El documento habla sobre los objetivos de la administración financiera del efectivo. El objetivo general es manejar adecuadamente el efectivo para pagar deudas y gastos imprevistos, reduciendo el riesgo de crisis de liquidez. Los objetivos específicos incluyen evitar despilfarros, reducir al mínimo los imprevistos, controlar las inversiones y aprovechar descuentos e inversiones con recuperación inmediata.