La mediación es un mecanismo de resolución alternativa de conflictos que ayuda a resolver disputas de manera pacífica, como disputas familiares sobre divorcio, custodia de hijos, manutención y división de propiedades. La mediación familiar involucra a las partes en conflicto y a un mediador neutral para negociar un acuerdo mutuamente satisfactorio que considere los intereses de todos y facilite la comunicación continua por el bienestar de los hijos.