La poscosecha de la guayaba requiere fumigación para controlar plagas como el tizón y la antracnosis. Una nutrición equilibrada de la planta es esencial para el desarrollo del fruto. La cosecha comienza a los 4 meses desde la floración, recolectando 1-2 frutos por rama. El acondicionamiento incluye selección, clasificación y almacenamiento a bajas temperaturas para preservar la calidad.