también rosca de Reyes en Hispanoamérica
,rosco de Reyes o pastel de Rey) es un bollo elaborado con una masa dulce con
forma de toroide adornado con rodajas de fruta cristalizada (escarchada) o
confitada de colores variados, suele rellenarse de nata montada o crema, en la
actualidad también de moca, trufa o chocolate, y se introducen en su interior
"sorpresas" que descubren los niños al comer (figuritas de virgen y San José y el
Haba, señal de que a quien le caiga debe pagar el roscón). Se sirve en España para
merendar el día 6 de enero denominado día de Reyes y es propio de su repostería.
También tiende a partirse el día 6 de enero por costumbres en México.
Por influencia posterior este bollo navideño se sirve igualmente en otros países
hispanohablantes principalmente en Argentina y en México durante las mismas
fechas, así como en Portugal. Es frecuente que se acompañe de una taza de
chocolate. Se puede servir en el desayuno o en la merienda. La masa con la que
suele estar elaborado se aromatiza con agua de azahar, que le proporciona un
aroma característico.
3. HISTORIA
El origen del roscón parece estar relacionado con las saturnales romanas,
aunque en la actualidad algunos lo relacionan con una representación
complementaria y comestible de la corona de adviento, aún cuando la
tradición de la corona de adviento es muy posterior en España, lo que hace
muy dudosa esa relación. Éstas eran fiestas dedicadas al dios Saturno con el
objeto de que el pueblo romano en general pudiera celebrar los días más
largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. Para estos
festejos, se elaboraban unas tortas redondas con higos, dátiles y miel, que
se repartían por igual entre los plebeyos y esclavos. Ya en el siglo III, en el
interior del dulce se introducía un haba seca, y el afortunado al que le tocaba
era nombrado rey de reyes durante un corto periodo de tiempo establecido
de antemano. Desde los romanos existían juegos del haba en la península
ibérica.
4. TRADICIÓN DE LA ROSCA DE REYES
Julio Caro Baroja recoge en su obra "El Carnaval" dos testimonios del siglo XII sobre el Roscón de
Reyes o el Rey de la Faba; el primero corresponde al Reino de Navarra, donde en 1361 se
designaba Rey del Faba al niño que encontraba el haba en el roscón (como en la actualidad); el
segundo testimonio corresponde a Ben Quzman, poeta andalusí, quien en su Cancionero
describe una tradición similar con una torta (hallón o hallullo, vocablo que permanece en
Granada) en el año nuevo que contenía una moneda. Tradiciones ambas que se han conservado
durante siglos.
En Francia toman le Gâteau des Rois, también llamado Couronne des Rois, que es idéntico al
roscón, y la Galette des Rois propia del norte del país, que se hace con masa de hojaldre y se
puede rellenar con una crema a base de almendras molidas, azúcar, algo de mantequilla y yema
de huevo.
Es muy probable que de esta tradición con diversos nombres en Navarra, Andalucia, Valencia,
Cataluña ([Tortel (dulce)|Tortell de Reis]], ..., tenga un origen común, no existiendo documentos
que atestiguen la prevalencia de alguna (salvo la referencia a Ben Quzman). En cualquier caso,
la popularidad del roscón de Reyes en el conjunto de España es relativamente reciente.
El pastel que se hace en los países latinos tiene forma de rosca, más o menos imitando una corona
real, cubierto de frutas escarchadas, que semejan las joyas de la corona, y tenía escondida en su
interior una pequeña sorpresa, a veces de gran lujo y valor.