El documento discute el problema creciente de la obesidad y el sobrepeso entre los niños mexicanos. Se atribuye principalmente a un desequilibrio entre calorías consumidas y gastadas, así como cambios en los hábitos alimenticios y de actividad física que han llevado a una dieta más alta en grasas, sal y azúcares y menos actividad. La obesidad infantil aumenta el riesgo de enfermedades como las cardiovasculares y la diabetes. El documento propone medidas preventivas como comer más frutas y verdur