El documento discute la importancia de diseñar experiencias educativas que faciliten el aprendizaje colaborativo. Señala que el aprendizaje es un proceso social y que la formación debe garantizar tanto el aprendizaje independiente como experiencias que permitan la colaboración. También describe brevemente los beneficios y limitaciones del e-learning y tres factores clave a considerar para el aprendizaje colaborativo: la situación de aprendizaje, las características del grupo y la tecnología utilizada.