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El Apocalipsis y el Día de la Expiación: Parte 1
Desmond Ford
Departamento Bíblico, Colegio Misionero Australasiano
EN LOS RECIENTES años, la posición de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en
el día antitípico de la expiación ha sido fuertemente criticada por los eruditos
evangélicos. Los adventistas han enseñado durante más de un siglo que, si bien
las ofrendas de sacrificio como los corderos, el becerro, la cabra, etc. ofrecidos
en el gran Día de Expiación de Israel anunciaron la muerte de nuestro Señor en
el Calvario, los servicios en general ese día tipificaron particularmente el fase final
de la obra sacerdotal de Cristo. Sin embargo, otras denominaciones
generalmente han aplicado el tipo como prefiguración de toda la obra de Cristo
desde la cruz hasta su segunda venida. Esta última posición se toma
principalmente sobre la base de Hebreos 6:19 , 20 ; 9: 8 , 12 ; 10:19 ,20 .
Es interesante notar que también hay un tercer grupo que, mientras mantiene la
segunda posición descrita anteriormente, también cree que el Día de la Expiación
tiene una aplicación especial a los eventos que preceden inmediatamente al
regreso de Cristo. Tal concepto tiene en cuenta la disposición cronológica del año
típico judío y el hecho de que el libro de Apocalipsis en muchos lugares alude al
Día de la Expiación mediante el uso de imágenes propias de ese día solemne de
ayuno. El propósito de este artículo es demostrar que las razones para una
aplicación especial en el último día del Día de la Expiación son sólidas. Con este
fin, se citarán declaraciones significativas de las Escrituras y de eruditos no
adventistas.
Hace más de dos siglos, al comentar sobre el Apocalipsis, Sir Isaac Newton
escribió lo siguiente:
El Templo es el escenario de las visiones, y las visiones en el Templo se relacionan
con la fiesta del séptimo mes, ya que las fiestas de los JUDÍOS eran típicas de las
cosas por venir. La Pascua se relacionó con la primera venida de CRISTO, y las
fiestas del séptimo mes a su segunda venida: su primera venida, por lo tanto,
terminó antes de que se diera esta Profecía, las fiestas del séptimo mes aquí solo
se mencionan.
3. El Nuevo Testamento respalda esta idea de que el año festivo judío prefiguraba
toda la era cristiana. El genio típico de la economía del Antiguo Testamento, como
se reconoce en todas partes en el Nuevo Testamento, proporciona la base para
esta conclusión. Además, los apóstoles inspirados aplican específicamente las
fiestas judías de esta manera.
Por ejemplo, en 1 Corintios 5: 7, Pablo alude a la Pascua como el tipo de la
crucifixión de Cristo. Los escritores del Evangelio al registrar los eventos también
son cuidadosos al señalar que el clímax del ministerio de Cristo ocurrió en relación
con la Pascua. Pero en Apocalipsis 7: 9, los redimidos son representados ante el
trono "vestidos con túnicas blancas y palmas en sus manos". Esto fue prefigurado
en la Fiesta de los Tabernáculos, porque en Levítico 23:40leemos: "Y os llevaréis
el primer día de las ramas de los árboles bonitos, las ramas de las palmeras, y
las ramas de los árboles gruesos, y los sauces del arroyo; y se alegrarán ante el
Señor su Dios siete días. " En armonía con esto está la frecuente alusión de Cristo
a la cosecha en relación con el fin del mundo. La Fiesta de los Tabernáculos
también se llamaba la Fiesta de la Cosecha, que ocurría después de la finalización
de la recolección de los productos del año. Las referencias en el Nuevo
Testamento a Cristo como los primeros frutos y el registro del tiempo de la
ocurrencia de Pentecostés ayudan a completar esta imagen del significado típico
del año ceremonial judío.
Un gráfico simple ilustra el punto hecho por Sir Isaac Newton y otros eruditos
sobre este asunto.
Festivales de primavera Tipificación de eventos significativos de Primera venida
Pascua Crucifixión
Primeros frutos Resurrección
Pentecostés Pentecostés
Trompetas Rev. 8 y 9
Día de Expiación Rev. 8: 1-6 ; 11:19
Fiesta de los Tabernáculos Rev. 7: 9 ; 14: 14-19
Los festivales de primavera siempre han recibido mucha atención y se han
aplicado a la primera venida con consentimiento universal. Lamentablemente, los
festivales de otoño no han recibido el mismo énfasis de estudio. En un trabajo
estándar sobre Levítico en The Expositor's Bible , tenemos la siguiente
declaración esclarecedora del Dr. SH Kellogg cuando dirigió su atención a las
fiestas del séptimo mes:
4. Ya hemos visto que las primeras fiestas del año también fueron proféticas; que
la Pascua y los Panes sin Levadura señalaron a Cristo, nuestra Pascua, asesinada
por nosotros; Pentecostés, para la recolección espiritual de las primicias de la
cosecha del mundo, cincuenta días después de la presentación de nuestro Señor
en resurrección, como la gavilla de las primicias. Por lo tanto, podemos inferir
con seguridad que estas fiestas restantes del séptimo mes también deben ser
típicas. Pero, si es así, ¿típico de qué? Dos cosas pueden decirse con seguridad
en este asunto. La importancia de los tres festivales de este séptimo mes debe
interpretarse en armonía con lo que ya se ha cumplido; y, en segundo lugar, en
cuanto a la fiesta de las trompetas, el día de la expiación y la fiesta de los
tabernáculos, todos pertenecen al séptimo y último mes del año eclesiástico,
Manteniendo el primer punto en vista, podemos decir con seguridad que si
Pentecostés tipifica las primicias de la cosecha del mundo en la recolección de
una elección de todas las naciones, la fiesta de los tabernáculos debe tipificar la
finalización de esa cosecha en una reunión espiritual, final y universal No solo
eso, sino que, en cuanto al cumplimiento antitípico de la gavilla ondulada en la
resurrección de nuestro Señor, se nos recordó que la consumación de la nueva
creación está en la resurrección de los muertos, y que, por lo tanto, la
regeneración implica la resurrección, por lo tanto, la fiesta de los tabernáculos,
como la celebración de la finalización absoluta de la cosecha del año, debe tipificar
también la temporada de resurrección, cuando todos los que son de Cristo
resucitarán de los muertos en su venida. Y finalmente,
Más bellamente, así considerado, todo lo demás relacionado con la fiesta de los
tabernáculos corresponde, como el tipo de antitipo, a la revelación de las últimas
cosas, y allí revela su significado espiritual más verdadero y profundo: la alegría,
la reunión, el regocijo con el hijo. y con hija, la plenitud de alegría también para
la viuda y los huérfanos; y esto, no solo para los que están en Israel, sino también
para el extraño, no para Israel, tanto para los gentiles como para los israelitas
debía participar en la festividad de ese día; y, una vez más, el logro pleno de la
consagración más completa, significada en la ofrenda quemada por diez; todos
encuentran su lugar aquí. Y ahora podemos ver por qué nuestro Salvador declaró
(Mateo xiii. 39) que el final de esta era actual debería ser el tiempo de la cosecha;
y cómo Pablo, mirando la futura reunión espiritual, coloca la reunión de los
gentiles (Rom. xi. 25) como una de las últimas cosas. De acuerdo con esta
interpretación del significado típico de esta fiesta, es la de Zech. xiv. encontramos
escrito que en el día predicho del Señor, cuando (ver. 5) el Señor "vendrá, y
todos los santos" con Él, y (ver. 9) "el Señor será Rey sobre toda la tierra ... el
Señor ... uno, y su nombre uno ". entonces (ver. 16) "todos los que quedan de
5. todas las naciones ... subirán de año en año para adorar al Rey, Señor de los
ejércitos, y para celebrar la fiesta de los tabernáculos"; y, además, que la
consagración se realizará tan completamente en ese día que (ver. 20) incluso
sobre las campanas de los caballos se inscribirán las palabras, "¡SANTO AL
SEÑOR!" 2 25) como una de las últimas cosas. De acuerdo con esta interpretación
del significado típico de esta fiesta, es la de Zech. xiv. encontramos escrito que
en el día predicho del Señor, cuando (ver. 5) el Señor "vendrá, y todos los santos"
con Él, y (ver. 9) "el Señor será Rey sobre toda la tierra ... el Señor ... uno, y su
nombre uno ". entonces (ver. 16) "todos los que quedan de todas las naciones
... subirán de año en año para adorar al Rey, Señor de los ejércitos, y para
celebrar la fiesta de los tabernáculos"; y, además, que la consagración se
realizará tan completamente en ese día que (ver. 20) incluso sobre las campanas
de los caballos se inscribirán las palabras, "¡SANTO AL SEÑOR!" 2 25) como una
de las últimas cosas. De acuerdo con esta interpretación del significado típico de
esta fiesta, es la de Zech. xiv. encontramos escrito que en el día predicho del
Señor, cuando (ver. 5) el Señor "vendrá, y todos los santos" con Él, y (ver. 9) "el
Señor será Rey sobre toda la tierra ... el Señor ... uno, y su nombre uno ".
entonces (ver. 16) "todos los que quedan de todas las naciones ... subirán de año
en año para adorar al Rey, Señor de los ejércitos, y para celebrar la fiesta de los
tabernáculos"; y, además, que la consagración se realizará tan completamente
en ese día que (ver. 20) incluso sobre las campanas de los caballos se inscribirán
las palabras, "¡SANTO AL SEÑOR!" 2
Esta larga cita se ha dado en su totalidad porque el Dr. Kellogg presenta
adecuadamente el razonamiento de quienes aplican las fiestas del otoño a los
eventos antitípicos asociados con la segunda venida de Cristo. Bien podría
preguntarse en esta etapa: ¿cómo interpretan entonces esos escritores el
significado de los últimos días del día de la expiación? Y el mismo escritor
pregunta:
Ahora bien, si la fiesta de los tabernáculos se ha interpretado correctamente,
como pre significando en símbolo la finalización de la gran cosecha mundial al
final de la era, ¿la palabra profética revela algo relacionado con las últimas cosas
que precedieron a esa gran cosecha, y, en cierto sentido, preparándose y
marcando el comienzo de ese día, ¿cuál debería ser el antitipo del gran día de la
expiación? 3
Luego procede a sugerir que el antitipo sería el arrepentimiento del Israel literal
y su limpieza del pecado. Este punto de vista de la recuperación de Israel como
el evento significado a este respecto no es peculiar del Dr. Kellogg, pero ha sido
repetido por varios. Estos mismos eruditos generalmente aplican la Fiesta de las
6. Trompetas al mensaje de advertencia del inminente advenimiento de Cristo, y
Mateo 24:14 a menudo se cita a este respecto.
Lo anterior constituye evidencia de que no es una visión peculiarmente adventista
que represente el día de la expiación como una aplicación especial justo antes de
la segunda venida de Cristo. A medida que investigamos más, notemos
particularmente el Apocalipsis. Hay una serie de referencias en Apocalipsis que
emplean imágenes del día de la expiación, y los eruditos no adventistas han
llamado la atención sobre estas.
(Continuará)
1 Sir William Whitla, Daniel y el Apocalipsis de Sir Isaac Newton , pp. 308, 309.
2 SH Kellogg, la Biblia El Libro de los Expositor de Leviticu s, pp. 468-470.
3 Ibíd ., P. 470.